Un viaje entre sueños...

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Musashi estaba dormdo plácidamente tras lo ocurrido la noche anterior con Alexis, sin embargo aún pensaba seriamente en lo que vió durante su sueño: parecía tan real...; incluso habló con sus mostruos de duelo, por lo que ya no sabía si preocuparse por el sueño en sí o por su estabilidad mental. Fuera lo que fuera, iba a continuar su vida con normalidad. 

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Flashback:

Musashi comenzó a despertar tras haber dormido con Alexis, pero al abrir los ojos, estaba impactado.

Musashi: ¿Dónde estoy?...-voltea la mirada-¿Trishula?... ¿Qué haces acá?

Trishula: Musashi... Todo lo que ves ahora no es un sueño, estás en el mundo de los monstruos de duelo.

Musashi:...Es oficial, necesito un psicólogo...

Trishula: Acompáñame...-una de sus cabezas desciende hasta posarse de tal forma que Musashi pudiera subir a la misma-la tribu te necesita. No hay tiempo para explicar ahora, todo se revelará en breves.

Musashi se monta en la cabeza de Trishula

Musashi: Confío en tí, eres mi carta más poderosa, pero dime qué está pasando, ¿Por qué estoy acá? La última vez fue hace ya varios años y sólo fue para conocerme.

Trishula:-suspiro- Estamos preparándonos para la guerra... Y necesitamos toda la ayuda que sea posible. Los detalles los sabrás cuando lleguemos con el resto de la tribu.

Musashi: Je, ¿siempre igual de reservado eh Trishula?

Trishula: Digamos que soy precavido. No quiero que le pase nada a mis hermanos. Sé que son poderosos, pero siempre tengo ese pensamiento. Es el deber de un hermano mayor cuidar a los menores.

Musashi: Te entiendo... Más de lo que imaginas...

Trishula: ¡Basta ya Musashi! Cállate y sujétate con fuerza. El tiempo en estos momentos es el recurso más importante que tenemos.

Musashi:-asiente con la cabeza-tienes razón. Llévanos entonces.

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El hogar de la tribu Barrera de Hielo era cuando menos majestuoso; era un castillo completamente hecho de hielo , haciendo honor a la tribu, sus columnas fueron talladas de forma prolija; sus muros eran del color blanco más puro y estaban decorados con zafiros y oro que hacían ver majestuosa a dicha edificación.

Para darle el toque final, la luna iluminaba el castillo, bañándolo en su luz e iluminando los jardines: rosas azules, petunias, gerberas y anémonas tan azules como el mismo océano decoraban vastas planicies alrededor del edificio.

Cuando descendieron, las enormes puertas se abrieron, mostrando a toda la tribu esperando su llegada.

Trishula: Lo he traído como me pediste, Gantala. 

Gantala: Gracias, Trishula. Quédate, esto también te incumbe, llama a tus hermanos y Dewloren también. Esto es de suma importancia.

Trihsula siente con su cabeza central y suelta un pico de poder considerable; no pasaron ni cinco minutos hasta que dos enormes pilares de hielo se alzaron a sus costados y de ellos emergieron los dos dragones faltantes de la barrera de hielo. Dewloren llegó casi al mismo tiempo a través de un portal con la forma de la insignia de la tribu.

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⏰ Última actualización: Aug 22, 2022 ⏰

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El Emperador de la Barrera de HieloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora