Only Love Can Hurt Like This

...

Me encontraba en aquel parque sentada sobre el asiento del columpio, donde Nayeon y yo nos divertíamos y corríamos como si fuéramos un par de chiquillas, al mi al frente estaban mi hija Chaeyoung jugando con la pequeña Tzuyu mientras Mina cuidaba de que Tzuyu no se lastimara.

sentía como la brisa del viento movía mi cabello e inhale cerrando los ojos y tomé el aire fresco mientras sentía que una lágrima caía por mis mejillas, a veces pienso en crear una máquina del tiempo o que exista un multiverso en dónde mi "yo" de otro universo me explique exactamente qué pasó con mi amada primavera, aquella mujer que siempre fué atenta y servicial, aquella mujer que me recibía con una sonrisa todas las mañanas, la que mimaba a su hija al llegar a su trabajo.

Simplemente se fué y llegó a casa muy cambiante, era como si fuese una copia barata de Im Nayeon desde ese momento sentí que alguien arruinó mi jardín, que alguien llegó y arrancó todas las flores y plantas que se cruzó por su camino, no, simplemente ella nunca volvió a casa.

-CHAEYOUNG, VÁMONOS QUE TENGO QUE DEJARTE EN CASA DE TU MAMÁ!!- grité y me bajé del columpio y caminé hacía ellas ya que estaban a unos metros de mí.

- Había olvidado que me quedo una semana con ella, no quiero estar con mi mamá quiero estar contigo- Chaeyoung empezó a hacer pataletas, incluso ni su propia hija no quería pasar tiempo con su mamá.

- No empieces chayotito, así lo ordenó tu mamá y así será hija- en realidad no quería que las cosas fueran así, así que me gustaría remediar el daño que yo no cometí.

Se subieron al auto de Jeongyeon, aseguraron a la bebé en el copiloto mientras que Chaeyoung y Mina fueron en la parte trasera del auto.

Jeongyeon solo se concentró en manejar pero tenía la mirada por las nubes.

- en ¿qué piensas madre?.

- En nada hija, en nada.

- ¿Segura?, Estuviste muy pensativa todo el día, incluso en la mañana en lugar de echarte azúcar a tu café te echaste sal y aún así lo terminaste- escuché como una pequeña risa se escuchaba en la parte de atrás.

- no me hagas caso hija, es solo... Motivos de trabajo.

- ¿Trabajo?, Cuidar un hogar de perros y ser veterinaria al mismo tiempo ha de ser estresante.

Luego de un largo recorrido al fin llegamos a nuestro destino así que bajamos del auto y  toqué el timbre y dejé a mi hija en casa de Nayeon, esperaba que ella me dejara pasar a la casa para que me diera una explicación del porqué cambió o que de una vez por todas me diga la verdad, que se encontró a alguien que lo da todo por ella, que le hace feliz...

Lo único que recibí fué una mirada de odio y rechazo, esa mirada hace que me haga sentir culpable de todo, hasta incluso de haber nacido.

Regresé a mi auto y maneje en dirección a mi casa para descansar y quizás poder conciliar el sueño ya que últimamente me sentía muy cansada y no me refiero cansada físicamente sino cansada mentalmente.

El querer "salvar" mi matrimonio me está destruyendo el alma.

Pero... ¿Realmente vale la pena intentar que Nayeon vuelva amarme? O simplemente¿debería de enamorarme de alguien más?.

Justo cuando intenté cerrar mis ojos para dormir recibí una llamada.

"Hola amor, ¿Estás libre?, Estoy aburrida, ¿qué te parece y matamos el aburrimiento aquí en mi cama?".

Colgué.