Peter Stark & Irondad ONE-SHOTS

Omegaverse

Capítulo largo

Peter era todo un fenómeno según las personas, el chico era un alfa debilucho, delgado, bajito y muy inocente, básicamente el esteriotipo de omega.

Obviamente no lo conocían bien.

El perfecto compañero sumiso por eso es intimidado en su pueblo pero aunque él no quiere salir de su humilde casita, él nesetita trabajar para vivir así que no tenía de otra, lo bueno es que su vivienda estaba en los límites de la manada por lo que no tenía que lidiar tanto con la críticas.

Peter era hijo del difunto matrimonio Stark, su padre alfa estaba enfermo por una herida infectada en su pecho y la manada enemiga de la suya aprovecho que uno de los mejores guerreros estaba vulnerable para atacar la manada, apenas y pudieron ganar pero lastimosamente sus padres murieron tratando de protejerlo, Peter se echaba la culpa por no haber hecho nada pero sus padres nunca lo juzgaron y Peter sabe que lo cuidan donde quiera que estén.

El alfa Jones, el jefe de la manada, tenía una hija, la cual era la chica más codiciada de la manada ya que su pareja dirigiría la manada cuando sea su turno si ella terminaba siendo omega, su alfa sería el jefe o la jefa y si ella era alfa, mandaría y buscaría una o un omega fértil para seguir con el linaje.

Michelle era muy consciente de la atención que acarreaba y aún si haberse presentado básicamente su destino ya estaba escrito y no planeaba objetar pero las cosas sucederían a su manera, así que acordó con su padre que después de presentarse, se le daría el plazo de cinco años para encontrar pareja antes de que los ancianos de la aldea lo hicieran.

Michelle caminaba por el bosque con el objetivo de despejarse y alejarse de los demás, la atención le abrumana y ese día más que todos, estaba harta de la insinuación de los omegas, afirmando que ella sería una alfa y que sería bueno que ya tuviera un compañero y por otro lado, los alfas creían que sería una omega y se volvería una sumisa que solo tendría que quedar en casa y atender a los cachorros mientras que ellos mandaban en la manada.

Sigan soñando.

Perdida en sus pensamientos Michelle llegó a los límites del territorio para dar paso al terreno neutro entre manadas, cualquiera podría estar ahí y no habría problemas, era obligatorio que si había un encuentro, tenían que evitar las peleas, ella solo regresó y busco un lugar más cómoda para pasar el rato hasta la hora de la cena, encontró un claro con un lago cerca, se acerca y decide acostarse cerca de la orilla y perderse en la paz.

La verdad es que no duró mucho ya que escucho como la  malesa y ramas eran movidas, escuchaba pasos suaves en su dirección y se puso alerta.

Apareció Peter con una bara encima de sus hombros y una cubeta a cada lado.

—¡Alto! —Exclamó Michelle y Peter del susto, se le cayó lo que cargaba. —¡¿Quién eres?! —Exigió levantándose de su lugar, Peter la veía asustado y cohivido.

—P-Peter. —Respondió asustado.

—¿Que haces aquí? ¿Estás siguiendome? —Preguntó enojada, Peter la vio confundido.

—Vine por agua... Y no se porque te seguiría, no se quien eres. —Dijo esta vez menos intimidado, es solo que no se esperaba encontrar a alguien allí y lo tomó por sorpresa.

—¿No sabes quien soy? ¿De qué manada eres?

—No, no se quien eres y soy de la manada Jones pero mayormente, soy un lobo solitario. — Ya sin tomarle importancia, Peter camina al lago y llena las cubetas para acomodarlas en bara al ponerlo en sus hombros. —Veo que aún no te has presentado, no te recomiendo pasear sola por estos lugares, por las noches es engañoso y te puedes perder fácilmente y no podrías guiarte por los olores, no quieres terminar en otro territorio y morir descuartizada, adiós. — Se retiró, Michelle no había podido decir nada más, estaba ocupada tratando de adivinar a que casta pertenecía el chico, parecía un omega pero uno muy grosero, pero también era muy fuerte como para llevar grandes cubetas llenas de agua sin esfuerzo alguno y justo cuando creía que el día no se podría poner más raro...