P'Sun & Nuea

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Nuea había enrollado sus piernas al rededor de mi cintura y yo había puesto más manos en el lava manos mientras me sostenía con fuerza. Tenía los pantalones en los tobillos y la cara en el cuello de mi novio. Esta era la segunda ronda, aún seguíamos en el baño. Ya no hacía nada por tratar de contenerme y trataba de no pensar mucho en que los sirvientes le dijesen algo a los padres de Nuea, por que eso me aterraba y no quería hacer que el momento se acabara.

Nuea me había arañado un poco la espalda, nada que no pudiese sorprtar, y yo trataba de no dejar marcas en su cuello, me había vuelto salvaje. Una de mis manos viajó por su espalda hasta sus muslos, hundi mis dedos en aquella zona para después subir un poco más hasta atrapar su miembro que estaba erecto y reclamaba atención, bombee un par de veces arrancandole un par de gemidos ahogados por mis besos.

Se la estaba clavando tan duro como me daba la razón, y el gemia indicando cuan le gustaba lo que hacía. Ningún hombre puede pensar con claridad cuando está teniendo sexo y yo soy la prueba de ello. Cuando la anticipación de mi llegada se hizo presente, hablé sin pensar.

-Te amo - le susurré al oído justo cuando me venía, me perdí en el maravillosos placer -

Aún estaba aprendiendo a hacer todo eso, solo había tenido sexo con dos personas en el pasado, estaba a nada de los treinta y aún así no tenía ninguna experiencia. Todos podrán creer que yo soy quien pervierte a mi novio, pero resulta ser todo lo contrario.

-P' Sun - acarició mis mejillas mientras sonreía - Te amo - sentí que mis ojos se cristalizaron -

Jamas le había dicho te amo a nadie, excepto claro a mi mascota.

-Phi ¿Estás bien? - asentí, no quería preocuparlo - ¿Te duele algo? -

-No, no yo... Solo soy feliz de estar contigo, aunque tengo miedo a tus padres -

Había muchas más cosas que amo de Nuea que solo su belleza, también es su forma de reír y hacerme reír con sus chistes malos, o apretando mi mejilla si me ve solo un poco serio, y hay cosas de las cuales no soy fan como que me exige que lo tome donde sea y como sea, eso último en realidad me aterra y más después de que me dio la mejor mamada del mundo en el elevador, no pude ni si quiera apartarlo de mi, con el no puedo hacer nada. Nuea también marca su territorio siempre y más si se siente solo un pcoo amenazado.

Tengo un trabajo fijo desde hace unas semanas siendo maestro de inglés en una preparatoria cerca de mi departamento, el trabajo es bueno y la paga, y lo importate es que casi todos los días Nuea aparece frente a mi trabajo para ir juntos a cualquier lado aunque a veces mi novio exagera, estuvo enojado conmigo por quedarme a resolver las dudas de unas alumnas, estuvo enojado toda la tarde conmigo y no me dejó ni abrazarlo, yo no entendía que sucedía ahí, yo solo era un maestro y hacía lo que me tocaba hacer, enseñar.

Esta vez, que Nuea me envió un mensaje en line, al parecer ya estaba esperando fuera de la escuela, ya había terminado mi turno así que podía irme tranquilo con mi novio, aunque había estado actuando extraño sobre nuestra comida del día de hoy, suele hacerme eso, justo como cuando me presentó a sus amigos, me avisó cuando íbamos camino al lugar y tenia la sensación de que sería igual.

-Maestro Sun - un grupo de chicos me detuvo antes de salir - Necesitamos que nos resuelva una duda antes de irse, para poder terminar la tarea de mañana -

-Claro - regresé sobre mis pasos - ¿Qué parte no lograron entender? -

-Aquí - una de las chicas sacó su libreta para ponerla sobre el escritorio - Es que no puedo entender -