Capítulo 1. Sasuke y yo

38 3 5
                                    

Ha pasado mucho tiempo desde que sentí esa agitación en mi corazón debido a otra persona, la última vez, fue hace casi diez años por mi mejor amigo, acababa de pasar por un rompimiento doloroso, estaba destrozada, fue en ese tiempo que nos conocimos, tomábamos algunas clases juntos en la universidad, al principio no lo veía de esa forma, estaba tan sumida en mi dolor, que el tiempo se pasaba con lentitud, todo era monótono, no tenía interés en nada ni en nadie, solo quería estar sola, al poco tiempo el también rompió con su novia, nos fuimos acercando, y sin darme cuenta, el llenó de color poco a poco el mundo grisáceo en el que vivía, con el tiempo nos empezamos a acercar, más y más, no había día que no habláramos, cada que teníamos tiempo libre lo pasábamos juntos, las conversaciones no tenían fin, el me incluía en sus proyectos de música y yo a él en mis proyectos otakus, cuando lo noté ya era una parte importante en mi vida y el cariño que sentía por el incrementaba a gran velocidad, las cosas iban bien, hasta ese día, que por primera vez noté ese latido acelerado en mi corazón.

- ¡Sakura! – Me abrazó como siempre lo hacía al vernos – Vamos, tengo hambre -La comida china siempre era la opción -.

-Si... si, lo siento, en ese bufete tienen buenos precios veamos que tal está la comida – No quise darle importancia a lo que sentí, pero tampoco podía dejar de pensar en ello, Sasuke siempre ha sido amable conmigo, nunca ha demostrado otro tipo de interés en mí, y yo tampoco había pensado en el de otra forma-.

-La comida estaba buena, regresemos a este lugar

-Me parece bien, ah, la feria de libros está cerca de aquí, quiero comprar algunos

-Bien -La forma en que me mira, nunca me había importado, me molesta sentirme nerviosa porque sé que no me mira de forma especial y sin embargo aquí estoy pensando de más-.

-Oye Sakura, ¿te dolió el estómago o algo? Te siento un poco rara

-Ah, no, disculpa, estaba pensando en los libros que quiero comprar

-Bien, entonces... ¡Sujétate! -Me cargó de repente y comenzó a dar vueltas conmigo en brazos, era algo que hacíamos seguido, jugábamos como si fuéramos niños, reíamos a todo pulmón, eran tiempos divertidos, así continuamos un poco más de tiempo, hasta que no pude negar más que me había enamorado de él, Dios, no, ¿por qué?, cuando lo veía no podía evitar preguntarme ¿será que él pueda verme de la misma manera? Tenía miedo, si el se enteraba ¿se alejaría de mí?, pero ¿y si me aceptaba? Todo era confuso, me sentía feliz y asustada al mismo tiempo, quería que el supiera mis sentimientos y al mismo tiempo quería ocultárselos, nuestros días juntos seguían como siempre, hasta que mis esfuerzos por ocultar mis sentimientos ante los ojos de otras personas eran inútiles.

-----------------------

-Te gusta Sasuke ¿Verdad?

-¿Qué? -Sentí como mi piel se ponía roja hasta las orejas- Ino qué dices no, no, porqué, ¿por qué lo preguntas?

-Bueno, es obvio, lo miras mucho y cuando están juntos para ti es como si no existiera nadie más.

-... No, es que yo ...

-Vamos Sakura, no es como si estuvieras haciendo algo malo, aunque él es un poco tonto dudo que no lo haya notado

-...

-...Sakura, ¿has pensado en decirle?

-No, me da miedo que nuestra relación cambie o desaparezca, además el siempre deja super claro el tipo de chicas que le gustan y son lo opuesto a mi -Era verdad, creo que en realidad él lo sabía, por eso aunque me seguía tratando de la misma manera como solía hacer, también de repente empezó a hacer comentarios sobre el tipo de chicas que le gustaban, empezó a dirigirse a mi como su "bff" era casi como si se esforzara mucho por dejarme en claro que solo me quería como amiga y que nuestra relación nunca iba a cambiar, eso era un mal indicio para mí, porque no dejaba aperturas para que pudiera hacer algo, me dolía cada que pensaba en eso, pero me dolía mas pensar que podríamos llegar al punto de tratarnos como extraños, por eso me mantenía firme en mi resolución de guardar mis sentimientos para mí.-

Mis sentimientos por tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora