Sal Conmigo ꒱ Jintae

Único.

La mañana es fría en la preparatoria donde estudian los hermanos Kim, ambos han llegado tarde debido a un accidente con el auto de su padre. Tanto Taehyung como Jungkook se encuentran corriendo por los pasillos para poder ingresar cada uno a su clase. 

Taehyung con una clara ventaja sobre Jungkook, pues el mayor de los Kim tiene que subir hasta el tercer piso mientras que el menor solo tiene que subir al primer piso.

—¡Nos vemos al rato! —exclama Jungkook mientras sigue subiendo las escaleras. 

—Con cuidado —grita Taehyung sin darse cuenta del chico que viene corriendo frente a él y con el cual cae al suelo segundos después —. ¡Diablos! —se quejan ambos chicos, una vez que caen al suelo frio. 

Inmediatamente, Taehyung intenta ponerse de pie y acto seguido su pie falsea y vuelve a caer al suelo de pompas. 

—Lo lamento mucho —se disculpa el chico frente a él con una mirada totalmente sincera y linda —. Y-yo, yo no te vi —comenta antes de poderse poner de pie e intentar a ayudar a Taehyung a levantarse, sin darse cuenta que conoce a aquel chico con el que ha chocado. 

—También es mi culpa, tampoco te vi —Centrando su mirada en los ojos cafés del hermoso chico frente a él, Taehyung sonríe —. ¿Hobi? —cuestiona como si de un sueño se tratará.

Dibujando una sonrisa más que alegre sobre su rostro, el castaño por fin reconoce al atractivo chico frente a él y algo perdido menciona su dulce nombre —. ¿Taehyung-ah?

Asintiendo ambos al cuestionamiento del otro, ambos jóvenes se sonríen cómo hacia años no lo hacían.

—¿Cuándo volviste? —Quiere saber el pelinegro de Tae.

—Apenas hace una semana pero con todo eso de la mudanza no había podido venir a la escuela y mucho menos contactarte —divisando a un chico de tes morena detrás de ellos, Hobi termina por ayudar a Tae de sacudir su ropa y levantar las pocas cosas que han salido volando de los bolsillos de su uniforme. 

—Que increíble que regresaste a Corea —asegura Taehyung mientras guarda todas sus monedas descuidadamente en la primera bolsa de su mochila que puede abrir. 

—Me alegra tanto verte, Taetae. —dice antes de estrechar entre sus brazos a Taehyung y ver a aquel chico de tes morena irse por las escaleras cuesta arriba. 

—Me encantaría tanto que habláramos y nos pusiéramos al día pero tengo clase y voy tarde. Nos podemos ver en el receso, ¿te parece? —pregunta con cuidado, recibiendo rápidamente un asentimiento por parte de Hobi. —¡Perfecto! Te veo al rato —agrega antes de volver a correr y desaparecer casi al final del pasillo con una gran sonrisa y un muy lindo recuerdo de su niñez.

Volviendo al salón del sanitario, Namjoon toma asiento tranquilamente a un lado de Seokjin, guardando lo que ha visto en los pasillos de abajo hace unos momentos solo para sí.