¡MI SEÑORA! ||Thor x Lübu fem [shumatsu no valvirye]

cap 7

Entre enojo y tristesa Thor tomo el rostro de la guerrera y con fuerza lo acercó al suyo. Cheng casi pierde el alma al confundirlo con un beso

El cabello de thor impedia ver como la mimaba, sus susuros tiernos vagamente se escuchaban

💕.."Eres muy bonita" .."no llores" "si, si lo eres" "ya calmate" 💕

cuando terminó la mujer parecia de buen animo con un brillo en sus ojos entre el rubor de sus mejillas. Thor tenia una sonrisa guapetona de éxito

Irrisoria la guerrera recobró la compostura apartandolo con un sofion de enfado. Talvez estaba en los efectos de los estrogenos o algo asi y no pudo contener sus bajos instintos, pero ese no era motivo para revajarse a ese nivel de vulnerabilidad femenina. O no dejaria que se aprovecharan de él, thor también parecia un sujeto provechoso

-Jajaj esta bien, te vere luego - se despidió para volver a casa.

...

Agradecidos lui y cheng vieron partir  al visitante. Thor se mantenia aun con su rostro alegre con el recuerdo de Lubu en su mente, eso le despertaba un calor en sus mejillas y una sonrisa timida y temblorosa en sus labios, cualquiera que lo hubiera visto habria jurado que estaba enamorado.

Afortunadamente la noche estrellada  lo dejaba demostrar esas cosas, el camino estaba descierto y aunque mayormente ese abrigo que traia siempre cubria la mitad de su rostro ya no tenía pena de ocultar la alegria que lo inundaba.

Esa noche ambos durmieron profundamente, no había nada mas que pudiera arruinar lo que quedaba del dia. con esa satisfacción en sus adentros cedieron a la calma, antes de dormir observava el cielo con su imagen prescente. Era realmente hermoso y especial ese sentimiento

Nunca antes una mujer le hizo sentir algo como eso. Lubu fue el primer hombre.. y a su vez la primera mujer

...

Al siguiente dia la calides volvió, el cielo despejado y los rayos de sol radiantes con el cantico de los pajaros.

Zeus se paseaba alegre con su bastón acompañado de Adán quien acariciaba su barba y contemplaba con su calma temple el cielo.

A lo lejos hermes veia como el padre de los dioses señalaba aves y animales en en patio y hablaba con entusiasmo de ellos, realmente eran unicos. Adán asentía como un niño pequeño y preguntaba sobre las cosas. Zeus tenia animos por él, su juventud parecía revitalisada con la llegada del humano

Adán: aquí es el paraíso..

Ambos miraron al cielo meditando.

...

Mientras tanto Poseidón se paseaba con la bufanda de sasaki. El espadachin estaba contento con el niño que de vez en cuando lo miraba. siempre pensaba que podía volver a su hogar cuando quisiese, en lugar de eso prefirió mantenerse a su lado.

Con una katana hecha a su medida el niño caminaba sujetandola a un costado. Con un poco de paciencia el asiatico le enseño casi todo lo que sabia, como crear replicas de sus oponentes, convivir con la armonia de la naturaleza y susistir de una forma humilde.

Claro que poseidon no necesitaba nada de esto, era un dios lleno de lujos, sin oponentes capaces de hacerle frente y todo el dominio de los peces y la naturaleza; era dificil aprender algo nuevo, pero de alguna forma llevar ese estilo de vida, convivir con amabilidad entre las personas y estar serca de aquel humano eran un pasatiempo para el. Habia pensado observarlo de serca, saber mas sobre su tecnica.. lamentablemente había llegado a descubrirlo todo sin creerse a si mismo que fue capas de perder una batalla contra tal sujeto repleto de sensilles.

A menudo peleaban para practicar velosidad y precisión.. pero sasaki siempre se daba por vencido y eso no era divertido ¿o talvez si?

Un humano realmente inofencivo incapas de dañar a un niño y a cualquier persona.

Mirando su sonrisa anciana intentaba desifrar que gusto le tenia a la vida.

"Sasaki kohiro.. el hombre mas puro y amigable derrotó a un dios"

Eso siempre pasaba por su cabeza.

Los humanos eran sin dudas sorprendentes.

Nunca hubiera imaginado siguiera ser derrotado por el mas despiadado y fuerte de los dioses.. y ahora tenia que lidiar con la derrota ante el perdedor mas grande de la humanidad.

- ¿oye niño.. quieres ir por algo de comer?

Poseidon asintió