ʜᴇʟᴀᴅᴏ ᴅᴇ ᴜᴠᴀ | Karzer

06 | Receso

La alarma empezaba a sonar, lentamente empezó a abrir los ojos para poder estirar su brazo y así poder apagar el ruido que interrumpía sus sueños.
Después de haberse preparado para el colegio se dirigió al comedor donde lo esperaba su madre con el desayuno en la mesa, comió, lavo su plato, se lavo los dientes y se despidió de su madre para dirigirse a la escuela.

Sentía que era el día perfecto y que todo iba a salir bien sin embargo cuando entro a la clase de comunicación y lenguaje, que era su clase favorita, y no encontraba a Juan todos esos pensamientos se esfumaron. Juan era el único amigo que tenía en el salón, se llevaba bien con todos pero llevarte bien no significa que tengas la confianza suficiente como para poder compartir todo el día con esas personas. Decidió esperar a Juan, quizá este se había despertado tarde pero no hubo ninguna señal, resignado de que su amigo ese día fuera a estudiar busco un lugar donde sentarse.

Si los periodos de clases había sido un martirio sin su amigo, no quería ni imaginar lo que iba a ser del receso. Solo de imaginarse a él sentado en una esquina con la mirada clavada en un heterocromatico (porque aunque ahora fueran más cercanos, por así decirlo, el bicolor no pensaba dejar de aprovechar el tiempo del receso para verlo) sentía que todos lo iban a ver raro y se tendría que ir a esconder al baño o a la biblioteca.

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Acababa de sonar la campana que anunciaba el receso, muy esperada por unos pero por otros no tanto, claramente Axozer no quería pasar su recreo solitario.
Caminaba por el pasillo hacia la biblioteca, era su mejor opción si no quería ser el centro de burlas, cuando alguien lo tocó en el hombro.

"¡Oye que te vengo gritando hace bastante tiempo! ¿Estás sordo?" exclamó exhausto, por que había que tenido que correr para alcanzarlo y con un tono algo enfadado.

"ayy lo lamento mucho, estaba en mis pensamientos, en serio lo siento". Respondió muy apenado ¿Por qué sólo le pasaban esas cosas con Karchez? ¿Acaso el destino quería dejarlo con una mala impresión?

"No te sientas mal coño, que es una broma, pero si necesitas ir al doctor porque no escuchas bien dímelo con confianza." dijo con un claro tono de sarcasmo. A veces no lograba comprender porque el otro chico actuaba de una forma que pareciera que no quería defraudarlo, era algo confuso.

"Bobo" respondió el otro entre risa.

"En fin, vi que no vino tu amigo y quería ver si querías pasar el recreo con mis amigos y yo"

"La verdad no quiero molestar"

"Naaa que va, vamos" dijo sin dejarlo responder para después tomarlo de la mano y poder guiarlo hasta donde se encontraba su grupo de amigos.

Mientras caminaban juntos la mente del bicolor sólo se encargaba de retirar todas las maldiciones que le había dicho al día, claramente era el mejor puto día de la historia, Karchez le acaba de dar la mano, ¿¡esto acaso era un sueño o por qué rayos estaba pasando eso!?

"Holaaaa, les presento a Axozer, es un nuevo amigo que hice" dijo Karchez señalando a Axo con una mano sin soltarlo de la que lo tenía agarrado, de cierta manera se sentía bien estar agarrado de la mano del otro.

"H-hola" logró pronunciar, los nervios los tenía en la garganta, hace mucho tiempo no socializaba con personas totalmente desconocidas. Que la verdad no eran "totalmente" desconocidas pues se sabía sus nombres gracias a Karchez, pero no porque Karchez se lo haya contando si no que por estar interesado en el mayor este comenzó a buscar un poco de información, claro cuando le contó eso a Juan y el otro le dijo que le faltaba un tornillo decidió que lo mejor era solo quedarse viendo al chico en los recesos.

"Es algo tímido pero solo esperen que tome confianza y les va a caer genial" dijo para después darle un abrazo al bicolor, sintió la necesidad de transmitirle seguridad y que mejor que un abrazo de amigos ¿verdad?

Pasaron el receso entre muchas risas, al final Karchez tenía razón, el bicolor solo tenía que agarrar confianza para poder hablar con más libertad y como no, los amigos de Karchez lo recibieron muy bien.

Terminó el receso y era momento de dirigirse a las clases de nuevo.

"Gracias por no dejarme solo en el recreo" dijo el bicolor cuando se encontraban solo ellos dos caminando hacías los salones.

"No es nada, eres increíble, no mereces pasar un receso solito en la biblioteca solo por que no vino tu amigo, sabes que si se le ocurre faltar otra vez cuentas con todos para poder pasar el rato, chauu" dijo mientras se separaba de camino y se dirigiría a su perspectiva clase.

"Ojalá Juan falte todos los días"

-Soph