Mugiwara's flowers |One piece hanahaki|

Hanahaki

"Nadie sabe cómo surgió. ¿De una isla? ¿En el mar? ¿Es acaso un castigo de una divinidad del cielo? Nadie lo sabe.

Lo único que se conoce del tema, es que es una enfermedad terrible se ha esparcido por todo el mundo. Se han detectado casos en los cuatro Blues, Grandline e incluso en el Nuevo Mundo. No se ha encontrado relación alguna entre los afectados, han sido: marines, piratas, simples pueblerinos, esclavos, etc. No hay distinción, incluso los gyojines y otras razas se han infectado. Pero todos tienen algo en común; un amor no correspondido o unilateral.

La han catalogado como una de las enfermedades más hermosas y trágicas del mundo."

La bella mujer estaba sentada en una silla de playa en la cubierta del barco, marcó la página del periódico que leía. A ella no le interesaba esa noticia, no era como si a ellos les afectase, pero sabía que era importante para el sueño del doctor de la tripulación.

La puerta de la cocina y comedor se abrió y de allí sale el cocinero. Llamó a todos a comer como cada tarde. Nami se levantó tranquila y tuvo que esquivar al capitán, que iba corriendo como una fiera, seguido de Chopper.

—En serio parecen niños pequeños —se quejó y masajeó su cien.

—Si Luffy no estuviera animado, no sería Luffy, ¿verdad? —El adulto más responsable de la tripulación, y el único gyojin, apoyó una mano en el hombro de la chica con una sonrisa.

—Claro, pero a veces me gustaría que no se comportara como... —soltó un suspiro y se resignó con una sonrisa—. Ya no importa, es Luffy después de todo.

Los diez estaban sentados alrededor de la mesa, animados, empezaron a comer la deliciosa comida que preparó Sanji. La conversación animada surgió y Nami se olvidó del periódico.

—¡Luffy! ¡Deja de robar nuestra comida! — Usopp defendía su comida con tenedor y cuchara, de su capitán, pero él solo se reía y seguía comiendo y robando. Estiró su brazo hasta el otro lado de la mesa y tiró el periódico al suelo, al lado de Franky.

—Ah, lo siento. — La voz de Luffy no podía sonar más falsa, pero quería comer así que mientras antes se disculpaba, antes era perdonado y el tema quedaba zanjado.

Franky se agachó y recogió el cúmulo de hojas y se lo extendió a Nami, antes de seguir comiendo. Ella le agradeció y el peliazul le dio un súper: de nada.

—Chopper —El reno terminó de comer y se volteó a verla —, en el periódico salió información de una enfermedad nueva que se esparció, pensé que te interesaría.

—¿Una nueva enfermedad? —El pequeño se bajó de su silla y se acercó a Nami.

—Ahora que lo pienso, Chopper, tu sueño es encontrar una cura a todas las enfermedades, ¿no? —habló Brook y el niño asintió, con una mezcla de emoción y preocupación, empezó a leer la sección que Nami le había marcado —. ¿Cómo lo harás si no paran de salir enfermedades?

Chopper frenó y se giró a verle con una expresión de terror y gritó, desesperado. No había pensado en eso.

—Chopper lo logrará. —Zanjó Luffy sin dejar de comer.

—Luffy... —lloró el renito, se animó y retomó su lectura con la esperanza revivida.

—Hablando de sueños, ¿ustedes qué harán después de lograr su sueño? —preguntó con una sonrisa el nuevo integrante, Jinbe.

—En el All Blue cocinaré todas las recetas que se me ocurran y ustedes las podrán probar.

—Con el mapa podremos viajar con seguridad a donde queramos.