Conociéndose y surgimiento de un problema.

456 27 7
                                    

Tras salir del dormitorio Musashi y Alexis comenzaron a hablar un poco.

Musashi: Gracias Alexis, por ayudarme.

Alexis: Vamos a ser compañeros, ¿no?, es natural que nos intentemos llevar bien.

Musashi: Ya lo creo. 

Alexis: ¿Cómo era tu vida antes de venir acá?

Musashi: Bueno, mi vida antes de este sitio no era precisamente la mejor. Mis padres murieron a los pocos días de haber nacido. Lo último que conservo de ellos son mis cartas; por lo que fui dejado en un hospicio, la vida era una porquería, mis compañeros eran buenas personas, pero murieron debido a alguna enfermedad, accidente o simplemente escaparon de aquel infierno; yo tampoco fui la excepción. Los supuestos cuidadores nos golpeaban por placer porque decían que "éramos malos niños", algunos de mis amigos intentaron hablar con la policía, pero estos los ignoraban por el hecho de que éramos niños en aquel entonces.

Alexis: ¿Cuánto tiempo soportaste esas pesadilla?

Musashi: Quince años, no me quedé por gusto, ya que varios de mis amigos me habían dicho que escapase junto a ellos, pero me negué siempre; yo me quedé ahí por humanidad, no me gustaba que maltrataran a los más pequeños, así que los defendía en medida de lo posible, hasta que un día esos infelices me golpearon hasta dejarme en el hospital con varios huesos rotos. Al regresar, los niños me dijeron que era mejor que me fuera, ya que había hecho bastante por ellos, y tampoco les gustaba verme sufrir por protegerles, además, algunos chicos de 13 y 14 años me dijeron que si esto seguía así era probable que incluso llegara a perder la vida. Acepté su decisión y antes de irme de aquel sitio, me dieron una carta junto a una pequeña bolsa con el dinero de todos. 

Musashi: Me dijeron: "no es mucho, pero esperamos que te pueda ser útil por todo lo que has hecho por nosotros, no pudimos darte un poco más, ya que es todo lo que tenemos. Vive tu vida Musashi,  hazte el mejor duelista de todos los tiempos. Nos veremos pronto" 

Alexis: Fue una vida muy triste, ¿Cómo puedes sonreír después de todo lo que pasaste?

Musashi: Les hice una promesa. Es gracias a ellos que estoy aquí.

Alexis: Cuéntame un poco más

Musashi: Bien bien, ¿Conoces al "Emperador del Hielo?  

Alexis: Sí, es el mejor duelista profesional actualmente, aunque jamás ha mostrado su rostro, puesto que siempre juega con una gabardina oscura con capucha y una bufanda rodeando su cuello.

Alexis:  ¿Y eso qué tiene que ver con tu historia?

Musashi: Voy para allá.

Musashi: Tras despedirme de todos y partir de aquel sitio, me hospedé en el hotel más barato que encontré, compré algo de comida instantánea y estuve así durante tres días. Tras eso, me enteré que habría un torneo pequeño con una buena recompensa para el ganador, lo suficiente para comer otra semana, al principio fue complicado, puesto que aún no sabía cómo usar mi baraja adecuadamente. Mucho menos invocar por sincronía. Tras ganar ese torneo, estuve haciendo lo mismo durante dos años y medio, participando en torneos cada vez más avanzados, fue a finales del año pasado que la gente comenzó a llamarme "El Emperador del Hielo", puesto que siempre jugaba con monstruos de hielo, aunque nunca decía sus nombres, tenía miedo que las autoridades me reconocieran por voz y me enviaran de regreso a aquel sitio. Cuando cumplí 18, me dejé de preocupar por eso, pero seguí jugando como siempre hacía.

Musashi: Al final, hubo un torneo en el que el ganador podía pedir cualquier cosa que quisiera, siempre y cuando no excediera un valor mayor al millón de dólares. Pedí que se creara un registro académico a mi nombre y se evaluaran mis conocimientos mediante exámenes. Perdí la cuarta parte del premio en eso. Otro cuarto lo gasté en un apartamento y una D-Wheel. La otra mitad la intercambié por una oportunidad de ingresar a la academia de duelos, y heme aquí jeje.

El Emperador de la Barrera de HieloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora