Mi más dulce perversión.

CAPITULO 4.

Rasguñaba, mordía, succionaba...el hacía que me doliera.

-Por favor, sueltame- le suplique entre sollozos.

Pero el hizo caso omiso.

Siguio violandome, no le importaba mi dolor ni mis suplicas.

Llego hasta mis labios...comenzo a besarlos de una manera desesperada: me mordía, metía su lengua y con ella me delineaba los labios.

Sus besos me exigían que lo siguiera, pero no lo haría...lo unico que el me provoco fueron ganas de seguir gritando y luchando; pero me dejaba sin fuerzas.

-Eres tan perfecta- de mi boca paso a mis senos: los masajeaba...pero en vez de ser suave, parecía que me los quisiera arrancar.

-louis...dejame, te lo suplico- mis lagrimas ahora eran de dolor.

-No, porque ahora te haré sentir la mujer más feliz del mundo.- mordio mi labio y empezo.

Abrio mis piernas de una manera tan brusca que tal vez quería hacerme sangrar. Introdujo sus dedos, y comenzó a acariciar mi femineidad.Después, agacho su cabeza y no sé cómo paso, pero sentí su lengua muy cerca de mi clitorís; lo mordio.

-estas tan mojada, perfecta para penetrarte-

Y entonces lo hizo. Me agarro de mi cintura y ya con mis piernas separadas, introdujo su miembro. Dolía, dolía y mucho.

-Basta!- grité- Por favor, dejame- lloré de doler.

-Esto apenas comienza- con más fuerza, siguio embistiendome,pues, pareciera que mi dolor era su exitación.

Agarro mis muñecas, ya que yo lo golpeaba para que me dejara ir, pero el tenía más fuerza que yo, y lo mejor que pude hacer era dejar de luchar y darme por vencida.

Siguio y siguio...me dolía, jadeaba, gritaba, lloraba...sentí algo en mi interior, y aunque yo jamás había tenido relaciones sexuales...sabía lo que era.

-OH, emily...me encantas- .cayo al lado mío...pues el estaba exhausto y saciado, mientras que yo adolorida.

Louis se levanto y comenzo a vestirse.

Yo solo me levante y me quede sentada en el suelo, como pude alcanze mi blusa para cubrirme.

-fue un buen sexo...pero el siguiente será mejor,con el tiempo irás mejorando, cariño- se agacho para darme un beso en la mejilla, pero la esquive. El solo sonrio descaradamente y se puso de pie.

-luego me suplicarás que te bese- me miraba, pero yo solo veía hacia abajo.

-jamas.- levante mi mirada- Jamás, jamás te suplicaré, porque te odio- le grite furiosa y con lagrimás cayendo sobre mi cuerpo.

-ya lo veremos- rio, y se fue.

Esa noche...fui violada, mis sentimientos, mi dignidad, había sido pisoteada.

Si quieren cap. 5, comenten, y voten.

Las adoroooooo.

-isabel- <3