Después de tanto reír, fuimos a la cafetería a comprar unos burritos, ya que sólo faltaban diez minutos para entrar de nuevo a clases.
Al término de comer los burritos nos dirigimos al salón, decidimos irnos por el atajo para ahorrar tiempo.
De camino al salón nos encontramos a Yolie en el pasillo.
-¿Donde estaban?, ¡Los estuve buscando por todas partes!-. Dice Yolie.
-Estábamos en el kiosko, hablando sobre los cólicos-. Dice Thais mientras se ríe un poco.
-¿De cólicos?-. Pregunta Yolie.
-Sí, es que tengo unos horribles, y pues con Eddy me siento cómoda hablando de ello-.
- ¡Pero yo también soy mujer! También te entendería-. Dice Yolie enojada.
- Si, pero Eddy es... Eddy-. Dice entre rizas.
- ¡Ay ya basta!, ¡cálmense las dos! -digo enfadado. -Hablemos de otra cosa, por ejemplo: las vacaciones, solo falta un día para salir de clases. Hay que salir a disfrutarlas los cuatro juntos-.
-¡¡Sí!! -Dice Yolie dando pequeños saltos.
-Escuché que en la Universidad Julliard, la que está a unas cuadras de aquí, habrá una mega fiesta, el próximo sábado; deberíamos de ir -. Dice Thais.
-¡Eso estaría genial! ¡Tenemos que ir! - grita Yolie. ¿Puedo llevar a mi novio?
- ¡Claro!- dice Thais -¿Y tú que tanto piensas Eddy?
-No, nada solo que...
¿Ir a una fiesta de Universidad?-digo intrigado. -¿Nosotros que vamos estar haciendo allí?
- Pues divertirnos, dahh- me dice Thais. -Ándale Eddy, ¡vamos! - súplica la alocada de Yolie.
-No sé, tengo que pensarlo - les digo a ambas.
-Que tal y vuelves a ver a Gonzalo, escuché que irían muchos estudiantes de varias universidades de alrededor-. Dice Thais. -A lo mejor y te topas con el-.
-Thais, esa es una probabilidad muy pequeña, ¿Qué tal y no era de aquí? - digo. -Mañana les digo.
-Anda le Eddy no seas así-. Me dice Yolie. -¡¡Vamos!!
-Ya les dije que mañana les confirmó-. Digo mientras guiño el ojo.
-¡¡Eso es un sí!- grita alegremente Thais y empieza a dar vueltas por el pasillo, hasta el punto en que tropieza, y si no hubiera sido por un muchacho que la agarró de la cintura, hubiera caído de hocico.
-Ten más cuidado, princesa-. Dice aquel muchacho alto, con ojos de color azul aqua.
Thais sólo sonríe y se pone roja como un tomate.
-Bueno, nosotros nos vamos -. Le digo a Thais mientras agarro a Yolie de la mano y la jalo hacía el salón.
-No espera quiero ver qué pasa con... -
Empieza a decir a Yolie, pero le tapo la boca antes de que salga con una tontería.
-Bye chico- digo otra vez.
Entramos al salón y ya estaban todos en su lugar, Gael nos mira y hace una seña para saber en donde esta Thais, pero no le hago caso.
Las horas pasan y Thais ni sus luces, suena el timbre de salida y le digo a Yolie que me acompañe a buscarla.
Dando vuelta nos topamos a Thais con el chico de ojos azules, despidiéndose de beso. De lejos nos grita Gael, diciendo que lo esperemos.
-¿Dónde andaban? - pregunta Gael. -¿Y Thais?
