Cap1.

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Mi nombre es Olivia Blossom, es un placer.
Trataré de poneros al día rápido, nací en Londres, Inglaterra, junto a mis padres George y Rose Blossom, pero no éramos una familia tradicional, mi padre trabajaba como contable en una empresa la cual le quitaba las ganas de vivir para que mentir, además no pasaba por casa para algo que no fuera dormir y siempre acababa discutiendo con mi madre, realmente el amor entre ellos había desaparecido hacía mucho tiempo, mi madre se encargaba de cuidar de mi, a su manera, ya que nada más yo aprender lo básico en la vida como caminar y hablar, la que cuidaba de mi era yo misma, mi madre consiguió trabajo como camarera en un bar cuando yo tenía tan solo cinco años y medio, yo pasaba las mañanas en el colegio, las tardes con mi madre y las noches con mi padre.

Hasta que mi madre se apegó demasiado al alcohol que se dedicaba a vender, no llegó a casa a la misma hora de siempre, lo que provocó que mi padre me llevase al trabajo con él y le regañasen por ello, esa situación se repitió más de una vez.
Entonces fue cuando él empezó a buscar otro trabajo, uno mejor, donde pudiera mantenerme a mi y darnos una vida mejor.

Así fue como conoció a Marie, una cantante de ópera londinense muy conocida cuando yo tenía ya siete años, y como no, no tardó en enamorarse de ella, aunque nunca entendí el porque, ella era una mujer egoísta y caprichosa como cualquier niña rica y mimada de este país, pero como a todas ellas, no le faltaba belleza.
Evidentemente, mis padres se separaron al tiempo y yo viví bajo la custodia de mi padre desde entonces. Veía a mi madre una vez a la semana, luego cada dos y así hasta que ella dejó de venir, para entonces yo ya tenía diez años y mi independencia desarrollada por completo.

Cambié de colegio varias veces por mudanzas, ahora estoy en un instituto público, junto a mi mejor amiga y prácticamente hermana, Emily Jenkins, ha estado a mi lado desde los once años y poco, básicamente llevamos cinco años juntas, bueno esto es lo que tenéis que saber si o si para yo poder empezar esta historia, mi historia.

Emily y yo estudiábamos juntas, nuestro último año en el instituto.
Por suerte no vivía muy lejos de ahí, mi padre, Marie y yo compartíamos un apartamento de buena calidad a tan solo quince minutos andando de allí.

Cuando voy con Emily a clase y no nos ha dado tiempo de desayunar, solemos ir a tomar un café por lo menos a la cafetería de la esquina.

Mi vida era bastante tranquila, seguía mi rutina, no había más cambios a los que adaptarse...

Pero ya tenía que abrir la boca.

Estaba esperando a Emily sentada en la barra de la «Cafetería Atardecer», ese es su nombre, y de repente entró un chico de aspecto cansado y pelo de color azabache. Él entró serio y malhumorado a sentarse también en la barra, mientras que yo me tomaba mi café tranquilamente.

- ¡Buenos días compañero! - Exclamó John el mesero, tan sonriente como siempre. John era un buen hombre, gran amigo de mi padre desde que tengo memoria. - ¿Qué puedo servirle? - Preguntó.

- No son tan buenos John, tengo mucho trabajo, tomaré un café solo por favor. - Respondió.

- No diga eso muchacho, aún es temprano. - Él solo suspiró, entonces Emily entró bostezando.

- Me estoy muriendo de sueño, ¿por qué las clases son tan temprano? -

- Ni idea, bueno vamos o llegaremos tarde, John te pago esta tarde nada más salir de clase, ten un buen día. - Me despedí correctamente y me fui.

Pude ver como ese chico se me quedó mirando mientras salía con Emily.

Una vez en clase, teníamos tecnología a primera hora. Estaba cansada.

Además mi sitio en clase entraba en los cinco peores desde mi punto de vista, era junto a la ventana y siempre tenía que abrirla y cerrarla cuando me ordenaban.

- Olivia ¿Podrías cerrar la ventana por favor? - Dijo el profesor, seguidamente la cerré. - Gracias, aún es muy temprano para abrirla y con está lluvia la clase se va a inundar, bien empecemos con la clase de hoy. - Lo siguiente no lo recuerdo muy bien, estaba más pendiente a la lluvia torrencial que veía a través de la ventana que de la explicación del profesor.

Emily me explicó algo de un trabajo de clase que llevaríamos a cabo durante el siguiente trimestre, aunque no supo darme detalles ya que ella tampoco estaba prestando atención.

Faltaba un mes para mi cumpleaños, una fecha que me aterraba.

En la última clase fue todo muy normal, aburrido, como siempre... hasta que en la mitad de la hora de literatura vi a un grupito de chicas de unos asientos más adelante cuchicheando como locas y mirando por mi ventana, así que decido mirar yo también por simple curiosidad.

Y para mi sorpresa veo a otro grupo de chicos de más o menos nuestra edad viendo sus apariencias, y bueno entre ellos veo a alguien familiar, con un largo abrigo negro, y entonces me di cuenta...

Era el chico de la cafetería, tenía el mismo rostro cansado que esa mañana.

Pero está vez estaba hablando con mi profesor de tecnología, junto a 5 chicos más. Y en ese instante se dio cuenta de mi presencia creando un contacto visual bastante cortante, me cohibí volviendo la mirada a mi clase de inglés. A los pocos minutos, se marcharon dejando un silencio fuera del aula hasta el final del día, cuando estaba recogiendo mis cosas dirijo mi mirada a Emily y así irnos juntas.

Pero antes de irnos, me di cuenta de que olvidé mi libro de química y necesitaba estudiarme bien el tema que estábamos dando porque no entendía absolutamente nada, así que le dije a Emily que me esperase directamente en el café y luego fuéramos a mi casa andando.

Total, entro en la clase con algo de prisa para no hacer esperar a Emily pero no encontraba mi libro. Rebusqué en mi pupitre y en mi taquilla y nada.

- ¿Buscas algo? - Preguntó una voz detrás de mi. Me di la vuelta sobresaltada y vi a aquel chico apoyado en el marco de la puerta. - Lo siento, no era mi intención asustarte. -

- No te preocupes, solo estoy buscando mi libro de química. - Respondí.

- ¿Has mirado en tu mochila? - Preguntó riendo, cerré mi taquilla para demostrar que el libro no estaba en mi mochila. Y mientras la abría...

- Volví hasta aquí porque no lo tengo yo pero si quieres te lo demues...- Ahí estaba el maldito libro.

- ¿Está ahí verdad? - Dijo con tono engreído.

- Olvídalo, lo habré dejado en casa. - Contesté.

- Seguro. - Respondió. - ¿Quieres que te acompañe a la salida...? [Silencio absoluto] Ahora es cuando me dices tu nombre. - Dijo él.

- Más quisieras. - Dije cruzando mis brazos seriamente.

- ¡Olivia! ¿Estás aquí? - Era Emily. - Ah aquí estás Liv... ¿Eh, quién es él? - Preguntó confusa.

- Mierda [Susurré], que más da, vámonos ya antes de que Heather piense que nos hemos ido sin ella. -

- Hasta otra. - Se despidió el chico misterioso a la vez que nos fuimos.

- Así que Olivia... Interesante. -

Silencio.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora