Seis años después
"Mamá, ¿has visto eso?" preguntó Kieran felizmente a su madre después de marcar un gol.
"¡Eres el mejor, cariño!" Lena sonrió orgullosa mientras levantaba el pulgar a su hija de siete años.
Kieran sonreía mientras seguía corriendo detrás del balón y, con facilidad, lo dirigía hacia la portería contraria una vez más y marcaba otro gol que hizo que su equipo y sus seguidores la aclamaran.
"Kieran es una jugadora de fútbol increíble". dijo Kelly, sonriendo mientras movía a Liza, su hija de catorce meses, en sus brazos.
"Nunca he dudado de que lo fuera". Lena se rió mientras observaba el partido. "Charlie es una portera increíble".
Kelly sonrió orgullosa mientras miraba a su hija. Charlie estaba muy concentrada y ya estaba preparada para evitar que le metieran un gol. Tenía la misma edad que Kieran, y Kelly y Alex la habían adoptado hacía cuatro años.
"¡Mamá, arriba, por favor!"
Lena sonrió mientras miraba a su hija de dos años y la cogía en brazos. Sonrió cuando Alexis apoyó la cabeza en su hombro. Lena depositó un beso sobre la cabeza de su pequeña y pasó los dedos por su pelo rubio.
Cuando Kieran cumplió cuatro años, Lena sorprendió a Kara cuando le dijo que había estado trabajando en la búsqueda de una forma de combinar el ADN de ambos para concebir una hija, aunque sabía que a Kara no le importaba no tener una hija que fuera biológicamente suya. Decidieron que sería más fácil para Lena llevar a su hija ya que Kara, como Supergirl, no quería estar incapacitada durante mucho tiempo en caso de que hubiera una emergencia, quería asegurarse de que podía mantener a su familia a salvo. A Lena no le importaba estar embarazada por segunda vez y vivió este segundo embarazo con mucha más serenidad que el primero, ya que era madre y no tenía miedo de meter la pata. Kara la apoyó durante estos nueve meses tanto como lo hizo cuando estaba embarazada por primera vez. Kieran se alegró mucho cuando sus padres le dijeron que iba a ser hermana mayor. Esta vez la bebé decidió venir un día después de la fecha prevista, y así nació Alexis Eliza Luthor-Danvers. La llamaron como Alex y Eliza y ambas lloraron cuando Lena y Kara les revelaron el nombre de su hija cuando Alex y Eliza fueron a visitarlas con Kieran unas horas después de que naciera Alexis.
Mientras que Kieran era la viva imagen de Lena, excepto por el hecho de que su piel se parecía más a la de Jack que a la suya. Alexis se parecía más a Kara y tenía el mismo pelo rubio, sus ojos eran mayoritariamente azules pero tenía hermosas motas de verde en ellos, su piel sin embargo era más pálida que la de Kara, pero no tanto como la de Lena.
Lena se rió cuando Alexis empezó a aplaudir con sus pequeñas manos después de que Charlie evitara que le metieran un gol.
Kieran gritó felizmente mientras corría por el campo y chocaba las manos con su prima, luego cogió rápidamente el balón y empezó a dirigirlo hacia la portería contraria.
Lena se preguntó de dónde venía el amor de Kieran por el deporte cuando éste marcó otro gol. Ella misma nunca había sido una gran aficionada a ningún deporte y era demasiado descoordinada para jugar al fútbol, pero podía pasarse horas viendo jugar a su hija sin cansarse nunca. Tal vez eso era algo que Kieran había heredado de su padre, Lena sonrió, aunque con un poco de tristeza, cuando pensó en Jack. Seguía echándolo de menos incluso después de todos estos años y deseaba que estuviera aquí para ver a Kieran prosperar.
Lena y Kara le contaron a Kieran la verdad sobre cómo vino al mundo después de que éste empezara a hacer preguntas cuando Lena se quedó embarazada por segunda vez. A veces, la niña hacía preguntas sobre su padre, pero eso no cambiaba lo que sentía por Kara, que siempre sería su yeyu.
