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Jimin había terminado de almorzar hace un rato y ahora se encontraba sentado en su tocador, maquillándose sutilmente; siempre ha preferido los looks sencillos antes que algo demasiado extravagante, solo sus gustos.

Seokjin se comunicó con él en la mañana para confirmarle que si iría por él y lo llevaría a su departamento en la tarde, llevaban dos semanas así. Estaba muy emocionado a decir verdad, Jin se estaba convirtiendo en una muy buena compañía para el rubio, las risas nunca faltaban y bueno, los besos tampoco. Simplemente cuando estaba con él Jungkook dejaba de existir por algunos momentos.

Terminando de retocar sus ojos y el rubor, su teléfono sonó notificándole que Seokjin ya estaba fuera de su casa. Se paró rápidamente, acomodó sus ropas y se miró por última vez en el espejo, esos jeans ajustados en su trasero y rectos para abajo se le veían demasiado bien, los amaba, demasiado cómodos y bonitos.

Sin falta pasó por la habitación de su hermana para despedirse, como de costumbre en este último mes.

Abrió la puerta abruptamente asustando a la peli negra.

—¡Adiós Soo!— Exclamó con una sonrisa de oreja a oreja. Cerrando la puerta un poquito, sólo poquito fuerte.

—¡Bye Jimin! ¡Usa protección!—Gritó para que el menor la escuchase a través de las paredes.

Jimin rió bajando las escaleras.

—Hola Jinnie.—Dijo finalmente al abrir la puerta principal.

—Hola minnie, estás muy bonito hoy.—Coqueteó el más alto regalándole una sonrisa y un beso en la mejilla, sonrojándolo.

—También estás muy guapo.—Soltó de vuelta mirándole a los ojos y ladeando su cabeza.

—¿Vamos andando?—Sugirió el mayor tomándole de la mano.

Dios, la mano de Jimin era tan chiquita junto a la suya que se le derritió el corazón, lo tenía loquito por él.

—Vamos.

Ambos se dirigieron al lujoso auto y se pusieron en marcha.


(...)


Por otro lado Yoongi y Taehyung le hablaban desesperadamente a Jungkook sobre que si no comenzaba a actuar perdería a Jimin.

—¡Joder, ya basta¡ Ni Jimin ni yo queremos nada con el otro, paren de insistir.—Exclamó fuerte, casi levantándose del sofá en el que estaba.

—No te hagas Jungkook, estás tonto por Jimin y a mí no me lo niegas.—Dijo Yoongi cruzándose de brazos y mirándolo con los ojos entrecerrados.

—Y a Jimin también le gustas, hermano.—Agregó Taehyung.

El tatuado lo miró detenidamente.

—¿En serio?—Preguntó.— No estás bromeando, ¿Verdad?

—Para nada, mi novio no está bromeando. Sinceramente nosotros no deberíamos estar diciéndote esto, pero hay casos extremos y este es uno de esos.— Habló el más pálido de los tres.— A Jimin le gustas, me lo confesó a mí, su mejor amigo.

—Pero ya vi que está saliendo con alguien más, mucho no le gusto.—Suspiró.— Además, ¿No era yo malo para Jimin?

—Ese mismo le pregunté.— Habló su amigo y se encogió de hombros.

Yoongi rodó los ojos.

—No te negaré que te comportaste como un animal idiota, pero ya sé tu historia. No te enojes con Tae.—Se levantó del sofá y movió sus pies en dirección a Jungkook.— Pelea por él, no sabes cuánto te quiere Jimin y lo estás desperdiciando, muévete o lo perderás.— Ubicó sus blanquecinas manos en los hombros de Jungkook y lo zamarreó.— ¡Hazlo ya! ¡Nosotros te ayudaremos!

—¡ESTÁ BIEN! Pero para de moverme, por favor.

—Amor, basta de tocar a mi mejor amigo.

Tae ya estaba un poco harto.

—¿Entonces?— Se dirigió al mayor.

—Jimin me gusta mucho, lo voy a intentar.— Admitió ya harto, asimilándolo él también.

—¡Si!

El peli negro procedió a saltar sobre su novio para celebrar y Jungkook los miraba con una media sonrisa desde el sillón. Deseando que el pequeño rubio rabioso estuviera así con él. Quizás.




(...)



—¿Estás bien?— Inquirió Seokjin.

—Completamente bien.— Sonrió tocando su pecho, haciendo dibujos imaginarios.

—Deberías venir aquí más seguido, ya me haces falta. ¿Qué me hiciste Park Jimin?— Soltó un suspiro exagerado con una cara graciosa.

—Nada, solito caíste en mis encantos.

Ambos se carcajearon felices. El mayor besando los cachetitos del más bajo y acariciando sus hebras. Y nuevamente volvieron a fundirse en el otro; con besos suaves y apasionados, movimientos lentos y frenéticos, sacándoles miles de gemidos y suspiros. Buscando olvidar, los dos.















es cortito, pero q piensan? :3

let's play 🏹 kookmin; au Donde viven las historias. Descúbrelo ahora