Nitzi (FemOC) es obligada a vivir con un extraño con quien fue comprometida, al irse se enamora de Mikasa, quien comienza a ver todos los días en la estación del tren, ambas reprimen sus sentimientos por miedo a ser juzgadas, hasta que después de un...
Holaa, quería hacer este especial para que leyeran lo bonito que hubiera sido si Nitzi hubiera sobrevivido, muchas gracias a todas las personas que leyeron la historia e infinitas gracias por recomendarla <3 espero les guste.
No es un final alternativo, solo es un "Qué pasaría si..."
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El tren pasaba justo por los límites de la ciudad cuando todo se tornó oscuro para los pasajeros. Un fuerte estallido sorprendió a todos, lo que Eren tanto temía que pasara ocurrió.
La pelinegra estaba aturdida y la cabeza le daba vueltas, no había ni un solo rincón iluminado en el vagón. Con sus manos comenzó a tocar a sus costados para darse una idea de su espacio.
–¿Nitzi?–preguntaba mientras exploraba sus alrededores con el tacto- ¿Dónde estás?
–Aquí–escuchó susurrar a su derecha.
Con el sonido de su voz, Mikasa gateó hasta encontrarse con el cuerpo de su amada, quien yacía recostada sobre los escombros. Nitzi susurraba cosas que la otra chica no podía distinguir por los gritos y lloriqueos desesperados de las demás personas, sumando al pitido que aún resonaba en sus oídos.
–No entiendo lo que dices–dijo la pelinegra desesperada por tratar de entender lo que decía su amada.
La castaña tomó la mano de la mujer y la dirigió a un costado de sus costillas. Las lágrimas de la pelinegra comenzaron a salir al sentir un líquido levemente espeso en toda la espalda de la chica. En un movimiento Mikasa sujetó a Nitzi para después recostarla suavemente sobre sus piernas.
–Pronto vendrán a ayudarnos, resiste por favor, no quiero que ...– comenzó a hablar pero se vio interrumpida.
–Mikasa– habló la castaña.
–¿Si? – contenía sus lágrimas.
–¿Puedes contarme más acerca de ese lugar al que vamos?– preguntó con la voz baja.
–Preferiría que lo vieras– contestó acariciando el cabello de Nitzi.
–No creo que eso suceda– comentó con un nudo en la garganta.
Los ojos de ambas comenzaban a cristalizarse, sabían que era casi imposible que la ayuda llegara a tiempo, estaban casi fuera de la ciudad, los servicios médicos se establecen mayormente al centro de esta. Mikasa no conocía ese lugar, pero al ver la condición de su amada, cerró los ojos y empezó a imaginar.
–Es una pequeña casa en medio del bosque– contó.
–¿En el bosque?– preguntó Nitzi con un tono de ilusión – A ti te gusta el bosque así que es perfecta
–Lo es– contestó sonriendo al borde del llanto.
–¿Y qué más?– murmuró.
Antes de que Mikasa pudiera contestar unos gritos la detuvieron.
