MANICOMIO [FYOZAI]

001

Problemas de ira. Chūya Nakahara, uno de los internos del manicomio había estado teniendo un mal día. Con ayuda de su habilidad de gravedad, podía caminar por el techo, pero su sombrero cayó justo cuando los nuevos psiquiatras ingresaron al castillo.

— ¡¡LADRONEEEEEES!! ¡¡HAY LADRONES EN EL CASTILLO!!

Gritó, para inmediatamente bajar al suelo e intentar atacar con su habilidad a Dazai, quien sonrió y anuló todo aquello que iba dirigido a él y a Fyodor.

— Tranquilo. Fyodor y yo te curaremos ese mal. Seguramente estás embrujado, ¿verdad, cariño?

Fyodor se ruborizó y soltó un ligero gruñido de desagrado, seguido de un carraspeo. Ya estaba acostumbrado a lo fastidioso que podría ser Dazai las 24 horas del día.

— Brujería es la respuesta menos probable en nuestro trabajo, Dazai—. Se acercó a Chūya, y le entregó ese sombrero que había quitado de la cabeza de su acompañante.
— Esto es tuyo ¿Verdad? Dime, ¿dónde están los demás pacientes? ¿Cuáles son sus problemas?

— Kenji-kun está jugando con su amigo imaginario, Atsushi-kun mira sombras a su alrededor y está llorando, a veces se ríe solo, Ryūnosuke tiene días sin hablar con nadie, llora en las noches, Kyouka-chan tiene una mirada asesina, ahogó a una muñeca ayer, Ranpo-san ya no cree en él, dice que es creado por un libro, Kunikida está obsesionado con la perfección y quiere lograr que los árboles sean rectos... Todos están enfermos menos yo, sólo estaba molesto de que este tipo raro tuviera mi sombrero.

Chūya iba a patear el abdomen de Dazai, cuando Dazai fue más rápido y se ocultó detrás de Fyodor para evitar el golpe, colgándose de la bata del pelinegro.

— ¡Amor! ¡El loco me quiere golpear!

— ¡¡ESTÚPIDO GAY, NO SOY NINGÚN LOCO!!

Aclaró Chūya, de nuevo, con su furia al máximo.

— Dazai necesita tratamientos también. Ignora lo que dice.

Advirtió Fyodor. Separó a Dazai de él y siguió su recorrido por todo el lugar.

Posible triángulo.
Fyozai.
Dazachuu.
Fyoya.