Last Straw

I. reanimation'.

I

La vida dentro y fuera de los momentos mas preciados que pude hallar en mi vida estaban llenos de esa estupida y verdaderamente tenebrosa niebla que nace de la pequeña calle que esta afuera, todo llena de aire y de alguna forma calor y muerte.
Mi mirada iba tan lejos de empezar a ser igualaba a aquel momento en que perdí su mirada, pura incertidumbre y gran parte llena de brillo, era como estar viendo a Dios, perdía en la forma de ella y en su mirada muchísimo más de lo que cualquiera se imagina.

 no se define su condición por sus elementos, el humano siendo una especie mas pierde así la capacidad de ver dentro de si mismo deja de ser un objeto y se convierte en la vida. La única pregunta válida para la aversión a la esencia es la vana excusa de Dios, aquel que sabe y reconoce lo que cada uno es, la excusa por la que todo hombre ha matado o convertido su casa en templo.

Cada pregunta que nace por odio halla un lugar donde esconder el caos más profundo que a existido en el mundo, esa parte motora que mueve el alma y sacude los tímpanos necesitaba siempre de una excusa para dar órdenes, ese odio tan real frente a otros y tan muerto como parte de lo que realmente significaba amar a alguien.

El día 12 de marzo, cerca de lo que solía un lugar más, la onda viviente de negativismo rompió por partes lo bueno de un simple un corazón que soporto la astucia y artimañas mal pensadas en aras de una vida mas cómoda a costa de otra persona. El destino cierto e impensado maldijo el rumbo con adicciones semirreales que traían a los recuerdos una parte mejor de un pasado triste y un porvenir mucho más incierto que el mal que fue arrojado hacia él en debilidad y certeza.

Un momento apenas visible en el mapa de la ciudad, inesperado y realistamente repetitivo hizo de un hombre una alma más. La vista llena de sangre y aberrante con sus pequeños detalles de cerca hacia fácil comprender a todos de que se trataba el ruido exagerado que venía sin fin hacia el mismo fin que habrían de evitar o copiar o sin mayor suerte destruir. Marcelo López, aquel que reunía la atención de todos en el pequeño escándalo se percataba de que el mal que rondaba su mente sería finalmente lo que destruya su máscara. Las lágrimas falsas movían un mundo entero, pero las de Marcelo solo endurecían a su enemigo, no sabría cómo o cuando, pero el final de su historia era amargo como el inicio.

Dentro de su instituto habían pocas cosas que aborrezcan la carne o sus placeres más pequeños la vista de una persona normal hacia pensar en lo monótono que era vivir en esa jaula de entrenamiento, cada mañana agradecían en la capilla por lo simple y dentro de sus corazones guardaban lo vano para mantener arriba el animo de destruir lo que odian de la institución, pensando apenas en ese cambio que querían para el mundo, dentro de la institución poseían la fuerza para poder mantenerse sin fallo alguno como ganadores de la verdad. Fuera de la institución eran unos diablos que aborrecían lo perfecto de la creación humana que lejos del refugió no era muy distinto lo que soñaban de lo que creían y aún así pensaban en mantener todo unido.
Ese día en que las palabras alcanzaron los sueños y los pensamientos penetraron convicciones marcos desechos lo ultimo que tenía de si en su corazón, se expulsó a si mismo de ahí y vivió en el infierno por amor. Las vistas favoritas de Dios son aquellas que solo los mortales pueden disfrutar pensaba lejanamente Marcelo, solo un poco de suerte puede hacer que el mar de estrellas me den lo que ansiaban ocultar pero no hay como en esta vida un juego parecido al de Dios, ni siquiera en los pares más perfectos, podría empezar señalando lo común y aún así odiar el resultado completo, ¿por qué?,¿Por qué yo tan solo amo al ver y olvido lo inútilmente desperdiciado de este pequeño rincón?. Un pequeño sollozo que llegó a oídos de su novia sin poder de hecho imaginar que pensaba.
Tus ojos mortales o infinitos saben lo que es perder, no pueden siquiera imaginar lo que pienso ¿verdad? Es solo cuestión de tiempo, no tardará nada en ser verdad. Confía en ti, así verás más allá de lo que temes y pensarás cada ves más en lo que sabes has guardado para siempre en tu memoria.
No quería verse en un espejo, quería correr con mariposas y aves a su lado, el amor que poco a poco moririra solo se hacía más grande y dejaba pensamientos desesperados y pobres en su muerte lenta, creía saber donde estarían sus buenos ánimos en ese día pero solo rompían mas su mente, pensó en ella, sin verla a los ojos y cerca de lo que le quedaba de armadura.