CAP18|ARCO2

120 9 70
                                    

Domingo 5 de Junio 2022.

Tanjiro llegó a su pueblo en taxi y subió a la montaña a visitar lo que una vez fue su hogar.

La lluvia caía a cántaros, esta le pegaba fuertemente en su espalda y cabeza pero no importaba.

Al llegar, no se detuvo y entró a su casa sacó una pala y comenzó a escarbar entré la tierra y las cenizas del carbón, parecía que estaba loco, gracias a la lluvia era bastante difícil seguir escarbando pero no iba a parar si no lo detenía alguien.

¡¡Tanjiro!! Basta, ¿Qué estas haciendo? –Zenitsu paró al pelicarmsi con clara desesperación, lo había seguido ya que había visto cómo se iba con toda desesperación sin pensar y abandonar la misión.

¿Cuánto tiempo tiene que no limpias? –preguntó Tomioka

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


¿Cuánto tiempo tiene que no limpias? –preguntó Tomioka

No lo sé, ¿Acaso es obligación contar eso?

Sabés los asesinos pueden esperar, traerme artículos de limpieza que no podré vivir en paz sabiendo que existe tal basurero.

¡¡Oye, más respeto a mi hogar, solo tienes envidia de tener tremenda cabaña en el bosque!! –Respondió el melocotón mientras sacaba la lengua y se iba a buscar cosas de limpieza.

Regresó con bastantes cosas para la sorpresa de Tomioka al mismo tiempo que se preguntó ¿Por qué tiene todo esto para limpiar su casa y no lo hace? El azabache sólo rodó los ojos y se empezó a transformar, ¡Guantes! ¡Cubrebocas!! ¡Lentes protectores!...! ¡Escoba, Trapiador, periódico, Fabuloso y un monton de químicos más, Tomioka estaba preparado para la limpieza.

Oye ¿Enserio vas a limpiar mi casa? –Preguntó Sabito bastante extrañado, sin duda no era una persona normal, Tomioka agarró una cubeta de agua con jabón y sumergió en ella la escoba y con pasión pego un gritó de ¡Cállate! A la par que comenzaba a barrer el piso de la casa con furia, el pobre Azabache no sabía ni por donde comenzar.

Primero limpiaria el suelo, luego pasaría a quitar las telarañas del techo, a sacudir muebles, a lavar platos sucios, la ropa.

Los pobres bichos, insecto, todas las criaturitas que habitaban ahí comenzaron a salir de a montones de la cabaña por donde pudieran con lágrimitas en sus ojos, estaban escapando de la furia del hombre que estaba adentro, en ese momento Sabito incleiblemente estaba asustado por quien estaba en su casa, no sabía esa cara del ojos azules.

Tomioka llamó al Melocotón en forma de que viniera con él, los bichos que un día vivieron con él le desearon suerte, Cuanto entró se encontró con el Azabache preguntándole que tiraría y que no.

Tienes bastante ropa y muy vieja, dime cual se queda y cuál se va a la basura Sabito aceptó sin reproche alguno, todo iba bien hasta que pasaron a la ropa interior ojis violeta le incómodo bastante sacándole un leve sonrojó en cambio al otro estaba más calmado qué una estatua hasta que sacó un calzón con un agujero, Sabito quería volverse a morir, solo le dijo a Tomioka que lo tirara mientras miraba a otra parte hasta que escucho unas risitas sabía perfectamente de quien eran así que lo miró amenazante el Azabache de disculpó no podía evitar reír, Tomioka ocultaba su pequeña risita con su mano, era la primera vez que lo veía sonreír Sabito estaba sonrojado compitiendo con el rojo de un tomate no supo que hacer nunca había estado en una situación así así que solo le grito que hicieron lo que quisiera mientras se salía de la casa con sus exacompañantes de casa, Tomioka no evitó reír más ante esa acción tan infantil.

𝐸𝑙 𝐷𝑒𝑚𝑜𝑛𝑖𝑜 𝑌 𝐸𝑙 𝐷𝑒𝑡𝑒𝑐𝑡𝑖𝑣𝑒✞︎ | sᴀʙɪɢɪʏᴜ |Editando.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora