Parte 1 Sin Título

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Mónica es Letrada en la Audiencia Provincial de Toledo. Tiene una vida perfecta, luce la piel que todas sus amigas desean, tiene aspiraciones y sueños y el hogar con el que siempre había soñado. Disfruta de cada juicio como si fuera el primero, el frenesí de los momentos previos y el revuelo que provoca la terminación de estos de entre toda la población. El caos es a veces en su vida un factor inevitable y el cual siempre aplaca de la misma manera. Con la música.

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Pablo es un delincuente primerizo incapaz de mantener su vida en orden durante más de un día seguido. Nació en Madrid, pero una sucesión de desdichas y casualidades terminarían por darle en Toledo la vida que nunca habría deseado. Actúa impulsado por la rabia y canaliza de manera equívoca los ataques de furia que sufre a menudo. Tiene un corazón enorme y que, sin embargo, tan sólo aprecia aquel que le conoce. Roba y atenta sin pudor y actúa por inercia muy en contra de lo que le aconsejan. No importa. Es rebelde porque es lo único a lo que aprende alguien que no conoce el afecto. Una vida llena de infortunios y alarmantes desenlaces en la que la calma llega tan sólo cada noche, cuando Pablo introduce en sus orejas los auriculares que hace años le regaló su madre por su cumpleaños y pulsa el play. 

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La seriedad con la que Mónica blinda sus juicios desaparece cuando abandona la Audiencia y canta y grita a pleno pulmón mientras nadie le oye al ritmo de las canciones de Taburete.

Su padre le ha inculcado la pasión por la jurisdicción y su madre el deseo por no abandonar jamás, aunque de manera indirecta, la música. Mónica es audaz y cauta. No sabe deshacerse del nudo en el pecho cada vez que vive algo desagradable sin abrirse en canal frente a sus mejores amigas, una copa de vino en la mano y sonando de fondo el último vinilo que ella misma ha tenido el placer de regalarse en alguna ocasión especial. Odia las discotecas, pero nunca abandona la tradición. La feria de los pueblos y las bandas de música que en ellas tocan e interpretan canciones antiguas, el sonido de un crío pasándolo bien y el ruido de las atracciones en marcha es parte de lo que, aunque tan sólo una vez al año, le hace feliz. Mónica es sencilla y entregada. Disfruta del trabajo tanto como de la vida que retoma cuando abandona los Juzgados. Tiene una vida plena y tanto que, a veces, siente no ser capaz de abordar y aprovechar todo lo bueno que ahora tiene y ella misma se ha encargado de alcanzar con dedicación y constancia, algo que no le pasa en absoluto cuando, antes del trabajo, con el café en mano, tararea, con la mirada puesta en el ventanal del salón, las canciones del grupo español que tanto le gusta.

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Las aspiraciones de Pablo, por el contrario, son tan limitadas que a veces olvida lo que significa luchar. Ni si quiera nunca, desde que empezaba su nueva vida en Toledo, lo había hecho. Su día a día carece de rutina y tan sólo se empeña en seguir delinquiendo. Pablo no tiene amigos, tampoco los echa en falta. Apasionado de las melodías que él mismo, a veces, compone en su propio lenguaje y de las voces que se mezclan y entrelazan para crear la sinfonía perfecta. Asiste, cada vez que puede, al concierto de cualquier grupo de pop/rock español con el dinero que obtiene metiendo la mano en el bolsillo de la gente. La calle es la cárcel en la que se ha propuesto perder la independencia. El tipo de encierro y condena al que te sometes cuando te topas de golpe con tanta libertad, supongo. No llora a menudo, porque tampoco se trata de un sentimiento que haya en algún momento relacionado con la tristeza. Para él, la amargura se transforma en rabia justo después de recuperar la firmeza. Desaparece la desazón y se manifiesta la furia con la que afronta todo lo que viene después. Rompe objetos cuando no está conforme y huye siempre que augura no tener la razón, se enfrenta a cualquiera porque cualquiera puede arrebatarle el ápice de paciencia con el que se despierta cada mañana y nada, ni absolutamente nadie es capaz de hacerle recuperar la conciencia. Veintiún años de extremada pobreza. Pablo divaga por la vida sin recursos ni aspiraciones, pero con un solo deseo. Que no le falte la música.

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⏰ Última actualización: Jun 16, 2022 ⏰

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LA CANCIÓN QUE NOS UNE (relato corto)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora