¿Qué pasa cuando no logras entrar a la universidad que deseabas y no quieres que tu madre se endeude para que entres? ----- Eso pensaba Izuku midoriya cuando decidió renunciar a su carrera universitaria en la UA y decidido tomo cursos de artes, para...
Bajamos de aquel helicóptero dispuestos a terminar con esto, los chicos se fueron saltando entre los edificios con sus ropas de mercenarios puestas, a mi lado estaba kyoka ya con su máscara, al igual que los niños, así que yo coloque la mía y empezamos a caminar hasta el edificio. Las luces estaban prendidas, así que dejando a kyoka y a los niños en el estudio subí a mi casa, encontrándome con la persona que hizo de mi vida una miserable, el coronel del escuadrón, bebiendo un gran vaso de gin tonic.
Coronel: eres difícil de encontrar midoriya
-oh una cucaracha entro en mi hogar supongo que deberé exterminarla
Coronel: que no se te olvide muchacho quien fue quien te entreno, quien fue quien te acogió, quien fue el que te convirtió en la máquina de matar que eres ahora.
El sonido se una escopeta y un revolver recargandose se hizo presente a mi espalda, y frente mío el coronel saco un porro el cual comenzó a fumar descaradamente
Coronel: eres un hijo de perra, pero en cuanto te matemos como nos ordenó el sujeto ese desquiciado y matemos a tus amigos y familiares, solo entonces nos haremos con el control de Japón al completo
-¿Tu y cuántos más imbécil?
Coronel: todo mi escuadrón está claro
-espero que no solo sean tu y estos dos o no podrás hacer nada
Dije burlón, estaba calmado, realmente no tenía razón para tensionarme después de todo en estos momentos bastaba con activar mi aura y los soldaditos atrás mío y el propio coronel caerian al suelo suplicando por su vida, pero quería hacer esto más divertido.
Coronel: ciertamente eliminando a los francotiradores que mataste hace algún tiempo, aún tengo bastantes más hombres, conozco tus trucos midoriya al final y al cabo yo te los enseñe
-oh ¿Así que podrías decir que me conoces bien no?
Retire mi máscara mostrando una sonrisa afilada, una mirada llena de sed de sangre, eso alteró un poco al coronel pero se calmo de inmediato, el pensaba que me tenía en su mano... Lastima que solo tenía una vil copia de papel maché, en cambio yo realmente tenía su corazón en mi mano.
Coronel: -sacando un activador- ¿Sabes que pasará si presionó el botón mocoso?
-¿Activaras el vibrador de tu culo?
Coronel: -algo molesto- déjate de bromas midoriya esto es serio, tengo la vida de tu familia prendiendo de mi pulgar y tú crees estar en posición de burlarte
Con una sonrisa aún más burlona tome una silla y me senté, con calma comencé a retirar los guantes de mis manos, en estos momentos aquella desesperación que desprendía el hombre frente a mi era placentera
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-entonces hazlo, vamos hazme sucumbir ante tu brillante plan coronel, demuéstrame lo cruel y despiadado que eras cuando me "acogiste"
