CHIP n' DALE [El chico del apartamento 512]

Aroma a nostalgia

Pizza doble queso.
Ese aroma inundaba la calle en donde se ubicaba el restaurante al que se dirigían.

Una vez adentro Dale se encargó de pedir la mesa mientras que Chip se inundaba de ese característico olor, no deseaba despegarse de la puerta de entrada, el lugar donde llegaba el olor a pizza, aquel local estaba justo al otro lado de la calle. Los recuerdos ocuparon su mente en ese momento, desde aquel día en que se conocieron y sabían que deseaban seguir juntos por donde la vida les llevara. ¿Por qué tenían que pelearse? ¿Qué hubiese pasado si no?

Dale por otro lado estaba tan sumido en sus celos y deseos de impresionarle que no se había percatado del estado de su acompañante. Pidió la mesa y fue atendido por los meseros, jalando a Chip de la ropa con delicadeza y sosteniendo su brazo como si fuera su pareja. Chip solo se sonrojó, pero no forcejeó para soltarse. A Dale le pareció extraño pero lindo.

Mientras caminaban hacia la sección de mesas de ardillas comenzaron una pequeña conversación
"¿Te gusta? El lugar no es nuevo, pero me agrada el ambiente." Cuestionó Dale "Es lindo, muy elegante. Tal vez... debería haber traído otro tipo de ropa" Habló el contrario, algo inseguro. Toda la gente del lugar vestía de etiqueta; trajes y vestidos. Chip, aún si se sentía cómodo con las ropas que vestía, le daba algo de vergüenza que incluso su amigo tuviera una vestimenta más acorde al lugar. Una mano tocó su hombro y otra apretó una de sus mejillas "Vamos Chipi, te ves mejor que todos aquí." Chip rodó los ojos, quitando la mano ajena y evitando aquel contacto.

Se sentaron a la mesa, les entregaron una sola carta donde venía el menú y ambos comenzaron a revisar. Cabe mencionar que la carta era mucho más grande que ellos dos. "Supongo que serán platillos muy grandes, habrá que compartir" Chip observó, miraba a las mesas tamaño humano y si algo sabía era de la obsesión por su amigo sobre las cosas humanas, así que era mejor prevenirse. "Cierto, ordena tú" Dale ofreció, no deseaba escogerlo todo y no dejar que su amigo participara, deseaba hacer las cosas bien por una vez en su vida "¿Yo?" "Mhm, anda, sabes bien que como lo que sea" Un breve silencio cubrió el ambiente, Chip cubrió su boca con la hoja el menú, intentaba no reírse pero escuchó aquel comentario en doble sentido. Dale no comprendía, pero cuando lo hizo solo abrió la boca algo indignado y luego de unos segundos comenzó a luchar con todas sus fuerzas para evitar soltar una carcajada.

Las ardillas fueron botadas del restaurante.
El "exceso de ruido" está prohibido ahí y Dale no ganó en esa lucha, terminó por reírse con mucha fuerza, a carcajadas para ser más específicos. Ambos estaban vetados y no podrían entrar hasta la próxima semana.
Dale se veía de semblante derrotado, aún si había reído hace unos minutos "Oye, perdona por lo qué pasó ahí adentro, arruiné la reservación" "No te disculpes Dale, no es el único restaurante en Miami ¿cierto?" Golpeó amigablemente el brazo del chico, Dale solo sonrió, pero su sonrisa era triste. Chip no perdió tiempo, quería que su amigo se sintiera mejor. Se encargó de llevar a Dale a unas bancas en el parqué más cercano y lo dejó ahí sentado. "Ahora regreso, espero no tardar" al mas alto no le quedaba mas que esperarle. En su mente seguía culpándose por lo que había pasado ¿por qué tenía que arruinarlo todo?

Unos minutos más tarde Chip se encontraba caminando a paso lento y sutil con una caja de pizza enorme. Dale logró reconocer a su amigo y ese aroma, tragó saliva y pensó "Oh Chip... eres maravilloso ¿lo sabias?"
"La comida ha llegado... ahora... ayúdame Dale, ya no aguanto" Dijo en voz alta el que cargaba aquella caja, sus pequeños brazos no soportaban tanto peso, había sido una mala idea ir caminando y negar la ayuda que le ofrecieron en su momento ¿Quién lo mandó a ser tan terco? Dale fue rápidamente donde su amigo y entre los dos subieron la caja de pizza en la banca y acto seguido subieron ellos. "..." Dale no dijo nada, solo se abalanzó sobre Chip dándole un abrazo gigantesco, mientras pequeñas lágrimas salían de los ojos de ambos. Revivir esos pequeños y maravillosos momentos juntos era todo lo que necesitaban.
"Pizza doble queso, ¿eh?" "Nuestra favorita" "Chip yo..." Su voz se entrecortó, estaba muy feliz y a la vez nostálgico. Chip estaba igual, solo que lo ocultaba mejor "Vamos, ya no llores y empezamos a comer. La pizza se enfriará"  Dale limpió sus lágrimas y asintió.
Comenzaron a comer enseguida.

Sabían que un solo pedazo bastaría para que ambos quedaran satisfechos. Comían de la misma rebanada de pizza, el queso derretido era la mejor parte.
Un pequeño hilo de queso unía ambas bocas, Chip no se enteró ya que estaba ocupado viendo a la gente con sus mascotas, comenzaba a extrañar a Millie. En cuanto a Dale este se ruborizó en un tono notable, aún para su abultado pelaje. Comenzó a ahogarse ligeramente por su nerviosismo, tosiendo y golpeando su pecho repetidas veces, Su amigo rápidamente tomó acción, golpeando la espalda del chico, buscando que se le pasara. Dale por fin logró pasar la comida que le detenía el respirar.
"¡¿Estas bien?!" Dijo Chip, muy exaltado. El contrario tardó en contestar, necesitaba tomar aire "Si... gracias"
Una vez se tranquilizó el ambiente Dale miró hacia el cielo y luego divisó a Chip, teniendo contacto visual por escasos segundos. "Sabes... esta pizza tiene un sabor diferente, no es doble queso." "¿Ah... no? ¿A qué sabe?" Dale sonrió con sus característicos dientes, mientras movía la cabeza mencionó "Sabe a recuerdos y aroma a nostalgia, eso es"
Chip sonrió con melancolía.

Pasaron el resto de la tarde en el parque, vieron el atardecer juntos ese día. Chip sentía una sensación extraña en el pecho. Dale estaba contento de por fin estar con su persona favorita en el mundo entero.

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BUENAS BUENAS!!! Actualización de Capitulo.

Muchas gracias por el apoyo a la historia, prometo seguir escribiendo y mejorando.
Si tienen sugerencias o comentarios escríbanlos, siempre los leo y me agrada mucho<3

Los quiero. 🤍✨