Corazón de Raíces.
Mi piel huele a montaña, mi corazón es de raíces, camino libre como él río, recorro las explanadas sin hacer daño a nadie, canto alguna canción como para imitar las aves que vuelan de rama en rama como acompañando el viaje, recojo algunas frutilla para mitigar el hambre, mi pelo es de hojas sueltas que cae haciendo ruido, mi piel huele a montaña, mi corazón es de raíces abrazadas a la vida, mi sangre es de sabia de árboles ancestrales como los huetares, y corre como cervatillo asustado y sin salida.
¡NO!, no digan: "¡no hay huetares!", ¡Porque aquí estoy yo! Con mis manos que huelen a cacao y a hojillas de bijagua.
Mi piel huele a montaña.