The Crown Prince (Yoontaegi AU)

Chapter 15

Esa noche, Yoongi fue a tomar té a la mansión Hwang, que era el hogar de uno de los funcionarios de la corte más antiguos quien fue bastante cercano al difunto rey.

A Yoongi nunca le había gustado el hombre simplemente por la tendencia de este hombre a cambiar de color. Cuando el viejo rey murió, este hombre era uno de esos funcionarios de la corte que estaban en contra de que Yoongi ascendiera al trono y su excusa fue porque sentía que todos debían respetar los deseos del difunto emperador. Fue una mierda. El hombre no quería que Yoongi ascendiera al trono por razones egoístas.

Después de unas pocas semanas de la muerte del anciano emperador, este hombre había enviado en secreto una petición para cambiar la corte. Como no había otros herederos excepto Yoongi, propuso que el gobierno cambiara su funcionamiento; no debe haber un gobernante y en su lugar debe haber diez personas que gobernarían juntas, las decisiones tomadas serían entre estas diez personas seleccionadas. Propuso un gobierno más democrático.

A Yoongi no le disgustó la idea, pero cuando investigó un poco más al respecto, quiso partirse de risa por los sesos de este viejo astuto. Los diez candidatos que gobernarían estaban preestablecidos y de los cuales, seis estaban relacionados con él. Básicamente estaba proponiendo la idea de dejar que su familia y amigos gobernaran esta nación bajo la fachada de un gobierno democrático. 

Era una broma risible y no había forma de que Yoongi estuviera de acuerdo.

Aunque este viejo Hwang estaba del lado de su padre y no le agradaba Yoongi, nunca mostraría sus sentimientos abiertamente. Era como un zorro con piel de pastor. Esperando el momento perfecto para atacar.

El anciano cuyo rostro había visto las ruinas del tiempo, sonreía mientras le daba la bienvenida al príncipe heredero. Sus arrugas se hicieron aún más evidentes cuando sus labios se curvaron hacia arriba. Parecía inocente a primera vista y si Yoongi no conociera mejor a este hombre, se engañaría al pensar que este hombre era tan inocente e inofensivo como parecía.

"Su alteza, bienvenido a mi humilde hogar".

Yoongi solo asintió mientras entraba. No le gustaba este viejo zorro, pero no tenía motivos para despedirlo de la corte y, siendo ese el caso, no podía mostrar abiertamente su odio hacia este hombre, sin embargo, esto no significaba que iba a fingir amistad.

El anciano era uno de esos tipos de personas orgullosas que se sentían mejores que el resto y merecían ser respetadas. A sus ojos, aunque se refirió a Yoongi como su alteza, un título muy por encima de él, todo eran palabras vacías. No tenía ni una pizca de respeto por el príncipe heredero, este hombre tonto era mucho más joven que él y no sabía cómo funcionaba el mundo.

Yoongi sabía que detrás de esa sonrisa amistosa, el hombre le tenía muy poco respeto, pero naturalmente no lo iba a llamar por eso.

El rostro viejo, arrugado y sonriente no cambió pero los sentimientos del dueño sufrieron un cambio hacia el sur. Sintió que este príncipe heredero era un mal ojo, siempre actuando tan poderoso como si nada en el mundo pudiera tocarlo. Al no mostrar respeto por los mayores, estaba seguro de que algún día se metería en un gran problema.

Las dos personas que estaban en desacuerdo se dirigieron al interior donde había una mesa preparada para ellos, sobre la mesa había deliciosos bocadillos y una tetera con dos tazas a cada lado de la mesa.

Los bocadillos y el té se veían atractivos, pero Yoongi, naturalmente, no se atrevería a tocarlos. A pesar de que había dicho que estaba aquí para tomar el té, no iba a beber algo que muy bien podría contener veneno.

Se sentó a un lado y ni siquiera miró los bocadillos o el té, sus ojos estaban enfocados en el anciano que estaba sentado frente a él.

"Su alteza, ¿qué la trae por aquí?" El hombre fue al grano ya que tampoco estaba interesado en tener conversaciones triviales con este joven príncipe heredero.