𝙴𝚗𝚍𝚕𝚎𝚜𝚜𝚕𝚢 - 𝟸𝚓𝚒𝚗, 𝙻𝚒𝚙𝚜𝚘𝚞𝚕 [semi hiatus]

𝙲𝚊𝚙𝚒𝚝𝚞𝚕𝚘 𝟸.

— Mi tiempo ya se acabo ¿Te veo más tarde?

Hyunjin asintió viendo cómo Jungeun terminaba el ultimo bocado de su sándwich y depositaba la basura en el cesto más cercano.

Por su parte, la pelinegra se sento en una de las bancas de la cafetería provisional que había en el terreno y se encontraba haciendo repaso de álgebra, filosofia y un poco de geografía, todo esto en su hora de comida.

Hyunjin había estado aplicando para varias universidades en los últimos 6 meses, con la esperanza de que al menos pudiera quedarse en una. Pero la verdad es que no todo era color de rosa y de 10 cartas de aplicación que mando, 8 ya habían sido rechazadas, un par por su promedio, otras por los aciertos faltantes y una que otra por "no contar con la suficiente plata para hacerlo".

¿Que se supone que significaba eso? ¿Que no se trataba del desempeño escolar y las calificaciones? ¿Que tenía que ver cuanto maldito dinero podía generar?

Gracias a su frustración, la pelinegra dio un golpe fuerte en la mesa que hizo que el vaso de jugo de naranja que estaba a su lado cayera y salpicara a la chica de al lado.

— Mierda ¿Que no ves lo que haces?

Hyunjin recogió rápidamente sus libros y se aproximo a la chica para intentar limpiar la mancha de aquel traje que llevaba puesto, lucia costoso si se lo preguntaban, pero la peliazul empujo sus manos bruscamente y con un bufido se puso se pie.

— Tu nombre —demando— rápido ¿Cual es tu nombre.

— Hy...Hyunjin

— ¿Sabes quien soy? —la pelinegra negó. La más alta enfureció más.— Me llamo Jinsol y tú Hyunjin, acabas de echar a perder el traje más costoso que jamás en tu vida podrías haber visto ¿Sabes cuantos dólares me costara arreglarlo? ¿Tienes idea de cómo...

Por un momento Hyunjin dejo de escuchar los reclamos de la chica y comenzó a procesar lo que había hecho, acababa de manchar un traje costoso, más costoso que su propia vida y estaba segura de que debía pagar por ello.

¿Cómo lo haría? ¿Y el costo de los exámenes? ¿La luz, el agua y el maldito alquiler? ¿Cuantas horas extras tendría que hacer?

Si bien Hyunjin siempre mostraba aquella imagen imponente, altanera y desinteresada, en este momento parecía y se notaba que se moría de angustia, se notaba en sus manos, en la forma en que las apretaba y cómo su pie bajaba y subía nerviosamente, estaba a nada de colapsar.

—... ¿Y sabes que? La peor parte es irte a formar por que ya no hay servicio preferencial, ¿cómo se supone que haga eso? Mis zapatos no me costaron $5,000 solo para desperdiciarlos así...

— ¿Qué esta pasando?

Hyunjin y Jinsol giraron la mirada hacia donde se encontraba Heejin, para Jinsol su mejor amiga, para Hyunjin la chica que la salvo de caminar dos horas a casa.

Jinsol guardo silencio solo para tomar aire y después de mirar a Hyunjin comenzó a explicar.

— Lo que sucede es que esta... —Jinsol hizo una pausa para mirar despectivamente a Hyunjin— Ella, acaba de ensuciar mi traje más caro y...

— Yo lo siento —interrumpió Hyunjin— Fue un accidente.

Jinsol la callo con un leve movimiento de dedo y la miro mal, de nuevo.

— Jinsol, no la mires así —Heejin sobo su sien ante la actitud de su amiga— Ve con mi padre y dile que le avise a Suho, para que el lo lave por ti, tendrá cuidado, lo prometo.

Jinsol miro a su amiga con rabia, esperando a que esta le diera la razón y se le uniera para seguir tratando mal a Hyunjin, pero no sucedió, así que derrotada tomo su bolso, y paso a un lado de la pelinegra empujándola con el hombro.

Tan pronto cómo Jinsol desapareció de su vista, Hyunjin se desplomó en la banca y tiro su cabeza para atrás, soltando un suspiro, estaba jodida.

Duro así unos minutos hasta que sintió un ligero peso que se sentaba al lado de ella, miro de reojo y ahí se encontraba la chica que la había salvado de caminar a casa con el estomago vacío y ahora, de ser asesinada por una atractiva riquilla.

Por cortesía se acomodo en una pose decente y limpio el lugar correctamente, no quería ensuciarla a ella también.

— Lamento mucho la actitud de Jinsol, ella puede ser muy exagerada a veces —la rubia extendió su mano en forma de saludo— Soy Heejin por cierto.

A Hyunjin le tomo por sorpresa la amabilidad con la que Heejin la estaba tratando, sin embargo decidió corresponder de la misma forma.

— Un gusto, soy Hyunjin —estrecho su mano— Realmente lo siento mucho, yo estoy dispuesta a pagarlo, tal vez me tome un poco pero lo haré, lo juro...

Hyunjin paro de hablar cuando escucho la pequeña risita de Heejin y pudo ver cómo la castaña se tomaba la barriga para no reír más fuerte, lejos de molestarse a Hyunjin le pareció tierno, de alguna forma había roto la pequeña incomodidad que había entre las dos así que decidió bromear un poco.

— Ah, ya veo, así que no basta con que casi me asesinan con la mirada y ahora tú te ríes de mi —comento divertida y cruzada de brazos.

— No, no —Heejin terminaba de reir— Es solo que es gracioso por que no tienes que pagar nada, Jinsol solo bromeaba.

— Pues para ser broma se sentía muy en serio.

Heejin tomo una postura más comoda y después de haber terminado de reír se acerco más a Hyunjin.

— Es buena persona, parece bastante grosera y algo ruda, pero es solo apariencia, lamento mucho que hayas visto ese lado de ella.

Hyunjin asintió comprensiva y se giro a donde se encontraban sus cuadernos y lápices para guardarlos correctamente, la hora de la comida se había acabado y al final no pudo estudiar nada.

Antes de guardar el cuaderno que ocupaba para filosofía, Heejin lo tomo en su manos y lo vio ligeramente.

— ¿Estudias filosofía? —pregunto.

— No de lleno, es solo parte de mi examen para la universidad, aunque si te soy sincera, no es mi fuerte.

Heejin analizo la cara afligida de la pelinegra y también aprovecho para darle una mirada general, tal vez su fuerte no era filosofía pero definitivamente sus brazos lo eran. Y es que aquella playera sin mangas dejaba ver lo bien que trabajados que estaban.

Un carraspeo hizo que Heejin saliera de su trance y miro a Hyunjin de nuevo.

— Tal vez yo te pueda ayudar.

— ¿Uh?

— No fui la mejor de filosofía en la universidad —comento Heejin divertida— Pero mejor que tú, tal vez, podría ser de ayuda.

Fue el turno de Hyunjin para estallar en risas, se puso de pie aún riendo y tomo el cuaderno que Heejin tenía en sus manos, lo metió a su pequeña mochila y después de sacudirse aquellos desgastados pantalones se acerco a la castaña.

— Ya haz hecho mucho por mi Heejin, gracias —sonrío camino a la salida.

Heejin se quedo sentada, observando cómo se alejaba la pelinegra, quien de repente se detuvo en la puerta antes de salir.

— Aún así no creo que seas mejor que yo —Hyunjin le guiño el ojo y por fin salió.

Dejando así a una castaña con una sonrisa de oreja a oreja, esperando volver a verla de nuevo.