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Berserk: no esperaba eso...

Berserk: pero no debería haber sido posible...

Berserk: estoy seguro de que no vi una puerta cuando llegué aquí por primera vez

Berserk: se habría requerido una enorme cantidad de energía para conectar los dos mundos

Berserk: entonces. ¿Cómo está aquí el ejército de los Gobernantes?

Cuando el Monarca Dragón siguió pensando.

Miró a Izuku, que estaba jadeando con ojos temblorosos.

Berserk: ¿estabas apuntando a esto todo el tiempo?

Berserk: ¿para distorsionar el espacio con el choque de grandes poderes, trayendo aquí a tus aliados del otro mundo?

Berserk: ¿la razón por la que distrajiste al ejército y la razón por la que me trajiste aquí?

Berserk: simplemente pensé que era porque querías tener una pelea tranquila

Berserk: pero... no hay forma de que te hayas comunicado con los Gobernantes...

Izuku quien había estado callado hasta este momento hablaría al ver como el Monarca estaba desapareciendo poco a poco.

Izuku: ...había una manera

Izuku: el recipiente de los Gobernantes. Los recipientes a los que prestan poderes todavía estaban aquí

Berserk: ¿es eso así...?

Berserk: así que usaste los recipientes para preparar una puerta a este lugar

Berserk: encontraste una manera de ganar la guerra, incluso si perdieras la vida

Berserk: humano, ¿cual es tu nombre...?

Izuku: ....

Izuku: Izuku...

Berserk: Izuku, ¿eh?

El Monarca quien vería como estaba desapareciendo, miraría al humano que hizo todo esto.

Berserk: Izuku...

Berserk: ...es mi completa perdida

Pero antes de que desapareciera, Izuku quería despejar una duda.

Izuku: eres tú, ¿no?

Izuku: el Monarca de las Llamas Blancas y el Monarca de las Bestias. Fuiste tu quien les ordeno atacar al Monarca de las Sombras

Berserk: ¿te dijo esto el Monarca de las Llamas Blancas?

En lugar de responder, Izuku miró hacia el cielo donde aparecieron los Gobernantes, sonrió de nuevo y luego miró al Monarca Dragón.

Izuku: Ashborn me pidió que te saludara por el

Izuku levantó su dedo medio, y los ojos del Dragón se voltearon.

La irá llego, corriendo hacia donde estaba el Monarca de las Sombras el dragón gritaria.

Berserk: ¡¡¡BASTARDO!!!

Pero...

Antes de que pudiera hacer algo, este desaparecería por completo.

La batalla de los dos monarcas dejó un rastro en el cielo.

Las cenizas que se habían elevado al cielo después de la pelea cayeron silenciosamente como la nieve.

Izuku miró las cenizas que empezaron a sentarse sobre sus hombros una por una.

LEVELING MY HERODonde viven las historias. Descúbrelo ahora