bathroom number. ⇢larry.

capitulo primero. (pt2)

harry se encontraba nervioso, no lo negaría jamás. Sin embargo, había algo que se inyectó en sus venas desde aquel momento que tecleó aquellos dígitos entre su celular; era obvio lo que era, la adrenalina siempre había sido algo de lo que el mayor había huido.

es decir, ¿a quien le gustaría sentirse al borde de un brote psicótico cuando puedes tener todo a la palma de tu mano?, el control siempre será la clave de una buena vida, o eso pensaba hasta esa mañana. El alto joven treintañero se encontraba sumergido en pensamientos mezclados y sentimientos confundidos mientras su teléfono comenzó a vibrar en su mano.

"digamos que si del uno al diez se trata, conmigo habría sido 1,000/10"

su vista iba de un lado a otro releyendo una y otra vez aquel texto, para ese momento harry había olvidado por completo el principal objetivo de su investigación, en ese instante no era más que un nudo de curiosidad y otros sentimientos que claramente no eran propios de un director de una institución para adolescentes, llevaba tantos años apegándose a un plan de vida que todos esperaban que siguiera, simplemente esto sucedería, en algún momento la bomba explotaría, era solo cuestión de encontrar qué o quién lo ayudaría a que eso sucediera.

con las manos decididas a actuar y la mente nublada por el delirio, el de rizos color chocolate se dispuso a continuar aquella conversación, prometiéndose claro, que este sería el último mensaje.

"no soy de creer todo lo que me dicen, soy más bien de experimentar."

mordiendo su labio por uno de los lados, el mayor dejó su teléfono a un lado y se dispuso a tomar una ducha fría. No era todavía tan valiente como para ayudarse a sí mismo con el problema que la conversación había comenzado a generar en sus pantalones de vestir, no todavía.

-

a la mañana siguiente, Louis se encontraba terminando de arreglar su perfecto atuendo, como era de su agrado, los martes casi siempre vestía con tonos púrpuras; una falda con revuelo acentuaba sus bonitos muslos y definían aún mejor su cintura mientras una camisa blanca de botones iba por dentro, sus zapatos de plataforma color blanco lo hacían ver un poco más alto ya que en realidad su estatura no era la que él preferiría tener. Acomodó sus cosas y salió de su casa con sus audífonos puestos mientras sonaba "34+35", caminaba con pasos decididos y suaves como si se tratara de una pasarela y él, oh, él sabía que todos caían rendidos a sus pies.

por otro lado, harry ya se encontraba en su oficina tomando el café matutino que era su costumbre tomar a primera hora de la mañana para poder ser un humano funcional el resto del día. Revisando su teléfono pudo notar que el número del baño le había escrito de nuevo, su mente rogaba para que eliminara el chat antes de abrirlo y simplemente siguiera con su vida pero era obvio que su cuerpo tenía otros planes mucho más divertidos.

"dime tu nombre, tal vez podamos charlar un rato"

incluso el tono en la cabeza de ambos era completamente obsceno al leer los mensajes recibido o al escribirlos, era como si una tensión increíblemente poderosa se hubiera situado entre ambos y estuviera dispuesta a arrasar con todo a su paso hasta conseguir su objetivo.

"¿tan fácil quieres recibir lo que deseas?, pídelo de buena forma, cariño"

ya no había un camino de regreso, aquello era obvio. Louis al otro lado de la pantalla levantó su mano en medio de la clase y suavemente pidió permiso al señor Tryce para ir al baño. Con un asentimiento el anciano le otorgó la clave para que el menor se levantara de su asiento, tomará su pequeña bolsa de mano donde guardaba artículos de higiene personal y algunos de sus más fieles productos cosméticos, además de su teléfono, y tomará camino a los baños.

al llegar se puso a pensar un momento, podría parecer que el decidido y audaz menor era experto en aquel tema, sin embargo, muy pocas veces había tenido el valor de tener una conversación así con alguien, cabe recalcar que las pocas veces que sucedió, luego del segundo mensaje desapareció del chat para no volver a entrar.

esta vez no había vuelta atrás, ¿cierto?, era el pensamiento que rondaban incansablemente en la cabeza de ambos. No obstante era mucho más complejo que eso, no era el hecho de no tener un botón de emergencia que les otorgara la pauta para huir de aquella excitante trama en la vida de ambos; era el hecho de que ninguno de aquel par deseaba dar un paso para atrás.

buscó en su galería algunas fotos que se había tomado la noche anterior en la intimidad de su habitación, su falda se encontraba levemente levantada dando la discreta invitación al remitente para que coloque sus manos por toda la extensión de los mismos y los acaricie con toque levemente bruscos, era un torbellino de emociones y louis no pensó dos veces antes de enviarlo.

el menor de encargó de utilizar tantos filtros como le fuera posible para que aquella imagen no reflejara nada más allá de lo que él deseaba, siendo sinceros todavía existía la posibilidad de que al otro lado se encontrara con completo asqueroso.

en el piso de arriba, harry se encontraba a un segundo de convertirse en una versión de él mismo que jamás había conocido, su teléfono vibraba sobre su escritorio cuando se aproximó a él y abrió su bandeja de notificaciones, seguido se fue directamente al chat más reciente casi atragantándose con su propia saliva al momento en el que su vista se posó deliberadamente en aquella fotografía que lo invitaba a pecar de manera inimaginables.

-

holaaa.<3

disculpen todos los errores si es que los hay, he perdido el toque pero intento darles la mejor historia que puedo escribir luego de tanto tiempo.