ＳＷＥＥＴ ＢＬＯＯＤ

Capitulo 2

Tu relación con Jimin era la cosa más linda de la vida, era muy dulce contigo y el sexo ni se diga era magnífico pero de una semana para acá estaba actuando raro.

En el elevador te encontraste con Jungkook pero este te ignoro cuando incluso le hablaste, pasaste todo el día encerrada y nuevamente Lisa te invito a una fiesta y tú accediste porque la rubia sabía tu humor y quería levantarte el ánimo.

El corto vestido negro ceñido a tu cuerpo y las plataformas del mismo color te hacía ver espectacular, te irías en tu coche así que tomaste tus llaves y justo cuando saliste de tu departamento lo viste saliendo del departamento de Jungkook con una chica, los tres te miraron.

Cuando Jimin iba a hablar le callaste.

—Buenas noches, vecino. —sonreíste y cerraste la puerta, tomaste el elevador y las puertas se cerraron, la incomodidad en tu estómago te iba a matar.— mierda.

Llegaste al estacionamiento y caminaste a tu coche, quitaste el seguro, aumentaste el ritmo en tus tacones cuando escuchaste pasos bajando con rapidez las escaleras, abriste la puerta y la cerraste.

Viste a Jimin y a Jungkook mirándote pero la chica llego y sostuvo la mano de tu supuesto novio, quitaste la mirada y saliste del lugar, llegaste a la fiesta paseándote por el lugar, llegaste a la mesa donde estaba tu amiga y su novio, le contaste a ambos lo que viste hace unos momentos.

—Mándalo al carajo. —grito Lisa.— y disfruta de otra polla.

Su novio la miro y rio.

—Yo pienso que deben hablar. —dijo con tranquilidad el chico, lo opuesto a su novia.— debes dar el beneficio de la duda.

—Beneficio de la duda mis pelotas, mándalo a la verga. —tomó de golpe el trago en su vaso y se llevó a ambos a la pista.— ¡vamos a bailar que la noche es joven!.

La música inundaba tus oídos las horas pasaron volaron y estaba a punto de amanecer, por suerte lo borracha se te había bajado bebiendo agua desde hace una hora pero Lisa estaba fuera de combate y gracias a dios tenía un novio que estaba sobrio.

—nos vemos chicos. —agitaste tu mano.— me mensajeas cuando lleguen a su casa.

—Tu igual, cuídate. —te dijo que el chico mientras metía a una borracha Lisa al asiento de copiloto.—

Manejaste hasta tu edificio y entraste en el estacionamiento, saliste de tu coche y cuando estabas por pulsar el elevador viste que alguien bajaba desde tu piso.

Las únicas opciones ya sabemos quienes son, decidiste ir por las escaleras, te quitaste tus tacones y subiste tatareando una canción.

—No buscó nada serio..amiga date cuenta.

Movías tu cabeza al ritmo la música que sonaba en tu cabeza, cuando llegaste a tu piso sacaste la cabeza y cuando viste el pasillo libre corriste hacia la puerta, colocaste la clave y entraste soltando un suspiro.

Tiraste los tacones en algún lugar de la casa, caminaste hasta tu habitación y te quitaste el vestido lanzándolo al sofá donde estaba Jimin sentando.

Tu sostén fue también tirado al piso, pasaste tu pijama que solo constaba de una blusa grande, cuando estabas a punto de entrar al baño paraste de golpe y viste al sofá.

—¿Jimin?. —el chico te miro.— ¿cómo entraste?.

—Cierra mejor tus ventanas. —se puso de pie y camino hacia ti.— ¿donde estabas?

Soltaste una risa, ¿ahora si se hacía el novio preocupado?.

—Pues como viste mi querido amigo, es una fiesta que bueno, estaba más que buena la verdad ahora mismo tengo unas inmensas ganas de orinar. —pásate por su lado y le cerraste la puerta del baño en la cara.—

Cuando abriste la puerta y saliste una fuerza te tomó y te tiro en la cama, miraste a Jimin estaba enfadado su rostro lo decía todo.

—¿Con quien estuviste? —preguntó.— ¿por qué llevas a esta hora?. —tu teléfono sonó, miraste hacia donde lo habías botado en la cama, Jimin lo tomó primero y leyó el mensaje.— ¿por que este idiota quiere saber si MI novia llego a casa?.

Apretaste los puños y le diste una bofetada haciendo que su rostro se fuera de lado.

—¡Eres tan hijo de perra!. —le gritaste.— primero desapareces por días, después me ignoras junto con Jeon y para rematar sales con una chica de la mano. —le miraste.— ¿crees que soy idiota?, no por ser vampiro te da derecho de ser hijo de puta con las humanas.

Jimin te miro y mordió su labio, acercó su rostro a tu cuello y comenzó a repartir besos cuando intentaste alejarlo tomó tus muñecas presas en sus manos.

—Te ignore por tu bien, estábamos en luna roja donde mi hambre de sangre incrementa, desaparecí por días porque fui a Transilvania por un festival con mi raza y la chica es una vampira joven que se acaba de mudar aquí y es mi hermana Park Jihyo. —succiono la piel en tu cuello.— perdón.

—Jimin. —él salió de tu cuello, quitó sus manos de las tuyas acariciaste su rostro y cuando él cerró los ojos le diste un rodillazo justo en la polla haciendo que cayera al otro lado de la cama.— que te perdone tu abuela hijo de puta.

Saliste corriendo hacia la otra habitación y cuando estabas a punto de cerrarla el la abrió de golpe dejándolo ver enojado, te tiro en la cama que había en la habitación.

—¡¿Que debo hacer para que me perdones?! —te grito, se colocó sobre ti y sentiste algo húmedo caer en tu rostro.— me aleje porque no quería hacerte daño, la luna roja no se debe tomar a juego y menos los días después, te ignoraba porque si llegaba a besarte sería capaz de matarte o hacerte cosas impensables.

El tono de su voz era suave, no mentía.

—No llores hombre. —acariciaste su rostro y limpias las lagrimas que salían de sus ojos.— el chico que me mando mensaje es el novio de Lisa, no baile con ningún hombre, tomé alcohol pero estoy bien, no pasó nada de lo que te debas preocupar, te soy sincera quería acostarme con el primer chico que se me acercara pero se me retorcía el estómago sólo de pensar en ti.

Él te tomó entre brazos, te rodeó y escondió su rostro en el arco de tu cuello, pasaron así algunos minutos tu estabas sentada sobre él, se separó y fue directo a besar tu labios ambos estaban necesitados de ambos.

—Joder preciosa —salió su voz ronca,te acostó en la cama y procedió a quitarte la blusa para ir a succionar tu pechos.—¿acostarte con alguien más?, te la voy a meter hasta que te salga agua de la maldita vagina.

Jadeaste ante esa idea.

Ambos quedaron en ropa interior y ahora el se estaba escurriendo hacia tu abdomen pasando por tu ombligo, bajo tus delgadas bragas y abrió tus piernas encontrándose con tu coño brilloso por tus jugos

Y como si se tratara de tus labios comenzó a besarlo, con su lengua se abrió paso por todo, con toda su boca abarcó todo tu coño, sus manos le abrieron los labios vaginales dejándole ver el manjar que escondía.

Fue directo a tu clítoris para comenzar a succionarlo y juguetear con el, dos dedos de su manos derecha entraron en tu vulva y se doblaron ligeramente encontrando esa pared rasposa que te hacía delirar.

Tomaste su cabello enterrando más su cabeza entre tus piernas cuando estabas a punto de llegar a tu primer orgasmo, soltaste un gemido alto y arqueaste ligeramente la espalda, sin embargo él no salía de entre tus piernas hasta tomar el último jugo de tu orgasmo.

Se arrodilló en la cama y sacó su miembro de sus bóxers tirando estos en el piso, se alineó en tu entrada y fue entrando, ambos soltaron un gemido de satisfacción al sentirse después de tanto tiempo.

—Vamos bonita, apenas vamos iniciando. —hablo cuando te vio restregarte los ojos.—

—Por favor Jimin, déjame dormir y te prometo que cuando me despierte podremos hacerlo cuantas veces quieras.

Él soltó una risa.

—Dormida o despierta igual voy a cogerte.