Capítulo 34

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La vergüenza con el ya no existía, cuando ya habíamos hecho de todo para que iba a avergonzarme, y más aún sabiendo lo que a él le ponía el que yo fuese así.

Fui a lavarme la cara y salí de nuevo a la habitación.

- Quiero follarte.

- No.

- Tessa, una mamada no es suficiente, no contigo- se acerco a mi y me pego a él - Además, sabes que estas deseando que lo haga.

Mentira no era, tenía ganas de tenerlo pero no se lo iba a dar, no cuando el me lo pidiese sino cuando yo quisiera dárselo. Sabía que dejarlo sin nada le iba a costar menos que si hacía que se corriera, porque ahí iba a necesitar más.

- No la verdad es que no me apetece.

- ¿Es que te has follado a otro estas vacaciones? No me extrañaría, además de hablar con mi primo todos los días.

Sus palabras me hirieron, pero no por el hecho de lo que dijo sino por el hecho de que lo único que había hecho estas navidades es pensar en el, en que estaría haciendo y en cómo me gustaría poder pasarlas con él.  A si que lo que salió de mi boca a continuación requirió de todas mis fuerzas.

- Draco no puedo más - no me salían las palabras - Hemos terminado.

VI en sus ojos el dolor de escuchar mis palabras pero no se que esperaba tratándome así de mal y haciendo que me sintiese como una mierda cada que hacía algo que no fuese de su agrado.

- No puedes estar hablando en serio.

- Si hablo enserio, a partir de este momento tu y yo no somos pareja, no vamos a hablar más allá de lo necesario y no vamos a vernos más de lo que requiera.

Estaba conteniendo las lágrimas pero sabía que mi dignidad valía mucho más que eso, salí de la habitación, me dolió que no intentase detenerme, pero tampoco me extraño que no lo hiciera. Cerré la puerta corrí a mi habitación para echarme a llorar en los brazos de Rosell, que se acaba de despertar.

- Lo has dejado ¿verdad? - asentí aún llorando.

- No podía más Rosell, no me sentía bien, era todo radiactivo a nuestro alrededor.

- Has hecho bien, Tessa, has hecho muy bien.

Me consoló sin decir ni una palabra hasta que deje de llorar. Esa era su magia, sabía cuando debía hablar y cuando no, cuando consolarme y cuando dejar que me desahoga se.

Ya me había calmado pero seguía triste.

- ¿Quieres que vayamos a dar una vuelta tu y yo?

- Claro, necesito despejarme.

Sabía que Draco no iba a procesar el dolor de nuestra ruptura como una persona normal, no lo lloraría ni lo soltaría, el iba a liarse con cualquier chica de que se pusiera por el camino y iba a desahogarse de esa manera tan poco madura. Por ello no me quería quedar en el castillo.

Salimos de la habitación y estaba sentado en el sofá hablando con la chica esa con la que lo vi una vez hablando en el pasillo. Ella tenía su pierna sobre la de Draco lo que hizo que la sangre se me calentará pero decidir seguir a Rosell, haciendo como que no me importaba.

Pero dolía, y mucho.

Dejamos en castillo y fuimos a dar un paseo hasta Hogsmeade.

- Es que le mandaría 50 maldiciones cruciatus - seguía criticando Rosell.

- Pocas son - nos reímos.

- Ahora enserio, se que duele, pero no es el fin del mundo Tess, obviamente esa sensación que tienes en el pecho va a desaparecer.

- Lo sé, pero no me lo va a poner fácil.

- Y tú a él tampoco.

Me echó una de sus malévolas sonrisas y se que algo tramaba, ni si quiere quería preguntar que era, me daba miedo.

Llegamos a las Tres Escobas y nos sentamos al lado de la chimenea y nos pedimos una deliciosa cerveza de mantequilla para entrar en calor ya que fuera estaba nevando y hacía demasiado frío.

- Hey, hola ¿Cómo vosotras por aquí? - Cedric

- Hey hola - dije contenta de verlo- Necesitaba despejarme.

- ¿Despejarte por qué?

- Lo ha dejado con el hurón - intervino Rosell- Así que puedes sentarte.

- ¡Rosell!

- Ya era hora, preciosa.

Me sonreía, pero hubo momento en el que ambos se miraron y supe perfectamente lo que estaba pasando en ese momento.

- Rosell, Diggory, podéis dejar lo tengáis entre manos, ya os he pillado.

- Vamos Tessa, Diggory es un partidazo.

- Lo soy - apuntó el chico.

- No han pasado ni dos horas desde que mi relación se fue a la mierda, así que ni lo intentéis.

Sabía que mi relación con Draco no era bien vista por casi nadie, pero ellos no la habían vivido, esa relación me consumía y respecto a esto llegaba a tener una sensación de amor odio increíblemente fuerte. Además de lo innegable, esa atracción que teníamos el uno hacia el otro, como si fuéramos imanes, dos polos totalmente a puestos destinados a ir en busca del otro a la mínima distancia.

Esa sensación solo la podíamos comprender él y yo puesto que éramos los que la vivíamos día a día. Y quizá el echo de haberlo dejado, de haber dejado esa sensación es lo que hace que mi mente piense que no voy a poder encontrar algo que se le parezca, no me refiero a la relación tóxica, sino a los sentimientos que esta podía llevar a crear en mi.

Quizás sea porque ser la debilidad del villano era mejor que ser la del héroe.

La tarde pasó rápido y ya llegó la hora de volver al castillo, cenamos, me duche y me fui a dormir de nuevo, con una sensación de agotamiento realmente enorme. Ese día me había superado en cuerpo y alma.

Necesitaba dedicarme un tiempo a mi y nada más que a mí.

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Hay cosas que no el amor más intenso puede resistir pero eso Draquito lo acaba de comprender...

¿Qué pasará con Diggory y Tessa?

¿Saldrá adelante el plan de Rosell?

&

Muchísimas gracias por el apoyo que me dais día a dia, sois los mejores❤️.

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A Perfect Mistake |+18| Draco Malfoy Donde viven las historias. Descúbrelo ahora