Last Straw

2. Domador De Ovejas

Mientras la mentes brillantes se torturan por un mundo mejor, los idiotas que lo conforman lo destruyen todo para que nadie mas lo disfrute.

-Jorge Salinas

I

Prefacio.
Nadie quería ver la puerta oscura del fracaso; podías entrar por ella y asomar la cabeza para poder saber que tu miedo mas profundo no sería ni una sombra de ti mismo cuando estés solo. Ese pequeño miedo a ser descubierto que siempre existió como la falla del sistema y vivir en la mente de quienes te vean y conozcan como una efigie de los resultados de una vida llevada al vacio.
Cada mañana, en el frío del paramo o el calor del sol había armonía en la ventana de la calle Federico Guzmán. Sebastián Conde; quien vivía tras los cristales, con suerte de vivir expuesto a una intoxicación fugaz de la vida tras su ventana, una marea de personas que buscaban una vida mas acomodada, viendo desde la cima como todo cae y regresa en un ciclo interminable de reluciente esplendor, sin sufrimiento y sin segunda opción a la vida que se escoge.
Una casa en la cima de la montaña, viendo de soslayo al resto de construcciones que se erguen y proclaman, con una muralla de ladrillo rojo y rejas negras de enredaderas sobre ellas y un interior amplio que llevaba directamente a un pasillo a la cima de la casa, donde habían dos cobijas en el suelo y un par de sillas de jardín. Desde esa ubicación en el techo se podía ver la meseta y el centro comercial del centro de la ciudad.
Cuando yousouff salió de su casa pensó que era una buena oportunidad para detenerse y observar en que situación se encontraba.

-No hay Dios, tampoco hay destino, no debería sentir este vacío en mi estomago, tampoco debería sentir culpa por lo que hago, pero aun así todo brota de mi interior, como una cascada que desborda los causes de un rio de mierda.

Sebastian Conde titubeo un buen rato frente a el vacío, su mente a pesar de su cuerpo estático no paraba de pensar en aquellas cosas que pasaron en su casa ese día; lo mas probable es que su porvenir seria un infierno, pero el reto mas grande para el individuo moderno siempre fue soltar la manzana del edén.

Después de casi media hora en la que su mente trato de huir de su presente y sacrificar su alma, decidió no cambiar nada y aceptar que la tristeza lo consuma. Las condiciones que se le imponían, después no tenían nada de malo, así que bajo de el techo.

Su cuerpo lleno de la vileza de su vida mal sembrada y su sombra distante a la realidad bajo las gradas, tomo un abrigo de la puerta y salió.
al comedor se percato de unac00 presencia triste y cansada, era su madre haciendo lo de siempre; escaparse y fumarse un cigarrillo en el patio, pero al ver a su hijo una fuerza mayor la detuvo para hablar con él sobre cosas que tenia atorada en el pecho al ver tantos cambios en su hijo.

-Mijo ¿Qué son estas horas de comer?-dijo con una cara severa de preocupación.

-Lo siento, estaba con visitas, dime madre ¿Cómo te encuentras?-Mateo conocía a su mamá y la postura que adopto era para decirle algo que ella consideraba importante.

-No me gusta que invites tan seguidos a tus amistades, trata de tener mas equilibrio entre lo positivo y lo negativo.

-¿Algo de ellos te esta molestando?

-No realmente, solo pienso que deberías dedicarte mas al colegio y menos a ser el perfecto idiota de tus amigos, siempre has sido un ejemplo, y como tal, debes tener amigos que también lo sean.

-Lo creas o no, mis amistades suelen ser muy ejemplares.

-Hijo, si te sientes solo recuerda que eres el orgullo de esta casa, la comida esta en el microondas.

Una ves acabo la interacción Mateo espero pacientemente en su teléfono a que su madre saliera para fumarse su tabaco y cuando ella por fin salió por la puerta fue a la cocina y saco del microondas la comida, se sentó e hizo una oración rápida, y solo entonces empezó a comer, Una ves comiendo no pudo evitar recordar la conversación que tuvo con Elisa, el remordimiento que sentía ahora que ella conocía su secreto no le dejara ver claramente la solución mas lógica a su problema y en su lugar solamente sentía que no hacer nada con su situación era mas conveniente.