O6 | No le digas a SeokJin

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Como todos los sábados, YeonJun se preparaba un tazón de palomitas y compraba unas cuantas golosinas más, mientras ponía alguna película de suspenso o un documental sobre casos criminales para sentarse sobre el sofá y ser perezoso todo el día.

SeokJin se iba al gimnasio todos los sábados, desde las 3:00 hasta las 7:00 de la noche. YeonJun no entendía porque desaparecía casi todo el día, pero sinceramente tampoco le importaba, pues le agradaba tener la casa para él sólito, a pesar de que no hacía nada más que ver películas y comer hasta sentirse satisfecho.

Pero aquel sábado, algo realmente inusual sucedió.

El timbre de la casa sonó, YeonJun dejó pausada la película que estaba viendo y caminó hasta la puerta para poder abrirla, no creía que fuera SeokJin ya que este traía sus llaves, o a lo mejor se le olvidaron.

Cuando la puerta se abrió, casi se ahoga con su misma saliva al ver a aquel pelinegro frente a él.

ㅡHyung... ¿qué hace aquí?ㅡpreguntó, tragó pesadamente y volvió a decirㅡ, SeokJin no está, puede venir a buscarlo en otro momento.

Por supuesto, SeokJin no estaría contento si se enteraba que SooBin estaba ahí, probablemente había ido a buscarlo para que salieran, pues el mayor frente a él lucía demasiado atractivo.

ㅡOh, sí venía a buscarlo, creí que estaría en casaㅡdijo de lo más normal, aunque YeonJun pudo percibir un poco de falsedad en sus palabrasㅡsupongo que lo voy a esperar.

YeonJun frunció el ceño y asintió, antes de que pudiera decir algo más, SooBin ya había entrado en la casa, dejando a un conmocionado YeonJun aún sosteniendo la puerta de la entrada.

Rápidamente reaccionó y cerró la puerta, camino hasta darle leve golpecitos en su hombro para llamar su atención.

ㅡHyung, no creo que deberías esperar adentro, tú sabes...ㅡhizo un leve puchero, no queria sonar grosero pero la verdad tenía que serlo, si SeokJin llegaba y lo veía aquí, entonces estaría perdido.

ㅡAh pequeño, ya sé que tu hermano está obsesionado con cuidarte, pero no haré nadaㅡle sonrió, el pequeño toque de burla se escabullia entre su mirada y YeonJun supo que era momento de negarse y no dejarlo ganar, pero, sinceramente SooBin podía con élㅡ, claro... a menos que tu quieras.

Se acercó, dando sólo cuantos pasos para estar más pegado al menor. YeonJun retrocedió un poco, no era que tuviera miedo, bueno, tal vez temía que de pronto SeokJin abriera la puerta de la casa y los encontrara ahí.

Pero temía más de él mismo, siendo Choi SooBin la persona que tenía cerca de él, el tipo que le calentaba demasiado, viéndose tan atractivo ante sus ojos, con esa mirada que querer devorarlo. No sería capaz de resistir tanto tiempo si el mayor seguia ahí.

ㅡHyung, debería irse. ¿No tiene miedo de que SeokJin lo encuentre aquí? Sinceramente, me da un poco de pánico imaginar lo que podría hacerle.

SooBin le miró atentamente, con la punta de su lengua delineó sus labios mientras tragaba duro.

ㅡ¿Quieres que te diga un secreto?ㅡYeonJun negó, alejándose un poco del mayor, sin embargo, las manos de Choi se aferraron a sus hombros, acariciando sobre ellos y bajando lentamente por sus omóplatos hasta su espalda, dando leves caricias que lograron descolocar a YeonJun ㅡ, SeokJin estará demasiado ocupado, probablemente no pueda llegar hasta después de las 7.

YeonJun tembló bajo sus palabras y por fin conectó su mirada con la del mayor.

ㅡ¿Por qué lo dices?ㅡpreguntó.

ㅡBueno, ¿en serio creés que tu hermano tarda tantas horas en el Gimnasio?ㅡdijo de manera juguetona, evitando soltar una carcajada al ver la expresión en el rostro de YeonJun.

El menor se lo había imaginado, pero nunca se ponía a pensar de más, respetaba la privacidad de su hyung, aunque a veces SeokJin no hiciera lo mismo con él.

ㅡEntonces, ¿por qué SooBin hyung está aquí?ㅡvolvió a preguntar, está vez estaba actuando un poco más confiado y no tan avergonzado.

ㅡSólo veía a dejarle estoㅡsacó una memoria USB del bolsillo de su pantalónㅡ, me la prestó para descargar unas cosas de la escuela, así que venía a devolverla.

YeonJun frunció las cejas, para después soltar una risita.

ㅡHyung, es la excusa más tonta que he escuchadoㅡrió el menor.

ㅡUh... tenía que intentarloㅡse alzó de hombrosㅡ, debía encontrar una excusa para verte, cariño.

YeonJun cesó su risa y sintió sus mejillas calientes ante ese apodo.

ㅡHyungㅡmurmuró, escuchando como el mayor hacía un sonido con su boca para indicarle que lo escuchabaㅡ, primero déjame ponerle seguro a la puerta.

Dios, YeonJun había jadeado eso último sobre su oído, como si pretendiera ser tan inocente para después alejarse de su lado y cerrar la puerta con seguro. Si SeokJin regresaba, al menos se darían cuenta al escucharlo batallar con las llaves.

Ni bien se alejo de la puerta, sintió esos fuertes brazos cargarlo de la cintura, lanzó un pequeño grito, el cual callado enseguida por esa boca.

SooBin se tragó sus gritos, con sus labios unidos en un encuentro un poco incómodo por el repentino ataque. Sintió la lengua del mayor chocar contra sus dientes, pidiendo acceso para explorar su boca, el menor abrió ligeramente esta para soltar un gemido entre besos.

SooBin besaba realmente bien, y aunque por lo regular YeonJun prefería más los besos sutiles donde no había tanta morbosidad, ahora mismo se encontraba jadeando sobre la boca del mayor, con su saliva resbalando de ésta y sus lenguas tan húmedas paseándose entre ellos.

El ambiente se tomó tan caliente, que podía sentir su cuerpo tan pegado al de SooBin, con las manos del mayor en su cintura, apretando aquella zona con fuerza, jurando que dejaría marcas en esa zona.

ㅡE-espe....

ㅡNo cielo, no pidas que me detenga ahora mismoㅡmurmuró sobre sus labios, ambos con la respiración agitada, esperando por volver a besarse con la misma intensidad.

ㅡHyung, si SeokJin se entera de esto, estamos muertosㅡle dijo, sintiéndose un poco nervioso.

ㅡEntonces, no le digas a SeokJinㅡsusurró, su aliento caliente golpeando el rostro de YeonJun ㅡ, SeokJin no tiene que saber que me voy a follar a su hermanito tan fuerte que será la razón por la que no caminará cómodamente en días.

YeonJun soltó una risita, la idea que SooBin tenía en mente le gustaba. Así que entré rezos y disculpas mentales hacia su hermano SeokJin, ambos subieron a la habitación del menor.

No le digas a SeokJin | soojunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora