El descendiente

Chico de carita regordeta.

Kim Hyunjin

La confusión solo llega a nosotros cuando tenemos que tomar una decisión, hablo que cualquier tipo de decisión, varía desde que tipo de calzado usaremos, hasta el rumbo que tomara tu vida, en ocasiones, el miedo no nos deja ver las cosas claramente, nos detiene de hacer locuras, pero también nos impide crecer ¿Saben a lo que me refiero? Por si aún no lo entienden, una persona me dijo una vez, "tener miedo te hace ser como los demás, te hace uno más, el mundo es demasiado grande para ser uno más", cuando te atreves a hacer eso que te causaba tanto miedo te sientes poderoso, así que, por que no sentirnos poderosos siempre

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Me encuentro en la lejanía de aquellos valles verdes antes mencionados, en algunas ocasiones me gusta alejarme de todo y disfrutar la naturaleza, madre ha dicho que no debo venir aquí, dice que es peligroso, pero enserio me gusta, sigo pensando en la respuesta a mi pregunta, el que pasaría si me alejo de todo por un tiempo, pero no puedo ser tan egoísta, no cuando mi hermano pequeño me necesita

-Ey Hyun, quieres venir con nosotros

- ¿A dónde, se puede saber?

- Tu primera misión, y es muy importante

Ahora mismo me encontraba junto al escuadrón de mi hermano, nos acompañaban un par de sirvientes. Por lo poco que escuche estábamos buscando algo muy valiosos, pero aún no sé qué es.

-Minho, podrías decirme que estamos buscando

-No que Hyunjin, si no a quien

-No comprendo lo que me dices, porque al rey le interesa tanto encontrar a una persona

-Los reportes dicen que es alguien místico

-Eso es absurdo, la magia y todas sus creaturas se extinguieron hace mucho tiempo, ni si quiera se sabe si fueron ciertas o fueron creadas en la imaginación de algún lunático

-Para eso estamos aquí, para averiguar si la información que nos reportaron es cierta

-Pues yo creo que es falsa, mira a tu alrededor, enserio crees que hay brujas, grifos o esos lobos extraños que se transforman a voluntad, solo estamos perdiendo el tiempo

-Solo deja de hablar

Sin más seguimos nuestro camino hasta que la noche callo, fue entonces cuando armamos en pequeño campamento, el pelotón no era muy grande, y la mayoría de personas que nos acompañaba eran caballeros, por lo cual yo no era la persona más popular, estaba tan solo como la última hoja que cuelga de un árbol seco a mitad de otoño

- ¿Desea más comida su majestad?

Una cálida y serena voz me saco de mi transé, y entonces lo vi, un joven pequeño, con cara regordeta y escuálido

-Por el momento no, dime, ¿Tu ya comiste?

-No puedo en este momento, tengo que esperar que todos terminen

-Tonterías, siéntate a comer conmigo

-Pero majestad...

-Tu príncipe te lo ordena, anda

Parecía que aquel joven de cara regordeta no había comido en semanas, como es posible que los caballeros no alimenten a sus sirvientes, eran una bola de barbaros

-Por cierto, no pregunte tu nombre, ¿Cuál es?

-Mi nombre es Han Jisung

-Es un gusto conocerte, supongo que ya sabes quién soy, pero aun así me presentare, soy el príncipe de la dinastía Kim, el gran Kim Hyunjin, y dime ¿Qué piensas acerca de esta misión?

-Yo no debería estar hablando con usted...

-Patrañas, dime qué opinas, solo quiero hablar con alguien decente, y esa bola de orangutanes apestosos no es lo que busco

-Pero usted es el príncipe y yo un simple sirviente

-Han Jisung, si algo he aprendido, es que los títulos no significan nada, naces con ellos, así que Han Jisung, no tienes de qué preocuparte

-Bueno, yo opino que es emocionante –Me contesto alegre-

-¿Enserio? Yo pienso que es una pérdida de tiempo, para que buscar algo que no existe

-Si me permite señor, creo que siempre tenemos que buscar lo imposible. Lo siento, no quise contradecirlo

-Eres tierno, supongo que es cierto, me gusta tu lógica

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Gracias por leer