Los Ángeles del Destino

Capítulo 03.5

¡Atención!

Este capítulo no fue creado con la intención de ofender a nadie y ninguna religión! Apenas es un capítulo de fantasía, creado para una trama más interesante. Si no te gusta puedes avanzar este capítulo pero les aviso que hará más sintido después.
El capítulo fue un poco inspirado en la série Supernatural, super recomiendo!

El inicio de los tiempos...

El cielo era como un jardín sin fin, se podía ver colores rojo, rosa y verde que se destacaban en la paisaje.

Dios era un adicto a crear nuevas razas de cualquier cosa, cómo: plantas, seres vivos, o
simplemente cualquier cosa que se pasara por su cabeza. Ese era nuestro padre.

***

Desde millares de años, Dios, una entidad misteriosa y divina, representaba la luz.

La verdad, la justicia y la bondad.

Pero lo que muchos no sabían es que. El mismo tenía una hermana, su nombre era un misterio para muchos.

Ella representaba la oscuridad.

Los dos juntos son como el Ying y Yang. El equilibrio de la naturaleza.

Ellos dos vivían en un lugar apenas iluminado por las estrellas, allí vivían en paz, solo los dos.

— ¡Hermana mira! — exclamo el pequeño niño, tenía su pelo atado en una coleta, era largo y blanco, tan blanco como la nieve.

Sus ojos eran dorados y brillaban inocentemente.

Ese era Dios.

—¿Qué sucede pequeño?—preguntó la chica, al contrario de su hermano menor, esta tenía el pelo tan negro cuanto un abismo sin estrellas. Sus ojos rojos como la sangre derramada en batalla. La chica aparentaba tener no más que 16 años.

— ¡Mira, nació una nueva estrella! — el chico animado apuntó en dirección a un nuevo brillo, era el nacimiento de una nueva estrella.

Los hermanos estaban solos en aquel lugar, no tenían ningún medio de entretenimiento más que jugar y admirar las estrellas o planetas.

— Sí, otra más… —susurró la chica desanimada.

¿Cuánto tiempo había pasado desde su nacimiento?

No tenía idea, pero sabía que estaban allí más tiempo de lo que deseaba.

Los pequeños dioses nacían de una explosión de una estrella con planetas, aún era misterioso pero era tan raro y único, que por eso solo habían 2 Dioses, hasta ahora.

— Hermana, ¿Cuándo me vas a decir tu nombre?

—Yo no tengo nombre.

—¿Cómo que no tienes? - La miró sorprendido.

—Yo fui la primera creación, así que...no había nadie para darme un nombre —susurró, a sus adentros estaba un poco avergonzada.

—Hm . . . —mumuró pensativo— ¡Yo!...¡Yo te daré un nombre hermana! - gritó emocionado el niño.

—No es necesario, pero gracias —la joven que estaba sentada en un suelo firme, miró al frente, admirando el brillo de las estrellas a lo lejos.

— ¿Cómo que no es necesario? ¡Mi hermana me dio el mío! ¡Así que le daré uno! — el niño animado se sentó a su lado.