Mondstadt: Un día en la ciudad part. 2

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Sede de los caballeros de Favonius

La gran maestra intendente, Jean, se encontraba revisando una gran cantidad de documentos que llenaban su escritorio, se podía ver algo de cansancio en sus ojos, pero no podía abandonar su labor

La puerta se abrió dejando escuchar un pequeño chirrido, Jean miro a la puerta para ver como la bibliotecaria entraba con una expresión seria

-Lisa- la rubia dijo mirando a su amiga

-Jean, eh buscado en toda la biblioteca y encontré algo sobre la oscuridad- Lisa dijo mostrando un libro -pero creo que no es lo que esperabas-

Jean solo miro con confusión a la ojiverde, Lisa se acercó a la rubia y le entrego el libro

-¿cuentos infantiles?- Jean dijo con duda -¿estas segura?-

-es lo único que encontré relacionado al tema- Lisa dijo aun manteniendo la mirada seria -mira esta parte-

Lisa se acercó y abrió el libro mostrando un pequeño cuento que solo tenía una página con un extraño titulo

"El hombre de cristal"

Jean comenzó a leer el pequeño cuento

Había una vez un hombre con una piel tan delgada como el papel y tan frágil como el cristal

Su piel se lastimaba con la misma luz del día, incluso el viento y el agua le hacían sentir dolor

El hombre solo se escondía en su pequeña casa evitando todo contacto con el exterior, cada vez que se escondía podía escuchar el sonido del viento golpeando su ventana, los pájaros que cantaban fuera de su casa, las voces felices de la gente que pasaban por ahí

El odiaba eso ¿Por qué ellos viven felices? ¿Por qué él no podía hacer lo mismo?

El comenzó a odiar a todo lo que estaba fuera, la gente, los animales, las plantas, los elementos, la luz... todo era desagradable para él, solo las sombras lo hacían sentir seguro

De pronto una grieta se abrió en piso, de ella emergió una serpiente que miraba fijamente al hombre que no reacciono, sino que solo se quedó mirándola con desinterés

"si me mataras hazlo ahora" el hombre dijo

"o pequeña criatura desamparada" la serpiente hablo "maldito en este mundo al que no le interesas"

El hombre no dijo nada

"solo la oscuridad te ha dado refugio" la serpiente se acercó "pero en un mundo de luz, las sombras no son bienvenidas, al menos no aquí"

"que quieres de mi" el hombre hablo sin miedo

"te ofrezco un lugar donde vivir, un lugar donde nada ni nadie te lastimara" la serpiente dijo "un lugar donde el viento no sopla, donde la roca se hiso polvo, donde el relámpago no resuena, donde la naturaleza murió, donde el fuego se apagó, donde el hielo se derritió, donde el agua se secó, donde la luz no llega"

La serpiente se tambaleo un poco para darse vuelta a la grieta

"sígueme y vivirás en paz por fin" la serpiente digo reptando hasta la grieta

El hombre solo miro como la serpiente entro otra vez en la grieta

El hombre comenzó a gatear hasta la grieta y entro en ella, pudo sentir como caía, pero poco a poco se fue deteniendo hasta terminar flotando en lo que parecía pura oscuridad

El hombre se sintió tranquilo, una paz que nunca había sentido... sintió como las sombras lo abrazaron con calidez, la serpiente comenzó a moverse a través de su cuerpo hasta llegar a su cuello para morderlo

La estrella caída (Harem)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora