Don't cry

Finito Camino

El rugozo pedaso de tela que ha mi cuerpo sostenía se tornaba hielo antes que lo imagináramos.

La densa nieve formaba capas lazadas entre si que impedían el paso a cualquiera.

Mi respiración era lenta y mi corazón latía a mil, no tengo idea de el porque de eso, que habíamos hecho mal, nada. Claro habíamos escapado y ahora nos encontrábamos en medio de la nada, buscando un desconocido destino.

No puedo omitir palabra alguna, lo único que deseo realmente es llegar a un lugar donde pueda dormir y ser sostenido por los brazos de aquel hombre al que tanto amaba y acompañaba en este largo camino.

De pronto, caí en la fría y tortuosa nieve débil y sin esperanza alguna.

*Alfred*

A pesar de estar cansado me encuentro ansioso de llegar a aquel lugar y aquel paraíso que contaba con la mas hermosa vista hasta para el critico mas estricto.

Sus aposentos eran tan hermosos como el mismo sentimiento del amor, la calidez de ese lugar no se consideraban a nada mas. Excepto a los brazos de mi Artie, cada vez que lo siento en mi regazo niatros corazones se coordinan y veo una esperanza para ambos.

Escucho algo cae en la nieve, era Arthur.

Me aproximo a levantarlo y escucho su respiración, jadea por aire.

Lo levante entre mis brazos y le di un suave beso en la frente mientras él se aferraba a mi cuerpo cayendo en un dulce sueño.

Le dedico una sonrisa y me encamino a un lugar para pasar la noche.

Penso en todo por lo que tuvimos que pasar y que la pelea por fin dará frutos. Mientras camino me fijo en el pálido rostro de mi amante, sus labios entrecerrados y sus agotados párpados siempre lo hacían ver hermoso. Claro que todo en el era hermoso.

Estaba tan embobado ante su rostro que choque contra un árbol verde y frondoso ...... Espera, que acaso la nieve se había dejado de sentir y ni siquiera me di cuenta.

Al parecer el mito era cierto.

Esta era una mansión un tanto escurridiza, solo con la fuerza de la esperanza de una nueva vida se encontraba.

Me acerco a la puerta y suspiro felizmente.

Toco una vez... Nadie abre
Toco por segunda... Nada.

Cuando estoy a punto de rendirme e irme de ahí, la puerta se abre y no logro visualizar a el individuo dentro de la casa.

-emm...- se escucha un voz, es cuando volteo a ver abajo, era un pequeña niña.

Sus ojos eran como el vino y sus cabellos negros eran como una oscuridad nocturna.

-Hola, pequeña- le digo y me quedo a su altura- Están tus papis?

La niña abre un poco mas la puerta quitando todos los seguros que impedían el pase y se va corriendo por un enorme pasillo que parecía eterno para después pasar y desaparecer en una de las puertas de este.
Paso mi mano sobre el brillante rostro de mi acompañante y deposito un pequeño beso en su mejilla, estoy preocupado por que algo le pase

Desvío mi mirada pues escucho una risa segunda de la niña con un hombre alto recorriendo el pasillo a carcajadas.

Me levanto con Arthur en brazos, dandome cuenta de que el hombre me mira con cierto rencor.

Si, hay muchas razones para ello, como que quien lo desterró fue mi padre quien era igualito a mi. Ahora soy su imagen en vida.

Era justo como lo recordaba, rubio cenizo, de ojos amatista y esa mirada fría con la que siempre veía a los Jones.

-Ve con Mami. Quieres?- dirigiéndose a la pequeña quien ya se encontraba de camino a el interior.

El sujeto suelo se quedo viéndome como si quisiera dejarme helado. De inmediato entendí.

- Solo quiero saber si él se puede quedar - digo para después rogarle- Lo único que desearía es tenerlo a mi lado siempre.

No volteo a verle pero juraria que su cara seguía siendo la misma.

- Les mostraré su habitacion- fue lo que alcanze a escuchar después de que me hiciera pasar.

Caminé por el eterno pasillo y frente a mi marchaba iban que no parecía tener el mejor humor.

Se detuvo en una puerta distinta a las otras. Esta hecha de madera de las mas finas y era natural, el holor a pino se distingue desde mi lugar.

Sigue caminando hasta llegar a la ultima puerta a lo largo del pasillo, la abre y nos lleva a otro camino escaleras abajo.

Abre otra puerta que se encontraba cerrada con seguridad extra. Tuvo que abrir como 3 cerraduras para dejarnos pasar a el sótano que parecía una habitación de lujo a mi parecer.

- No puedo imaginar como serán las otras recamaras- digo pensando en voz alta y mostrándome maravillado.

- Considerense 2 criminales escondiéndose de la ley en una mansión fantasma- dice frio.

- Espera- digo asustado mirándole - ¿Como que fantasma?

Me miro como enojado para luego reír a carcajadas.

- ¿Enserio eres tan estupido para no reconocer una broma?- dijo saliendo de ahí.

Inspecciono la habitación completa y veo una gran cama en donde deposito a Arthur.

Su cuerpo siempre fue muy delicado y su rostro era tan pálido que parecía no vivir.

- Mi amor, despierta- dije dándole un beso en la frente - ya llegamos

Se fue despertando poco a poco y al verme me dedicó la mejor sonrisa para después abalanzarse sobre mi para que yo pudiera darle un beso.
Fue un beso lento y cruel, todos los sentimientos escondidos han salido ya a la luz.

Rompemos suavemente el beso y me dedico a acariciar su suave cabello.

- Te amo tanto, Alfred- me dice Arthur como desesperado, pareciera que pensara que el fin del mundo se encontrara cerca.

- Yo te amo aun mas, Mi lindo Arthur- es lo ultimo que digo antes de darle otro beso mas apasionado.

To be continued...

Holaaa~ ¿Como han estado? Perdón por tardarme otra semana, pero no puedo escribir bien y terminé en el hospital gracias a el estrés de las tareas.

Como sea, aquí lea traigo lo prometido.

Necesito decirles algo muy importante, a partir de aquí la niña esa sera la hija de dos personajes y habrá Rochu (Rusia x NyoChina, porque me acabo de enterar de que los hombres no pueden parir) esto porque... Amo el Rochu~ *v*

Bueno mijitos, Plis piquenle a la estrellita cool y comenten maldiciendome por no actualizar en un mes.

Mari.