CAPITULO 1

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Era un Miercoles por la mañana, cuando Lucero tomó su bolso, se dirigía hacia la puerta para tomar un abrigo y así poder salir,
cuando de repente una voz la detuvo

Fernando:¿Se puede saber hacia dónde vas?
Lucero:¿A dónde más? *pregunto sarcásticamente* iré al trabajo

Fernando:Hoy es Miercoles, ¿No los días Miércoles estas libre? "pregunto mientras levantaba una ceja" "Lucero puso los ojos en blanco, ya que eso le molestaba"

Lucero:¡¡Dios Fernando, eres muy estresante!! "levantando la voz" Todos los días es lo mismo, parece que te tengo que dar una explicación hacia donde voy, sabes perfectamente que voy hacia el mercado para cuadrar varios asuntos con los proveedores del restaurante "dijo mientras tomaba su abrigo"

Fernando:No me lo tienes que recordar cariño "hacia una mueca mientras decía la última palabra" nadie mejor que yo sabe tus horarios "dijo mientras hacía un cruce de brazos" así que eso incluye perder tus días libres el tiempo de los mercados públicos *decía muy molesto"

Lucero:¡¡Dios!! Si sabes, ¿Entonces por qué demonios me molestas con tus malditas preguntas? Eres tan estresante "respondió altanera y molesta"

Lucero toda su vida había deseado ser cantante y actriz, adoraba la música al igual que la actuación
Cuando era pequeña se la pasaba cantando, y actuando
Probando su canto en varias ocasiones

Cuando cumplió 14 años, conoció a un chico en su escuela, este era mayor que ella, pues era 2 cursos más grande,
Lucero lo consideraba como el chico más bello y guapo que había visto, pues esta era muy joven e inocente, incluso hasta ingenua

Para ella, era más que complacida verlo de lejos, con solo verlo se volvía loca pues según ella era guapo, sabía que había sido trasladado de otra escuela, aúnque no sabía sus motivos

Lucero, como niña tonta cuando lo miraba se quedaba embelesada, lo seguía a donde el fuera ella se escondía y el pasaba por los pasillos, este no pertenecía ni de los populares, ni de los jugadores de fútbol o de basquetbol, pero llamaba muchísimo la atención por su vestimenta, ya que usaba ropa olgada y gorra, color negra, este también era muy rebelde sin causa alguna

Un día unos chicos empezaron a molestar a Lucero en el pasillo, tomándola por la cintura para así poder tirarla en el patio, esta no podía hacer algo al respecto más que gritar, Fernando pasaba por ahí, escucho a alguien gritar pidiendo ayuda, volteo a ver y vio a Lucero, este fue a su ayuda, Fernando la rescato y ella al verlo, se enamoro por completo. Pero él no le estaba prestando atención después del incidente Lucero parecía estar muy frustrada, pero no del todo cierto, Fernando había quedó fascinado con aquella niña, que lo veía como si fuera Dios

Poco a poco ambos fueron socializando, se encontraban en el patio o en los pasillos, Lucero creía que simplemente eran casualidades, Fernando se decía a sí mismo que no podía tener relaciones con ella mucho menos cortejarla, pues era demasiado pequeña, ella apenas tenía 14 y él 17

En ese verano, ambos se despidieron como amigos sin ser algo más, no se volvieron a ver durante esos meses, Lucero había cumplido apenas sus 15 años,

Y tanto su mente como su cuerpo, empezaron a tomar tal cambio, cuando regresaron a la escuela, Fernando estaba muy ansioso, pues esperaba reencontrarse con esa niña a la que había dejado en verano, pero en su lugar encontró a una mujer, Lucero parecía ya más mujer. Por lo que Fernando no soportaba más, y no se podía permanecer separado de ella, pues la adoraba,
Lucero estaba más o menos enamorándose de Fernando, tiempo después Fernando no soporto más y le propuso ser su novia, a lo que ella aceptó, Lucero se sintió en la gloria cuando al final se dieron su primer beso, y se sintió toda una princesa cuando el la invitó como su pareja en la graduación,

Recuerdos de un amor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora