Lagrimas calientes

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Me quede quita observando la ciudad atreves de la gran ventana de su habitación, mi mente por el momento no quería ni imaginar en lo mal que terminaría esto 

-Cuéntame mas de ti Eurídice o prefieres que te llame Beojnamu- tomo asiento en su escritorio 

-¿Esto es una entrevista?- alce mi ceja 

-No nena, no lo es, solo quiero conocerte mas, me pareces, enigmática- sonrió de lado 

- Hahahaha, de acuerdo, puedes llamarme Beojnamu, para la comodidad de tu acento y lengua- 

-Admito que los dos me encantan pero tienes razón en lo de la comodidad de mi acento, pero ahora cuéntame, ¿Qué es lo que te gusta?, ¿Por que tu carrera? y lo mas importante ¿Por que tienes cicatrices en tu pierna y cadera?-

Mierda hace años de no hablaba sobre mis cicatrices, en general hace mucho tiempo que no me describía, no era una chica a la cual un chico se le acercaba para preguntarle su nombre o cualquier otro dato que pudiera tener información acerca de mi 

-Pues mmm, veamos, me gusta cantar, amo cantar, amo la música y los libros. Elegí esa carrera por que el viajar y vivir la aventura de conocer lugares nuevos es fascinante- encogí mis hombros 

-¿Y tu lugar de origen no tiene lugares fascinantes?- 

-Si claro que si, es uno de los mejores del continente, claro en cuestión de turismo-

-Okay, continua- me miraba directamente a los ojos y por primera vez no me sentía intimidada 

-Lo de mis cicatrices, yo eh.. bueno tuve problemas cuando comencé a pasar a la adolescencia, no me sentía bien con mi cuerpo, recibía burlas constantes sobre mi aspecto físico, me sentía un bicho extraño, puedo decir que el autolesionarme era una forma de liberación si lo podemos llamar así. Pero cada vez el problema se hacia mas y mas grande hasta el punto de querer acabar con mi vida- Sentía mis ojos picar, quería llorar y lo admito yo soy demasiado sentimental

-Intente controlar el problema pero no lo logre, cada día se volvía peor y peor, se me estaba saliendo de las manos y así fue, lo intente y recordar la sensación de hormigueo en todo mi cuerpo debido al medicamento es, simplemente indescriptible. Quisiera volver y decirme todo, pero no serviría de nada, por que gracias a eso soy la mujer que ahora ves frente a ti-.

No me di cuenta de que las lagrimas calientes estaban bajando por mis mejillas y mierda es que es un tema un poco difícil de recordar, no de hablar por que hablarlo puedo hacerlo con facilidad

-Demonios, no he llegado a tal punto Beojnamu, pero comprendo perfectamente lo de las burlas, también las recibí, me dijeron feo, que era lo peor de la disquera, que mi aspecto físico era espantoso e incluso llegue a pedir perdón por ello-  admito que ver que le decían eso a Joonie era una cosa, pero que el me lo dijera frente a frente si es algo demasiado fuerte 

-Las personas son una mierda, el mundo es una mierda, quisiera salir corriendo en ocasiones y si que lo hice, es por eso que vine tan lejos como pude, aunque solo me queden 5 meses- sonreí de lado con ligera nostalgia al recordar que mi tiempo estaba completamente contado 

-Entonces tenemos demasiado tiempo para seguir conociéndonos Beojnamu, me encantaría saber que mas hay detrás de esos ojos negros- se acerco a mi 

-¿Puedo besarte?- tomo mi mentón con su mano izquierda y oh por dios me sentía muerta 

-Adelante-.

Juntos sus labios con los míos y mierda si que son deliciosos, sabia tan rico, tan adictivo, puedo jurar que se sentían como dos gomitas juntas. 

Su lengua entrando en mi boca me distrajo de mis pensamientos, solté el primer gemido al sentir como la pasaba de un lado al otro acariciando la mía con tanta paciencia y calma, que los ojos se me entrecerraban 

-¿Te gusta como se siente mi lengua dentro de ti?-

-Jonnie puedo decirte que desde hace dos horas mi cuerpo disfruto mucho de tu lengua-

-Por cierto tus fluidos saben delicioso, preciosa tienes un sabor exquisito, es entre dulce y amargo- soy una cerda, ya quería follar de nuevo 

-Me hubiera encantado probarte, Namjoon- sonreí coqueta, yo quería que me diera a probar su pene 

-¿Quieres hacerlo nena?- metió sus dedos entre mi cabello y acaricio, tan despacio que me erizo la piel 

-Quiero chuparte la verga desde hace 2 horas- al diablo las palabras apropiadas

-Pues entonces chúpame la verga zorrita- jalo un poco mi cabello.

Con un rápido movimiento me puso de rodillas, desabrocho su pantalón junto con su cinturón,  puta madre sentía mi boca hacerse agua de solo imaginar en el gran tamaño de su verga, quería tenerla en mi boca, hasta el fondo de mi garganta, que mis ojos lloraran y mi delineador se corriera 

-Vamos muñeca chúpame el pene- se sentó en su gran silla, sacando su pene lentamente, lo acaricio con su mano, fuck que se sientan celosas las demás por que voy a mamarle la verga a Kim Namjoon.

Puse mi boca en la punta y di la primera lengüetada, tan lento que lo hice sufrir, con mi mano hice un movimiento de arriba hacia abajo, y entonces la introduje en mi boca, moviendo mis labios al mismo tiempo, puta madre, puta madre que rico sabor, no miento de verdad tiene un sabor tan delicioso

-Así nena, así chúpalo, así cómeme toda la verga, cómetela toda- en ese momento Namjoon agarro mi cabello en una coleta, y entonces sucedió, me follo la boca

-Fuck que hermosa te ves, con tus lagrimas calientes bajando por tus ojitos y mi verga perdiéndose entre esos labios tan rojos y preciosos, si nena se que quieres mi semen y te lo daré, vas a tragarte todo-.

Saco su pene para que pudiera jalar aire y lo coloco en mi mejilla dándome pequeñas cachetadas con este, dios mío que puta me veía pero no me importa en lo absoluto, por supuesto que disfruto que hacerle una mamada al dueño de mis orgasmos desde que tengo 17.



Purple Girl +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora