𝑀𝑖 𝑀𝑜𝑡𝑖𝑣𝑜 𝐷𝑒 𝑆𝑒𝑟 - 𝐴.𝐺. {𝑨𝒅𝒂𝒑𝒕𝒂𝒄𝒊𝒐́𝒏}

🩸Capítulo 4 "Compras extremas"🩸

Primer Acto || Parte Cuatro

"Compras extremas"

Ambas chicas llevaban un par de horas comprando, Alice se había tomado enserio las palabras de la rubia. Llevaba consigo peluches, juguetes, libros, accesorios, cobertores, cobijas, almohadas, incluso llevaba todo lo que utilizaría para arreglar la habitación y baño de la pequeña.

Mientras Alice brincaba emocionada, Liam cargaba con todas las compras que realizaba su compañera, cualquier persona que lo veía sentía pena por él.

Quien se encontraba en la misma situación que él era Emmett, el pelinegro cargaba con todo lo que su compañera escogía para su hija. Los carritos que arrastraba estaban repletos de ropa, zapatos, pañales, utensilios para cocina, kits de aseo, comida para bebe, entre otras cosas.

Cuando creía que su compañera no llevaría más, la rubia se distraía en la sección de ropa, no quedándole de otra, se unía a la rubia y escogía algunos conjuntos que le gustarán.

Las personas que pasaban por ahí los observaban con diferentes expresiones, unos con ternura y otros con desagrado. Les era mal visto ver a unos jóvenes comprando cosas para bebé.

Si supieran que la pareja es más grande que todos ellos, pero son mundanos, ellos no entenderían.

El que más disfrutaba de esa salida era Aidan, su única tarea era cargar y cuidar a la bebé.

— Cariño, ¿Ya nos podemos ir? — Reprocha Emmett ya cansado. — Ya compraste muchas cosas, ellos dijeron que no debíamos hacerlo. Ella crecerá rápidamente y no podrá usar todo lo que llevan.

— Solo falta encontrar a Alice y pagar.

Emmett festeja internamente, ya estaba arto y quería regresar a casa a estrenar su nuevo videojuego.

Mientras se dirigían a la caja, a Emmett le entro una duda.

— Rose, ¿Por qué yo cargo las compras y no Aidan? Yo soy el padre.

— Yo estoy bien así — Aidan le sonríe inocentemente a su hermano. —

— La respuesta es muy obvia — Rosalie rueda los ojos cansada de las quejas de su compañero. — Aidan debe acostumbrarse a su olor — Le quita importancia al asunto mientras llama a Alice. —

Aidan sonríe triunfante mientras observa burlonamente al pelinegro.

— Te odio — Le dice a Aidan. —

Después de pagar todo, se dirigieron a casa.

— Bienvenidos, tardaron mucho — Los recibe Carlisle. —

— Díselo a ellas — Se queja Liam entrando con muchas bolsas al igual que Emmett. —

— Eres un quejambroso, no compramos muchas cosas — Rosalie rueda los ojos. —

Alice les pidió que las dejaran en la habitación que se le había asignado a la bebé.

— ¿Qué es ese olor? — Menciona Edward con una mueca de asco. —

— Es la bebé — Responde Aidan con la misma expresión. —

— Iré a cambiarla y darle de comer — Rosalie toma a su hija de los brazos de su hermano. —

La rubia comenzó a caminar a las escaleras, antes de poner un pie sobre el primer escalón, volteo a ver amenazadoramente a Aidan y Edward.

— Ustedes dos, hagan algo productivo y ayuden a los demás con la habitación de la bebé. ¡Ahora! — Les sonríe antes de irse. —

Un escalofrió recorre el cuerpo de Edward al leer los pensamientos de la rubia.

— Vamos Aidan, no te gustará averiguar lo que nos hará si no ayudamos.

Él empático decide seguirlo, había sentido el miedo del cobrizo y eso no podía significar algo bueno.

Después de unas horas de arduo trabajo, la habitación de T/n estaba lista.

— Me encanto — Menciona Alice observando orgullosa el resultado. —

Carlisle junto a Esme, que traía a la bebé entraron a la habitación.

— Les quedo bien chicos — Les sonríe a sus hijos. —

Rosalie toma a su hija de los brazos de su madre, la rubia desprendía alegría.

— Mira princesa, es tu nueva habitación — La bebé suelta una risita mientras balbucea algo incomprensible. —

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🩸Aquí les traigo el capítulo del día de hoy, espero les guste mucho el capítulo y le den mucho apoyo, disculpen si hay alguna falta de ortografía, comenten mucho por favor me encanta leer cada uno de sus comentarios, y nada cuídense mucho y sin más hasta el próximo capitulo🩸