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Se encontraba atado a una silla en un enorme cuarto,todo estaba oscuro y silencioso sin señales de que estuviese acompañado,hasta que de la nada una luz se encendió iluminando todo aquel lugar permitiéndole ver a un hombre sentado en un sofá color rojo a unos pocos metros de el,parecía estar usando una camisa unas tallas más grande que dejaba a la vista un poco de su pecho,su cabello era blanco y caía a ambos lados de su rostro,sus ojos le miraban vaciamente como si de un muñeco se tratase.trago saliva al notar que el desconocido se ponía de pie dirigiéndose a dónde el hasta quedar frente a frente con el.

-vaya,así que tú eres la razón por la que interrumpieron mi siesta?me estás causando muchas molestias metiéndote en asuntos que no te incumben.

-claro que me incumben,es mi deber atrapar delincuentes como tú y desarmar organizaciones tan bajas como está,no me importa quien seas,debes pagar por todo el daño que has causado,Sano Manjiro.

Dijo firme,recibiendo un silencio corto que luego fue roto cuando otros sujetos entraron a la habitación.vestian trajes elegantes siendo coronados por peinados extravagantes,uno de ellos sostenía una katana de la que goteaban  gotas de sangre,este último se poso al lado del peliblanco mientras que los otros dos se posicionaron detrás de la silla.

-que quieres que haga con el?

Pregunto un hombre de cabello rosado.

-si,que haremos con este bastardo?,por su culpa hemos estado perdiendo tiempo y dinero además que los policías han estado sobre nosotros como malditos buitres.

Dijo uno de los tipos de cabello púrpura.

-yo digo que le arranquemos los dedos,uno por uno-dijo el menor de los haitani.

-yo lo rebanare con gustó,nadie trata de hacerle daño a Mikey y sale vivo en el intentó.

Amenazó el hombre de la katana apuntando a su prisionero con esta dejándola a escasos centímetros de su rostro,estaba dispuesto a hacer todo para hacerle pagar a ese chico,no iba a dejar que saliera de ahí con vida después de haber intentado dañar a su rey.

-Ya basta.

Comando firmemente el ojinegro,a lo cual todos obedecieron de inmediato colocándose detrás de el.

-yo decidiré que haremos con el así que cierren la boca-les dijo sin dejar de darles la espalda.

-lo que órdenes-respondio el de cabello rosa guardando su arma.

El pobre policía no sabía que pasaría con el,jamás se sabe que hará una organización como está,son prácticamente impredecibles,razón por la que la ley tiene tantos problemas a la hora de querer atraparlos.observo como el líder se acercaba a él una vez más,trato de controlar sus nervios pero admitía que era bastante intimidante,una sola orden del gran Mikey basta para causar una gran masacre.

-como te llamas?-pregunto tirándole del cabello con fuerza para que le mirara a los ojos.

-T-Takemichi...-respondió temeroso.

-muy bien,Takemichi,desde hoy te declaro nuestra carnada,contigo negociaremos con esos estúpidos policías.ya estamos al tanto de que trabajas con el detective Tachibana,teniéndote a ti el sin duda vendrá a tratar de hacerse el héroe,y cuando ponga un pie cerca de nosotros haré que su cabeza sea un lindo recuerdo de lo que pasa cuando te metes con Bonten.

-el es mucho más listo que tú y todo tu circo de matones,vas a caer Manjiro.

El ya mencionado ni siquiera hizo alguna mueca,solo se limito a liberar el cabello del agente de su agarre para luego limitarse a decir unas cuantas palabras.

-crees que solo tengo un "circo de matones" ?no seas ingenuo,tengo muchos ojos dentro de la ley así como en la política,no hay nada que yo no sepa,se todos sus movimientos,todo lo que hacen,incluso tus superiores saben que es una perdida de tiempo ir en mi contra,y todos los que lo han echo...solo te diré que sus cabezas son un lindo trofeo.te quedarás aquí por un largo tiempo,disfruta tu estancia con nosotros,Takemichi.-habia logrado exactamente lo que quería,el muchacho se veía incrédulo al escuchar sus palabras,sus honorables modelos a seguir solo eran unos peones mas.-Sanzu,llévalo a las celdas.-ordeno,a lo que rápidamente su fiel sirviente obedeció.

En las instalaciones de Bonten,en un especie de sótano,se encontraban unos corredores repletos de celdas dónde encerraban a sus víctimas o donde las asesinaban para no levantar tantas sospechas.el peli rosa abrió la puerta de una de aquellas celdas y empujó bruscamente al pelinegro haciéndole caer en una cama de resortes que se encontraba ahí,fue directamente hacía el y le tomo con fuerza de la cara.

-escucha bien pequeño hijo de perra,si fuera por mi tu cuerpo ya estaría siendo tragado por los malditos gusanos,pero Mikey tiene planes diferentes para ti,solo por eso es que sigues vivo,y te advierto que si intentas la más mínima cosa contra el te haré sufrir una lenta y muy dolorosa muerte.

Amenazó Sanzu,el haría cualquier cosa para proteger a Mikey,sin titubear ante nada ni nadie.

-por que lo proteges?si no estuvieras con el podrías ser una persona normal,sin tener que lastimar a nadie y ganandote la vida de una manera decente.

-callate!-le dió un puñetazo con su mano libre-Tu no sabes nada sobre mi o sobre el!no me interesa tener una vida normal,me gusta bastante mi vida así como está,no necesito tus discursos bonachones,no me convenceras de traicionarlo,en esta organización la lealtad nos sobra,a comparación de ustedes sucios policías de mierda nosotros si somos perros leales.-solto a Takemichi de golpe quien se froto el lugar donde le había golpeado.

Ahí se quedó por varias horas hasta el anochecer,estaba completamente solo y la única compañía que tenía era la luz del bombillo que se encontraba en el techo,esperaba que Naoto no tardará demasiado en encontrarlo,siempre le tocó poner a varias personas tras las rejas pero a él nunca le había tocado estar en esa situación,a decir verdad ahora comprendía un poco más el por qué a algunos presos les daba miedo estar ahí.

-suspiro-por favor ven por mi,Naoto...

Veneno[Mikey × Takemichi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora