Hoy, la lluvia no cesa. Ando mojada por las calles sin rumbo y dolorosos recuerdos no dejan de aparecer en mi mente. Es extraño, los buenos no podrás volver a vivirlos pero si rememoras los malos, seguirás sintiendo lo que en un principio sentiste.
Y es que cada tempestad al final tiene su sosiego; cada grito tendrá su sielencio, y cada mar revuelto, su mar en calma... Pero esta vez no, esta vez no creo ser capaz de llegar al estado de serenidad. Todo en mi cabeza es un lío, en mi garganta un nudo y en mi corazón una tortura. Me hayo perdida.
Lo bueno de los chubascos es que no se nota si lloras. Y en éste momento doy gracias porque esté lloviendo. Ahora sólo queda esperar a ese estado en el que no te importa nada de lo pasado, pero sabes realmente, que jamás llegará.
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Trozos de mí
RandomTextos que realmente son partes de mí. No los busquéis sentido ya que muchos no lo tendrán. Espero que les guste.
