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Parte 1:

Buscando trabajo.

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Apenas había pasado una semana pero cada noche se sentía auténticamente como una eternidad.
Él se limitaba a observar, sabía que por más que quisiera, no podía hacer mucho en especial en intentar ayudar a Luz de alguna forma quien en los últimos días no ha hecho más que buscar alguna forma de volver a las islas a pesar de los comentarios de todos por deber cuidarse. En especial de Blight, quien como ya era costumbre, trataba de ser un apoyo condicional para su novia.

La luz del sol resultó siendo el detonante para que finalmente despertada ya que fue muy molesto para sus ojos. De mala gana abrió sus párpados, deseando dormir un poco más ya que sentía de verdad que no descanso en lo absoluto. Se levantó del sofá, tratando de orientarse un poco y procesar el nuevo día, escucho como en la cocina ya había actividad, probablemente se estaba haciendo el desayuno pero antes de ir a este lugar fue al baño para lavarse la cara. Solo volteo a ver de reojo el lugar, todos ayudaban a la señora Noceda a terminar de hacer de comer y que alcanzada a comer algo antes de ir a su trabajo. Claro, él también iba a ayudar puesto que era lo menos que podía hacer para pagar el hospedaje, sin embargo primero quería tener la mente bien despejada y no parecer un zombie. Se alejó sin prisas de la cocina hasta llegar al baño 一tuvo suerte de que no estuviera ocupado一. Se dirigió directo al lavamanos y al abrirlo dejó que el agua se acumulada en las palmas de sus manos, se sentía fría contra su piel, como una bofetada y en efecto, al lavarse la cara sus sentidos se agudizado más que antes y sintió que al fin había aterrizado en tierra.

Suspiro, no se quedó mucho tiempo en el lugar y tan rápido como llegó se marchó cerrando el grifo y retorno de nuevo a la cocina en donde justo ahora ponían la mesa.
Evitó mucho el contacto visual más que corresponder una sonrisa de saludo a Willow y Gus, quienes servían algunos platillos junto a la basilisco mientras que Luz leía unos libros de historia en la mesa, muy concentrada tratando de encontrar una pista de como volver que no estaba muy al pendiente de lo que sucedía alrededor.
En la estufa estaba la señora Noceda siendo ayudada de primera mano por Amity y observando un poco el patrón se percató de que hacia falta poner algo de café para quienes querían despertar bien por la mañana y fue a encender la cafetera recordando el procedimiento que de había mostrado Camila, pero cuando abrió la alacena por cafe noto que estaba por acabarse, esto lo sorprendió, cuando llegaron estaba llena 一bien, suponía que el y Luz tenía que dejar en exceder de esto一. Tomó lo que quedaba, no importaba que no hubiera para todos, al menos alcanzaría para hoy.

一 Señora Noceda. Se acabó el café 一comentó一.

一 Oh vaya... No te preocupes, solo que tendremos que esperar un poco para comprar más 一dijo Camila tratando de ver el lado bueno一.

Hunter no entendió del todo pero supo que había algo mal aquí y eso mismo al parecer ya lo sabían los demás que se habían despertado más temprano. Le causó algo de desesperación que nadie dijera algo, aunque no insistió, el tema de por si parecía ser algo dedicado y serio como para hablado en la mañana y se limitó a asentir y a tomar asiento en la mesa mirando su comida con atención.

一 Bien mija, ya tengo que irme.

一 ¿No te vas a quedar a desayunar? 一pregunto Luz saliendo de los libros, un poco preocupada一.

一 Tengo que llegar a tiempo y me quedaré tiempo extra para poder hacer las compras de esta semana lo más pronto posible.

En ese momento entendió mucho mejor la situación y supo la razón por la que incluso decir que un material tan básico del reino humano se había acabado apagó el ambiente mañanero por unos segundos. A pesar de que las reglas en este mundo fueran diferente entendía lo que era llevar una responsabilidad y en este caso lo de ser proveedora de una casa con seis adolescentes.

¿Qué hace un chalan seduciendo a la vida? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora