Siempre he amado tus alas, siempre las he sentido tan bonitas, tan suaves y ligeras que sentía que un roce de ellas era una caricia de las nubes
Siempre he envidiado que volarás a donde tú quisieras y siempre lo has hecho ver tan sencillo como si no te pesaran, como si no dejaras nada atrás, como si nada te molestará
No sé si este mirando mejor tus alas, no sé si se han vuelto así con el tiempo pero rocé tus alas esperando esa caricia
Y me corte con ellas, impregnada de mi propia sangre inaudita sobre el hecho de que al mirar hacia arriba solo vi miles de hojas afiladas que simulaban tus plumas
Intente darte una caricia cálida y volví a cortarme y otra y otra y otra vez
Había tanta sangre mía que había un río de lava ...
No vi que intentarás detenerme no vi que me socorrieras y nisiquiera pude preguntarme Ami misma que había pasado
Tan solo pude preguntarme
¿Dónde están mis amados ojos como el océano?
ESTÁS LEYENDO
Nuestro arte
Roman d'amourOs presentamos más que una historia nuestra propia obra de arte un arte lleno de amor, pasión, lujuria, desgracias, sonrisas, donde nuestros corazones descansan y se parten en momentos difíciles a causa de este amor Dos enamorados que funden sus...