♡《𝑨𝒎𝒃𝒆𝒓 𝒄𝒂𝒓𝒆𝒔𝒔𝒆𝒔》♡

343 23 164
                                    

— ¿Estás bien? — fue lo primero que escuchó proveniente de esa persona, olvidó por completo el hecho de haber resbalado de las escaleras llevándose consigo a aquella persona que, no parecía molesta, más bien, parecía preocupado por él

Asentir fue lo más sensato que se le ocurrió luego de estarlo viendo por al menos unos cinco minutos, sonrió nerviosamente, que vergüenza haber quedado embobado por esos ojos tan misteriosos y lindos

Aunque no sabía si lindos era la palabra, más bien, eran algo... ¿Peculiares?, Claro, nunca había visto los ojos ambarinos pues sus conocidos los tenían rojos, celestes, verdes o incluso rosados o morados

— Ah... Si, gracias— atino finalmente a responder con una sonrisa algo nerviosa

— ... ¿Te ayudo? — preguntó el oji-ambar sonriendo al notar que el pelinegro aún no se levantaba

— ¡Ah, si!, Gracias — aceptó la ayuda del contrario sin dejar su sonrisa — Ou, yo... Lamento eso — dijo señalando el cabello rubio del chico que ahora estaba mojado

Si, la próxima vez le hará más caso a su mamá cuando le diga que no debe correr por el centro comercial, y, mucho menos por donde están haciendo limpieza

— Oh, no importa, solo es agua- respondió sacudiéndose un poco el cabello —Tú estás igual — le dijo a lo cuál Eijirō notó finalmente que era cierto

Su madre no tardó en aparecer,claro que le dio un regaño, uno leve a decir verdad pues sabía sería incómodo regañarlo frente al rubio con rayito en el cabello, la madre del pelinegro ayudó al rubio al igual que a su hijo a secarse un poco tanto la ropa como el cabello, no hizo mucho cuando la madre del rubio apareció, sorprendentemente y para suerte de Eijirō, la actitud del rubio era de parte de su madre pues no se molestó con lo que había pasado, le pareció divertido al igual que al rubio

Su madre no tardó en aparecer,claro que le dio un regaño, uno leve a decir verdad pues sabía sería incómodo regañarlo frente al rubio con rayito en el cabello, la madre del pelinegro ayudó al rubio al igual que a su hijo a secarse un poco tanto la...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Olvidar aquello no le tomó mucho, ese chico se preocupó por él en lugar de enojarse por haberlo hecho caer, otro en su lugar seguramente se hubiera enojado mucho, claro que no olvidaría su amabilidad, además

Claro que, no sería la última vez que lo vería

— Hey, ¿Me prestas un lápiz? — escuchó que le murmuraban desde el asiento que tenía detrás durante las clases de secundaria

— ¿Hmm?, Claro, lindo — respondió Eijirō sonriente

Unos años después de aquel suceso, las cosas se fueron dando de manera algo curiosa, Kaminari resultó ser nuevo en la ciudad terminando siendo casi vecinos en el mismo vecindario

Comenzando por encontrarse casualmente en el parque a jugar todos los días, visitar la casa contraria y a llevarse más entre ellos terminaron por ser muy unidos teniéndose mucha confianza entre ellos a pocos meses de conocerse a la edad de seis años

— Gracias, Eijirō — dijo sonriendo recibiendolo para así seguir tomando notas

El mencionado sonrió reanudando su atención a la pizarra esperando el descanso que llegó al poco tiempo siendo arrastrado por su amigo a la cafetería, no se quejaba, amaba ese trato del rubio hacia él

Amber caresses [Kirikami/Kiridenki]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora