Los edificios

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Bella King.

Estoy subiendo al elevador, en verdad, voy a matar a ese chico, pero primero lo primero, tengo que ir a mi cuarto, está el el quinto piso, me dan un poquito de miedo las alturas pero no importa, me asignaron ese cuarto.

Dobló a la derecha, y... Ajá! Es aquí, quinto piso, habitación número 555, las habitaciones están todas revueltas, esto no me gusta, si nos me aprendo el camino seguramente me voy a perder. Me dispongo a tocar la puerta y una chica pelirroja al parecer natural, piel blanca, pecas en todo el rostro, delgada, alta, maso menos a de medir 1.67, tiene una sudadera negra y un pans gris con unos tenis blancos, abre la puerta me ve de pies a cabeza, sonríe y habla.

- debes de ser Bella King, sierto? - dice sonriendo, esa chica me causa mucha tranquilidad

- si, soy yo, Bella King, y tu eres?

- soy Yaquelin Martínez, mucho gusto

-  igual, mucho gusto

- pasa Bella - se hizo un lado dejándome ver toda la habitación, me dispongo entrar, Y de lo primero que percató es que es una sala con dos puertas color blanco al fondo el cuarto es color gris, tiene una tele, sillones, una mesa, una mueble repleto de libros, plantas, fotografías, y una chica rubia, le calculo 1.60 de altura, sudadera negra, falda blanca y tenis blancos, estaba sentada en el sillón.

- Dani!!, Ya llegó Bella King

- King? Bella King? - dice seria,  viendo su teléfono y al parecer escribiendo algo

- si, es ella

- es la que fue cómplice de la masacre de el colegio ******? - dice parándose de el sillón, y dejando a un lado su celular

- si mensa

- hola! Soy Daniela Flores, un gusto, soy tu fan - dijo acercando se  a mí con una gran sonrisa en la cara tomo mi mano y empezó a estrechar la sin parar

- pues gracias?, Un gusto, pero yo no soy cómplice de la masacre

- jaja, De verdad eres tan graciosa, te admiro mucho, y aún en el manicomio sigues diciendo que no eres tú, eso es muy admirable

- pero es que no fuí yo

- y si no fuiste tú entonces quién fue

- un compañero que está loco, ha y lo peor, que está en este lugar

- se nota que jamás has estado en un lugar como, bueno, este - dijo la peliroja recargandose en el mueble repleto de libros

- enserió?

- si, eres demasiado, como decirlo, presumida?, Arrogante tal vez - dize de nuevo la peliroja viendo el techo pensativa

- Arrogante, enserió? - dije sarcásticamente y arrogante mente, para que dijeran que soy arrogante con gusto

- no, no quise decir eso, bueno si, pero no

- da igual, la directora de este lugar me dijo que me iban a decir las reglas y no se que más

- si, es cierto, bueno pues, el desayuno es desde las 7 a las 8:30 de la mañana - dijo la rubia caminando hacia un refrigerador

- después son las clases de 10 de la mañana a las 2:30 de la tarde - dijo la pelirroja yendo hacia un sillón

- la comida es de las 3 a las 4:30 de la tarde - dijo la rubia quitándole la tapa a un refresco

- después es la última clase a las 5 y termina a las 6, después puedes hacer "lo que quieras" - dijo la pelirroja resaltando el "lo que quieras y acostando se en el sillón

- por qué dices "lo que quieras" de esa manera?

- porque, al decirle "lo que quieras" quiero decir que si tú quieres pintar, pues pintar, si tú quieres regar las flores, puedes regar las flores, si tú quieres ir a tu cuarto, pues ir tu cuarto, realmente son limitadas las opciones que tienes para hacer en tu tiempo libre y todas son aburridas

- bueno pues y veré qué es lo que voy a hacer

- bueno, por ahora vas a tener que pensar en ir a el comedor a cenar por qué ya casi es hora de cenar

- bien veamos

Salimos del edificio y al parecer todos los edificios que había visto mientras subíamos la montaña, no estaban ahí solamente de adorno, 1 de ellos es el comedor, y creo que otro es la "escuela", nos dirigimos cuesta abajo hacia hasta que vimos un edificio de dos pisos, color blanco, con muchas ventanas y una puerta de cristal que dejaba ver el interior, antes de entrar al edificio puede ver gracias a las ventanas y la grande puerta de cristal a muchos niños de diferentes edades con una bandeja de comida como si estuviesen en un colegio, muchas bancas color azul marino, los niños parecían muy tranquilos de hecho dude que ese lugar fuese un manicomio. Al ver a todos esos niños ahí adentro, mi cabeza se llenó de dudas y comencé a preguntarme la razón del porque Jacqueline y Daniela estaban en ese manicomio, a simple vista ambas parecían muy buenas personas pero yo sé mejor que nadie que las apariencias engañan.

- Jacqueline, Daniela, tenemos que hablar cuando volvamos a la habitación - ambas me miraron con una cara de confusión e intriga pero ambas solo asintieron con la cabeza.

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- y? De qué querías hablar he King? - dijo la hermosa Daniela sentando se en el sillón individual

- por qué están aquí? - dije sin más rodeos, quería saber, debía saber, no pensaba quedarme en esa habitación con dos personas que tal ves sean unas psicópatas

- fácil mi querida Bella, yo estoy aquí por qué asesine a mis padres y hermanos - dijo Yaquelin sin tartamudear, al parecer estaba orgullosa de ello, lo decía tan calmada que me dió escalofríos

- yo estoy aquí por la misma razón que tú King, solo que con un hospital - Daniela lo dijo con el mismo sentimiento que Yaquelin, dios estás dos están locas

- así de fácil?

- que quieres decir King?

- miren, lo dicen tan fácil, sin remordimiento alguno, ¿no les duele, o se arrepienten de lo que hicieron?

- no, por qué lo haríamos Bella?

- por qué son seres humanos, deberían tener alguna emoción que no sea orgullo o felicidad, no lo sé, tal ves, no sienten remordimiento?

- claro que no King, nosotras fuimos criadas así

- Daniela, puedes dejar de llamarme por mi apellido?

- no, jaja, me da igual si te gusta o no, tal ves sea tu fan, pero yo te voy a llamar como yo quiera - ok está bien, si Yaquelin me dice Bella y Daniela me dice King, va a ser un poco más fácil distinguir quién me está hablando

- bien, me da igual, pero, ¿ Cómo que las criaron así?

- verás Bella, nosotras venimos de una familia en la que está bien matar a las demás personas, incluso, sí la ley dice que está mal, nuestras familias tienen esa mentalidad, de que la muerte siempre te va a alcanzar, todos morimos algún día, pero, los más "fuertes" por así decirlo, viven más que los más "débiles", en esta vida, si no te defiendes, te matan, de hecho, en mi caso, no mate a mi familia por qué si, yo estaba compitiendo contra ellos, es un juego típico en mi familia, es como una tradición, en el caso de Daniela, fue decisión propia - Dijo tan fácil, aunque, para mí no tenía sentido, al parecer para ellas si, y bueno, no parecen malas personas.

Estaba a punto de disculparme por haberme metido tanto en su vida cuando tocaron la puerta Daniela se paró a abrir la puerta, en cuanto la abrió escuché una vos masculina, me voltee para ver quién era, pero antes de que pudiera ver a esa persona, Daniela serró la puerta, le puso seguro, me miró y abrió la boca para hablar

~ A LA LUZ DE LAS ESTRELLAS ~

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