Illecebra ✠ lumity

꙳ ﹡ ⛧capitulo 6

Amity miraba atenta a la castaña que parecía evaluar todo su cuerpo, la mirada que le daba la ponía inquieta y algo nerviosa, estaban ambas solas en el estudio de danza, Amity tenía que ensayar su parte para la presentación de invierno que sería en un mes.

Todo tenía que salir perfecto.

Amity lo creía así, toda su vida se estuvo preparando para este momento y por fin se le estaba dando la oportunidad, pero la directora que le había tocado está vez, no parecía ser muy amable que se diga.

Luz tenía todas las cartas sobre la mesa, su plan era muy sencillo, no tenía que hacer mucho. Únicamente, hacer a la pelimorada un poco menos profesional.

— ¿Empezamos? —cuestiono Amity mirando curiosa a la castaña.

Luz se acercó a la pelimorada rodeando a la chica, con la intención de intimidarle.

— ¿Qué edad tienes, Blight? —pregunta de repente.

—Veintiuno.

— ¿De dónde eres?

—Los Ángeles. —respondió casi enseguida.

Luz asiente lentamente y se posa frente a la pelimorada mirándole fijamente.

— ¿Por qué te gusta bailar?

—Me gusta bailar, la sensación de tener la libertad en mis pies, hacer lo que quiero.

Luz entrecierra sus ojos.

—Bailar no es lo mismo que ser libre. —recita caminando de un lado a otro—Puedes dejar que la melodía inunde tu cuerpo y dejar salir todas tus emociones por medio de una danza. Pero es muy diferente a ser libre y dejarte llevar por quién eres en realidad.

Amity parpadeo varias veces sin lograr comprender del todo las palabras dichas por aquella extraña mujer. Su voz sonaba como si en vez de estar preguntando algo, estuviera declarando con su boca palabras misteriosas.

— ¿A qué quiere llegar con todo esto, señorita Noceda? —cuestiono.

—El cisne blanco muestra un lado de la historia que todos quieren ver. —explico— Pureza, armonía, debilidad y fragilidad. —dio un paso hacia la pelimorada— ¿Cuál de todas te representa? ¿Con cuál te sientes más a gusta?

Amity mordió su labio bajando su mirada—Pureza. —admitió.

Luz enarco una ceja mirando fijamente a Amity, cavando muy dentro de aquellos orbes ámbar inocentes.

— ¿Por qué? —La pelimorada tragó saliva.

—Porque soy virgen. —soltó de repente, rápidamente tapa su boca avergonzado.

Luz sonrío ladina, ella ya lo sabía.

—Entonces consideras tu virginidad como un pacto sagrado con la pureza, aún, cuando tu mente piensa y desea otras cosas.

—No se porque tomamos este camino... Yo solo quiero bailar.

—Y lo harás. Pero es importante descubrirte a ti misma, antes de dar un paso en un papel que será parte de ti —se aleja un poco para tomar el control de los altavoces—. Baila y muéstrame como puedes ser un buen cisne.

Amity asintió aceptando su petición, Luz se mantuvo al margen y le dio play a la música instrumental. Amity preparo sus zapatillas blancas y fue colocándose de puntillas siguiendo el ritmo de la música en conjunto con la coreografía.

Luz miraba fijamente sus pies moverse, su rostro estaba serio, Luz alzó una ceja notando la rigidez que tenía en su cuerpo, lo muy frágil que se veía. Luz sentía su cuerpo tensarse, pues era mucha vulnerabilidad para su estabilidad.