Capítulo 7: Fotografía familiar.

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El clima en Londres nunca había sido bueno y ese día no era la excepción. Después de terminar con sus pendientes en la cafetería y el restaurante habían llevado a Evangeline al lugar que le habían prometido.

Era un pequeño parque cerca de casa, con columpios, resbaladillas, pasamanos y algunos juegos más. Todos estaban perfectamente abrigados por el frío, Ethan estaba en la carreola durmiendo, cubierto con una cobija encima de la carreola para protegerlo del frío y Louis estaba sentado en la banca cuidandolo mientras Harry supervisaba de cerca a Evangeline a quien ahora estaba empujando lentamente en uno de los columpios.

Louis sonrió cuando su pequeña agitó su manita hacia él y le devolvió el gesto, aunque siempre estaban ocupados en algo se las arreglaban para pasar tiempo con sus hijos, sabía que Evangeline era tranquila y era rara la vez que hiciera un berrinche, aún cuando la llevaban a su trabajo con ellos Evangeline siempre estaba tranquila pintando su cuaderno para colorear, vigilando el sueño de su hermanito o mientras Louis firmaba los cheques de pago de sus empleados le enseñaba a hablar correctamente, dormía sus siestas y cuando no estaba con Louis estaba con Harry, preguntándole para que era cualquier cosa que viera en su oficina o viendo caricaturas en la televisión que tenían.

No era fácil, pero así era su vida.

—Mami, ven—. La pequeña grito a lo lejos desde el columpio y el omega tomo la carreola para acercarse a ellos.

—¿Que sucede?.

—Sube mami—. Su hija señaló el columpio a su lado

—Pero estoy cuidando de tu hermanito.

—Sube omega—Harry sonrió con cierto brillo en sus ojos y tomo la carreola para llevarlo cerca de él. —Ethan está durmiendo aún.

Dudoso subió al columpio y antes de decir algo Harry ya estaba empujándolo.

—¡Harry!—El omega se sorprendió al sentir sus manos detrás de él y ser empujado.

—Shhh, Ethan está durmiendo.

—Yo, yo—La pequeña se acomodo en el columpio para que su padre la empujara despacio cómo lo estaba haciendo.

Después Harry volvió a empujar a Louis haciendo que fuese más alto

—No, no Harry—Louis cerró los ojos y una leve risita escapó de sus labios cuando un recuerdo llegó a su mente.

—Harry no... no me sueltes—tragó saliva con sus ojos cerrados, temblaba igual que una hoja de papel —Harry nos vamos a morir aquí.

—Shhh tranquilo, tu quisiste subir

—¡Pero yo no sabía que se iba a sentir así!—Louis chillo de nuevo mientras apretaba la mano del alfa —Harry, diles que nos bajen.

—Lou tranquilo, te juro que no va a pasar nada, confía en mí.

Después de unas vueltas más el juego paro, el personal les quitó la seguridad y Louis corrió como pudo hasta un bote, vómito mientras Harry sobaba su espalda.

—No subiremos nunca más a juegos extremos.

El alfa dejo de empujarlo, contagiado por la felicidad que habían creado y cuando el columpio paro el omega se levantó, dejando que Evangeline se quedara un poco más cuando se lo pidió.

—¿Sabes que estaba recordando mientras estaba en el columpio?—El alfa lo miró con duda. —Recordé... Aquella vez cuando tuvimos nuestra primera cita, me llevaste a la feria—. Ambos se miraban a los ojos, el alfa sonrió poco a poco con cierto brillo en sus ojos.

Culinary Love 2: El recetarioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora