Capítulo 9

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-Ori, ya terminaste por hoy pero hay alguien en la sala que dice que te conoce- me dice mi secretaria.

-Perfecto, gracias- le digo yendo hacia la sala de espera para encontrarme con el chico de la fiesta del otro día.

-Hola Luca- saludó amablemente- ¿Que haces por aquí?

-Hola Oriana, quise tomarte la palabra y pasar por aquí, pero vi que se me hizo un poco tarde-continua- así que pensé si te gustaría ir a cenar algo.

No sabría si sería bueno aceptar, pero era un hombre lindo, muy lindo.

No tanto como Tyl..

Basta de comparar.

-Me encantaría pero...

-Pero...

-Tengo una hija, que va a llegar a mi casa en cualquier momento y debo esperarla. Si quieres puedes venir y comprar comida de camino.

-Si, me gustaría mucho.

-Perfecto, vamos- digo agarrando mi bolso y saliendo con Luca siguiéndome.

🌸🌸🌸

-Bienvenido a mi hogar- lo invito a pasar.

-Es muy bonito- sonríe entrando.

-Gracias.

-A vos por invitarme.

Vamos a la cocina y dejo que se siente en la mesa mientras llevo cubiertos.

Comemos mientas me cuenta de su trabajo y yo del mío.

-Ví fotos tuyas el otro día.

-¿Dónde? ¿Mías?- pregunto confusa.

-Si estás en todos lados, por la marca nueva que llego al país.

-Ah- recuero la campaña de fotos- si, pensé que solo estarían en el catálogo, veo que me equivoqué, tendré que hablar unas cosas más tarde.

-No debes enojarte, sales hermosa, ya lo eres pero sales todavía más increíble.

-Muchas gracias, mi hija también aparece y es todavía más hermosa.

-Perdón por ser irrespetuoso pero ¿estás en pareja?

-No, estoy soltera y ¿tu?

-También y sin hijos aunque me encantaría tener muchos.

Sonrió por su comentario

-Yo tengo una, se llama Isabella.

-¿Y el padre es quien estaba en la fiesta el otro día?

-Algo así- le explicó- todavía no lo sabe, me dejo antes de enterarse, por lo que crié a mi hija sola.

-Lo siento.

-No fue tu culpa, pero no me arrepiento de nada, supongo que las cosas pasan por algo.

-Opinó lo mismo y te felicito.

-Gracias- agradezco antes de ser interrumpida con el sonido del timbre- creo que regreso mi hija.

-Espera, te acompaño, igual ya debería irme.

-Claro.

-Muchas gracias por invitarme- vuelve a agradecerme- me gustaría poder repetir esto de nuevo pronto con más tiempo.

-A mi también.

-¿Te parece que pase por ti alguno de estos días?

-Me encantaría.

-Entonces, hasta luego Oriana- se despide antes de que abra la puerta.

-Hasta l....-Me quedo callada viendo que no me encuentro con mi hija al abrir, sino que con Tyler que tiene un ramo de flores en las manos.

-Hola-saluda Tyler sin haberse dado cuenta de la presencia de Luca.

-¿Qué haces aquí de nuevo?-pregunto irritada.

-¿Tyler?- pregunta Luca.

-¿Liam?-le dice esté.

-Casi, Luca.

-Oh, Leon, cierto.

-Luca-repito yo.

-Que haces aquí, Luke- me ignora.

-Vino a cenar y se llama Luca.

-No me es necesario aprender información insignificante.

-Me parece que es mejor que me vaya retirando- se despide incómodo- nos vemos.

-Lo incomodaste- lo regaño a Tyler cuando entra detrás de mi.

-No debería estar solo en la casa de mi ...

- ¿de tú que?

-De mi vecina.

-¿Por que no? Somos dos personas solteras intentando conocerse.

-No es necesario que conozcas a nadie.

-Yo creo que si, no quiero estar soltera de por vida.

-Me tienes a mi.

-No salgo con personas egocéntricas, manipuladoras, estupidas e idiotas, por lo que no estás entre los candidatos.

-¿Ya puedes perdonarme?

-No, es algo que nunca te podré perdonar- comienzo a subir las escaleras- ya puedes irte está abierto.

-No, no te vayas, espera, hablemos- dice siguiéndome.

-¿De qué? Quieres tener la misma conversación otras vez, donde te repito que me dejaste y tu vuelves a decirme perdón y que vas a intentar recuperarme.

-No, solo quie..

-Basta, cállate, no quiero volver a pensar en eso, no te das cuenta que ya me lastimaste lo suficiente, vete eres libre de estar con quien quieras.

-¿Pero no te das cuenta?

-¿De qué?

-Solo te quiero a ti.

-No lo haces.

-Si que lo hago, nunca dejare de hacerlo.

-Quiero que al salir no estes en esta habitación- digo antes de entrar al baño.

Me baño y cambio rápidamente.

Al abrir no está y me relajo, hasta que veo el cajón del escritorio abierto.

-Mierda- mascullo y los reviso, vacíos.

Las cartas, porque las guarde, debí romperlas.

Mierda.

🌸🌸🌸
Nota autora: Hola!!! De verdad perdonen por tardar en actualizar, es que estoy con muchas cosas y no llego a escribir, ni a revisar los capítulos, así que si ven algún error avísenme así puedo corregirlo.
Gracias por seguir leyendo, ¡los quiero!

Un cliché másDonde viven las historias. Descúbrelo ahora