Capítulo I: Pero este tipo si besa bueno

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Coloquen su presente por aquí, o no podrán leer:

Blake Vargas

"Es duro fracasar, pero es todavía peor no haber intentado nunca triunfar "

Que bien se sienta la tranquilidad, esa que sientes cuando estas sola, o en un lugar en el que la paz es abundante.

Pero lamentablemente en mi caso no es así.

—¡Blakeeeeeee! — me llama Alan, (como por sexta vez en 20 minutos que tiene despierto) mi hermano menor antes de tirarse sobre mí.

—Blake, ¿cuándo llegues del trabajo podemos ir al parque? Por favor ¿si? ¿Si? Prometo que me portaré bien.

—Claro enano, podemos ir las veces que quieras —digo con una sonrisa—, pero con una condición.

Veo como arrugas tus cejas cuando menciono sobre una condición.

—¿Cuál es la condición, Blaiky Trikis? Porque si no me gusta la condición le diré a mamá que te encerraste en tu cuarto con Joan.

¡Mierda! ¿Cómo sabe eso?

Joan es mi mejor amigo, solo eso. Pero a mi mamá no le gusta que me encierre con el porque cree que tenemos algo.

—¿Cómo sabes eso? Sabes que, mejor ni me digas.

—¿Cuál es la condición?

—La condición es que cuando te diga que hay que venir a casa no hagas berrinche.

Una condición muy tonta, lo sé.

Yo solo quería saber que se siente diciendo eso a un niño.

—Si no cumples, no te compraré helado en un mes.

Veo como arruga las cejas y cruza sus pequeños brazos en su pecho cuando escucha la consecuencia.

—No es justo.

Me agacho hasta quedar de su mismo tamaño.

—Quita esa cara y ve a bañarte, que te voy a dejar en la escuela- digo para hacerlo enojar— Si es que quieres ir al parque.

Veo como me fulmina con la mirada y sube las escaleras. Que divertido es ser hermana mayor, aunque no siempre es así.

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—¡Alan!— llamo a mi hermano menor para que se apure.

—Ya voy —dice mientras sale de su habitación—, ¿Qué tal?

—Te ves bien.

—¿Qué te digo? Soy perfecto, todo me queda bien.

—Oh, disculpa, señor perfecto.

—Es que lo soy— dice con su típica sonrisa.

Salgo de la casa riendo por el ego de mi hermanito mientras agarro su mano. Cierro la puerta y nos encaminamos a la parada del autobús que esta a unas esquinas de la casa.

Algunas veces me pregunto que seria de mi si no tuviera a Alan a mi lado, el es mi razón de vida, mi alegría... El fue el único que estuvo conmigo cuando nuestro papá nos dejó. Aunque algunas veces jode mas que mi ex cuando le termine, lo quiero mucho.

¿Mi jefe o mi esposo?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora