Cap. 2

25 5 0
                                    

La mañana fue eterna, noté que estaba en último año por que aunque ser el primer día los profesores ya nos habían cargado de trabajo. Antes de ir a la cafetería a comer me cambie y me puse mi uniforme, ya que después de comer sería el primer entrenamiento del año.

Una vez cambiada, me fui a la cafetería a sentarme en la mesa de siempre, la mesa central, dónde nos sentamos la mayoría de animadoras/porristas y algunos deportistas.

Justo entrar en la cafetería Vicky me hizo un gesto para indicarme que fuera.

Mientras me dirigía hacía la mesa un poco distraída me choqué con alguien y caí al suelo.

- Vigila por donde vas, que me he caído!- chillé a la persona desconocida.

- Vigila tu mueve pompones, no es mi culpa que se te haya roto una uña en la caída.- una voz grave pero tremendamente sexy me respondió.

Vaya imbécil pensé, levanté la vista y lo ví, un chico guapísimo, era él, Gael.

- Gael...-medio susurré.

- Oh la princesita sabe mi nombre, que sorpresa, creía que sólo sabías el nombre de los populares, ya que es lo que hacéis- dijo eso sin ni mirarme a la cara.

- Pero que concepto tienes de mi? Puedo aparentar una cosa pero no serlo, estas juzgándome sin conocerme! - estaba enfadada, quien se pensaba que era, me estaba catalogando como la persona que nunca me quería convertir.

- El concepto que demuestras nena, y tranquila, tampoco pienso conocerte para cambiar mi pensamiento de ti, por cierto, cuidado que se te arruga tu querido uniforme - dicho esto se fue sin ni si quiera ayudarme a levantar.

Me levanté enfadadisima, vale sí, podía ser muy guapo, podía haber soñado con él, pero con menos de 5 minutos de conversación me había demostrado que era un idiota.

Cuando me senté al lado de Vicky, con una mirada le dije que no era el momento de hablar y comí en silencio mientras el resto de la mesa mantenía conversaciones banales.

Cuando me quise dar cuenta, el timbre sonó y eso indicaba que teníamos que ir al entrenamiento con la entrenadora.

Una vez llegamos nos soltó el mismo discurso de cada principio de clases.

- Chicas y chicos, curso nuevo, campeonatos nuevos. Sé que es el último año de muchos de vosotros, y de gente muy importante- nos miró a mi, a Vicky y a unos pocos más de último año- así que os pediré compromiso, disciplina y mucho entrenamiento. Este año entrenaremos más, y mejor. No quiero quejas, este año es nuestro año, y no permitiré que nada ni nadie nos lo arruiné.

Todos asentimos, el año pasado quedamos segundos en el campeonato final, y aunque estábamos contentos por lo lejos que habíamos llegado, hubiéramos preferido quedar terceros que segundos.

- Dicho todo esto, espero que en las pruebas de la semana que viene podamos conseguir lo que nos falta para perfeccionarnos, en las pruebas querré total imparcialidad, no quiero favoritismos, sólo entraran los mejores. Y ahora hacer una pirámide, Valeria, tu arriba, cuentas hasta diez y saltas en tirabuzón de acuerdo?

Asentí, mientras los demás iban haciendo la pirámide yo miré a los curiosos que habían ido a ver nuestro primer entrenamiento, la mayoría eran chicas que querían apuntarse a las pruebas de la semana que viene y los chicos del equipo de futbol que esperaban que acabáramos para empezar ellos con su entrenamiento, me fijé en cada uno de los chicos de manera superficial, los conocía a todos, nos llevábamos bien. Sonreí un poco a alguno de ellos, entonces en la otra punta de las gradas se encontraba él, Gael, con un grupo de gente que no había visto en la vida. Cuando me pilló mirandolo me sonrió.

Vaya idiota, hace un rato me trata de tonta y ahora me sonrie, hombres...

- Val! deja de distraerte y sube de una vez- me chilló la entrenadora.

Asentí y empecé a subir, mientras subía ví que no era demasiado estable la pirámide.

- Chicos, preparados? me lanzó a la de 1.. a la de 2...3..

Pero cuando se suponía que me tenían que dar impulso para el salto la pirámide empezó a derrumbarse, y yo hice un movimiento raro para intentar salvar la situación, pero era imposible, me iba a caer.

Preparada para la situación, intenté ponerme en una posición para evitar el máximo daño posible y cerré los ojos, pero no me caí, alguien llegó a cogerme.

Cuando abrí los ojos vi a mi salvador.




Gael (pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora