Capítulo Diecinueve

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"¿A quien crees que se parecerá? - Thor tenía su cabeza apoyada en el regazo de Loki, acariciando el redondo vientre de ya casi siete meses - ¿crees que será como yo?"

"Rezo a las nornas para que no sea así - Loki seguía en su lectura recostado en la cama, hacia dos meses que Eir le habia prohibido hacer sobre esfuerzos, el bebé era demasiado pesado para su delgado cuerpo y sin su magia le era más difícil llevar un embarazo normal - quiero que mi hijo herede mi inteligencia"

"Soy inteligente" - respondió Thor dandole besos en el vientre - conseguí que te enamoraras de mi"

"Eso fue pura suerte - Loki dejó a un lado su libro para acariciar el rostro de Thor - debería elegir entre un trol y tú, estuviste a punto de perder, pero por cosas del destino aquí estamos"

"¿De verdad le dirás eso a nuestros hijos?" - Thor se levantó de donde estaba para recostarse frente a Loki - no te creerán una sola palabra.

"Les diré que tú no eras el príncipe con quien me quería casar - Loki le dio un largo beso en los labios - pero que eres el príncipe con quien quiero estar el resto de mi vida"

Thor subió la pierna de Loki para que rodeara su cadera, como pudo se acomodo más cerca de él para empezar a besarlo lentamente, desabrocho su camisa para ver los pechos levemente hinchados, en unos meses serian el sustento con que su hijo crecería fuerte y sano, inclino su boca para meter un pezon a su boca y comenzó a chupar lentamente.

"Están muy sensibles - murmuró Loki - ve más despacio"

Thor obedeció dándole un beso en cada una de las hinchazónes, bajo la pierna de Loki con cuidado para después darle la vuelta no sin antes desnudarlo para que el trasero del pelinegro quedara justo en su entrepierna.

"Me encantas - susurraba Thor a la par que besaba su cuello aspirando su aroma y metiendo su mano en la entrepierna del pelinegro para masturbarlo - siempre me has gustado, aún cuando éramos enemigos me emocionaba verte en el campo de batalla, quería ser yo quien capturara al escurridizo hechicero de Jotunheim, y ahora aquí estás, eres solo mío y jamás nadie se atrevería a alejarte de mí lado porque lo mataría sin compasión "

" Thor - gemia entrecortado el pelinegro - tómame"

Thor dejó de acariciar el miembro de Loki, se quitó en tiempo récord los pantalones que traía puestos, volteo a su mesa de noche donde estaba el aceite de almendras dulces con que masajeaba los pies del pelinegro, eso sería suficiente para abrirlo, el rubio desearía usar su boca como normalmente lo haría pero en esa posición Loki había quedado muy cómodo y no deseaba moverlo, empapó sus dedos y los llevó hacia la entrada del pelinegro, Loki mecía su cadera despacio para disfrutar de ser abierto por los grandes dedos de Thor, cuando el rubio consideró que estaba lo suficientemente listo para recibir su miembro se acomodo detrás y empezó a introducirse lentamente, sus estocadas eran lentas y perezosas, no había prisa por terminar lo que estaban haciendo, Thor se aferró a la cadera del pelinegro mientras besaba su cuello saboreandolo, duraron así interminables minutos hasta que Loki se estremeció y se vino sin siquiera ser tocado, gimiendo el nombre de Thor, el rubio solo duró unos segundos más para después vaciarse dentro de su esposo, haciendo sonidos casi animales mientras lo hacía, ambos se quedaron quietos después de la entrega, Thor salió despacio del cuerpo de Loki, se levantó para traer un paño húmedo y así poder limpiarlo, se volvió a posicionar detrás de Loki y finalmente ambos quedaron dormidos.

Un mes después....

"Maldito Odinson - gritaba Loki en la sala de parto, no le importaba que Laufey junto con Friga y Odin estuvieran presentes observando el nacimiento de su primer nieto - juro que te hechizare para darte un útero y así puedas parir los demás hijos que quieres tener"

Ese no era el principeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora